La cultura prehispánica a través del arte contemporáneo

Panamá es un país con una cultura e historia llena de personajes importantes que vivieron en sus tierras desde antes de la época precolombina. Con el objetivo de preservar y resaltar la importancia de la historia panameña, el artista Aristides Ureña Ramos creó el proyecto “Las princesas y sus manes, las Venus de Panamá”. El mismo cuenta con una multiplicidad de disciplinas como son la música, el video, el documental, la escultura y la artesanía, entre otras.

En una conversación con La Estrella de Panamá, el artista panameño, criado en la ciudad de Santiago de Veraguas, llegó a Panamá desde Italia y algo llamó su atención. “En el arte y la artesanía, Panamá ha abandonado por completo su identidad”, dijo. Esto le generó preocupación por la pérdida de la cultura panameña, sobre todo la que se tenía presente desde la época prehispánica, y decidió introducirse en un mundo que le permitió conocer todo sobre la historia panameña antes de la llegada de los españoles, hace más de 530 años.

Ureña explicó al diario que su misión era despertar el interés de los panameños por su cultura y amor por el país a través del arte contemporáneo. “Antes de la llegada de los españoles, los indígenas practicaban a través de la orfebrería en oro y del barro, distintas formas de arte, y nosotros hemos perdido ese legado de cultura”, dijo.

En ese momento decidió darle a Panamá una oportunidad para volver a conocer y vivir su cultura prehispánica y comenzó a trabajar en un proyecto al que llamó “Las princesas y sus manes, las Venus de Panamá”, una idea artística que le permitiera a los panameños tener “una mirada hacia nuestro pasado tras varias décadas de abandono”, explicó al artista.

El proyecto cuenta con 42 estatuas, y cada una representa un personaje indígena presente en la época prehispánica o una representación de esta cultura. Meri Nwüore, que en gnäbere significa “muchacha bonita”, es uno de los personajes presentes en el proyecto. Es la milenaria personalidad de la cultura de los pueblos originarios representada en una de las estatuas hechas por Ureña.

“La madre de la que todos los panameños procedemos, el origen de nuestra identidad. Nuestra Meri Nwüore lleva en un vientre el fruto de nuestro origen y está en dulce espera, con su carga de esperanza, justicia y fe en el futuro”, describe el artista.

De igual manera, Ureña no solo se basó en los personajes para brindar homenaje a la cultura panameña, sino que utilizó los materiales que en su momento eran conocidos y utilizados por los indígenas de ese periodo histórico, como el barro.

“El barro utilizado viene de tres sitios completamente diferentes: La Peña de Santiago, El Naranjal, y La Arena de Chitré, que tienen la característica de ser arcilla roja, la cual era utilizada por los indígenas en su época”, explicó el artista. Asimismo, Ureña contó con la ayuda de un artesano chitreano que lo ayudó con el proyecto juntando la cerámica en sus estatuas.

Aristides Ureña define lo contemporáneo como “el arte que fusiona una diversidad de multidisciplinas que trabajan juntas para construir una obra”. Durante su conversación con La Estrella de Panamá hizo mucho énfasis en definir su proyecto como un arte contemporáneo, ya que logró hacer distintos “llamados” como él lo define: “Hay un llamado a la recuperación del barro como material para el arte, un llamado al estilo prehispánico, a rebuscar nuestros lideres y a la restauración de la música”.

Ureña fue criado como músico en la capital veragüense y esto también le permitió añadir una idea más a su proyecto: la música prehispánica. De esta manera, hizo cinco composiciones musicales que acompañan este proyecto. “Están hechas como ópera clásica con la intención de conocer cada instrumento y su forma de ser tocados en aquella época”, dijo.

La reunión de la Conferencia de las Partes (COP19) de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Cites) se lleva a cabo en Panamá desde el lunes 14 hasta el 25 de noviembre en el Panamá Convention Center de Amador.

La cumbre se basa en definir las políticas que se deben llevar a cabo para proteger la biodiversidad de animales y plantas en peligro de extinción en el planeta.

Aristides Ureña utilizará el espacio de esta cumbre para mostrar 12 de las estatuas que son parte de su proyecto. “Así como tratamos de proteger la flora y fauna panameñas, que son parte del patrimonio histórico del país, mi intención es despertar el interés por la historia y la cultura que nos define desde hace más de 500 años y que deseo no muera a futuro”, concluyó el artista panameño, con la esperanza de que Panamá recupere poco a poco la historia que ha ido perdiendo con el pasar de los años.