Sorpresas y nuevos sabores

Mientras se daban los últimos toques en el salón, ya algunos se preguntaban, ¿dónde está el enólogo? Estaba frente a nosotros. Muy joven, de barba, y tocando guitarra flamenca. Esa fue la primera sorpresa de la noche en el restaurante el bodegón durante la presentación de los vinos Clos Pons, distribuidos en Panamá por H. Tzanetatos.

Simbad Romero, el enólogo anfitrión comentó a los asistentes que tocaba la guitarra desde la niñez y al ver el instrumento en la sala de presentaciones, pues no lo dudó y se puso a tocar.

Más adelante, cuando se inició el programa, Romero nos relató cómo por una helada que duró más de tres meses y acabó con una plantación de olivos, la familia Pons, dedicada exclusivamente a la fabricación de aceite de oliva decidió incursionar en el mundo de los vinos.

‘Con los años hemos ido experimentando a ver qué variedad se adapta mejor a nuestro terreno y al día de hoy, tenemos una serie de cepas que están completamente adaptadas, aunque muchos se asombran del atrevimiento que hemos tenido de plantar uvas en un lugar con condiciones climáticas extremas como las de Les Garrigues’, dice el enólogo.

Costers del Segre es la denominación donde la bodega y el viñedo están ubicados. En esas latitudes, el rango de temperaturas durante el día va de los 18° a los 45°C.

‘Como bodega somos nuevos y la filosofía es hacer vinos modernos con una presentación excelente, los profesionales somos todos jóvenes, así comos e trata de una empresa joven en una denominación nueva. Queremos hacer productos que estén fuera de las ideas preconcebidas que se pueda tener de la región donde estamos ubicados’, detalla.

Y aquí es donde se presentaron las demás sorpresas de la noche.

En la degustación fueron presentados tres vinos, Sisquella, 2011, una mezcla de garnacha blanca, albariño y moscatel de Alejandría; Alges, 2009, mezcla de tempranillo, garnacha y syrah y por último, Roc Nu, mezcla de tempranillo, garnacha y cabernet sauvignon, Se acompañaron con tapas de El Bodegón.