España, fútbol en estado de ebullición
- 07/02/2024 00:00
El Atlético de Madrid y el Athletic inician una semifinal a dos partidos por la Copa del Rey, que podría deparar una eliminatoria de enorme nivel, siempre y cuando la suspicacia por las decisiones arbitrales desaparezca
El Atlético de Madrid y el Athletic de Bilbao disputan hoy el primer partido de una de las dos semifinales de la Copa del Rey, posiblemente el juego más atractivo e intenso por el momento futbolístico que atraviesan ambos clubes, posicionados entre los cinco primeros puestos de la Liga de España. La otra semifinal se dirime entre el Mallorca y la Real Sociedad, quienes iniciaron ayer su llave. Empataron 0-0 dejando abierta la clasificación para el partido de vuelta.
Esta competición le brinda a los dos clubes que avancen a la final, la clasificación a la próxima millonaria Supercopa de España que se disputa en Arabia Saudita. Sumando igualmente los beneficios económicos, la Copa del Rey es un título codiciado del que ya fueron apeados el Barcelona y el Real Madrid, “salvando” a quien levante el trofeo de la temporada.
Las semifinales de la Copa del Rey se disputan en un ambiente futbolero español que transmite la sensación de que La Liga, su principal torneo de primera división, está en un estado de ebullición anímico que en cualquier momento puede desencadenar una reacción incontrolable que involucre a aficionados, instituciones, jugadores y cuerpo arbitral, en una indeseable situación.
Se llevan jugados 23 partidos de 38 que corresponden a cada club (faltan 15 fechas), y cada jornada que se disputa hacia el final de la Liga se alimenta una atmósfera ofuscada con una retahíla de controversias y opiniones sensibles, derivadas del cuestionamiento por las decisiones arbitrales y el uso del VAR.
Se espera, o más bien se desea, que este ambiente de la primera división no contamine las semifinales de la Copa del Rey y que al final de cada partido se hable más sobre el nivel y la calidad del juego, que de las decisiones de los árbitros como condicionantes o determinantes en el resultado de un partido.
El árbitro central designado para el encuentro de hoy es Alejandro Hernández Hernández. Iñaki Williams, uno de los hermanos Williams que son dupla, sensación y determinantes en el juego del Athletic de Bilbao, ha querido con sensatez retirarle leña al fuego mediático de cara a los partidos, declarando en el programa El Larguero de la Cadena Ser: “hay que dejarles tranquilos. Bastante presión tienen (los árbitros) y los jugadores a veces tampoco ayudamos. Los que más se quejan son los que más se tienen que callar. Los de la zona media y baja (clubes) son los que más se pueden quejar”.
Se ha ido difundiendo la afirmación, cada vez más propagada, de que hay un complot arbitral destinado a favorecer la consecución del título al poderoso Real Madrid, que se podría entender también como una manifestación tendiente a restar méritos a la capacidad de su juego y las cualidades de sus jugadores para marcar una clara diferencia en el campeonato.
Incluso en aquellos partidos en que no disputa directamente, pero que involucra a alguno de los clubes rivales que le desafían su liderato en la liga, como el del pasado sábado entre el Girona y la Real Sociedad (cuyo resultado 0-0 impedía al club gerundense igualar en la punta al Madrid), se liberó en la tribuna ante una decisión arbitral cuestionada por la anulación de un gol, el cántico a coro de los aficionados: “Así, así, así gana el Madrid”.
La crispación en la tribuna y la cancha es evidente. De las principales ligas europeas de primera división, la española se proyecta como la liga en la que las decisiones arbitrales, sobre todo aquellas apoyadas en el VAR, son las más cuestionadas por arriba de la liga inglesa, la italiana, la francesa, la portuguesa, etc. Esa herramienta tecnológica que se incorporó a este deporte con el propósito de aportar transparencia y decisiones justas para todos los involucrados está en tela de juicio.
Aunque no se debe olvidar que el arbitraje en España también tiene un sobresaliente lunar, relacionado con el llamado Caso Negreira, en el cual se comprobó por años el pago del Barcelona F.C. a José María Negreira, ex árbitro y ex vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), para asesorarlos sobre el tema arbitral, lo cual todavía sigue rondando las investigaciones en los juzgados.
Las tensiones por la actualidad económica del club catalán y su irregular rendimiento deportivo en la presente temporada, lo tienen al borde de “un ataque de nervios”. Ello ha llevado a que su entrenador Xavi Hernández, anunciara su renuncia al término de la Liga. Se sienten también perjudicados por las decisiones arbitrales y la semana pasada su presidente, Joan Laporta, lanzó una explosiva declaración al afirmar: “La liga está adulterada”. Una referencia que se entiende va en dirección a que se favorece claramente al Real Madrid.
Según recoge la prensa española, el entrenador Xavi Hernández se sumó a la afirmación de su presidente, provocando la respuesta mordaz e irónica del entrenador merengue Carlo Ancelotti, quien respondió: “Yo soy un profesional y, como tal, no quiero bajar a este nivel. Por respeto al fútbol español, no voy a hacerlo. Así que no preguntéis más del tema. Ese nivel no es profesional”.
Como se deduce, las aguas están revueltas, hay marea alta en el fútbol español, puede haber estragos.
“Los colchoneros” y “Los leones”, como se les denomina en el argot popular al Atlético de Madrid y al Athletic de Bilbao, llegan a este primer partido en el Estadio Metropolitano, con los madrileños buscando alcanzar una diferencia que les permita llegar al encuentro del 29 de febrero con cierta holgura, para asumir con la menor presión posible la disputa del cotejo de vuelta en el Estadio San Mamés.
Al legendario escenario deportivo, los bilbaínos lo han convertido en el presente curso, en un reducto inexpugnable obteniendo excelentes resultados. Llevan 13 partidos ganados, de ellos seis triunfos han sido en casa en la Liga y dos en la Copa del Rey en forma consecutiva. Se han mostrado con un buen balance ofensivo, pero igualmente sólidos defensivamente; acumulan 11 partidos manteniendo su portería sin permitir gol, en cero.
Es la quinta ocasión consecutiva en las que están en semifinales de la Copa del Rey, un trofeo que anhelan alcanzar con venencia. Son el segundo club más ganador de esta competencia con 23 títulos, en las diferentes denominaciones que tuvo desde 1903. Lo alcanzaron por última vez en la temporada 1983-84. Las últimas dos finales que jugaron fueron la del 2019-20 y 2020-21, las cuales perdieron una contra la Real Sociedad y la otra con Barcelona. Su entrenador desde 2022 es Ernesto Valverde, un avezado técnico que ha logrado consolidar un plantel reconocible por su estilo de juego vistoso.
Al frente estará un Atlético de Madrid cuyo entrenador Diego Simeone lo está dirigiendo desde 2011; son 13 años en los que el club ha ganado títulos y disputado finales posicionándole entre los más importantes de Europa. Él como técnico recibiendo varias distinciones. El Atlético de Madrid está a 10 puntos del Real Madrid en la liga española, el domingo pasado le empató 1-1 en el Santiago Bernabéu, y los eliminó en octavos de final en esta Copa para estar hoy en las semifinales. Es un equipo hecho a su gusto y exigencias, que defiende muy bien y suele ser letal en el contraataque.
Son dos equipos de primer nivel que tienen en común el parecerse sus camisetas principales por el rojo y blanco a rayas verticales que suelen vestir como locales, aunque diferentes en sus propuestas de juego. Esperemos que al concluir el partido se hablé del fútbol que exhibieron ambos, que la olla de presión mediática que se ha estado calentando baje de temperatura. Que la exposición deportiva en el campo de juego de los equipos, prime sobre todo lo demás que rodea a este apasionante juego.