Las semillas, una moda con sustento alimenticio

Actualizado
  • 21/01/2020 12:50
Creado
  • 21/01/2020 12:50
Ahora con las dietas vegetarianas y veganas, las semillas han adquirido mayor visibilidad y sus beneficios se hacen cada vez más conocidos

Las semillas han tenido un impacto en la alimentación de los humanos desde la Antigüedad, cuando las sociedades primitivas dependían de los sembradíos de aquellos pequeños granos que eran cocidos, tostados o simplemente añadidos a la cocina de carnes cazadas u otros vegetales cosechados. 

Estos complementos alimenticios también se han empleado en medicinas, colorantes, cosméticos, venenos e insecticidas y son un sustento para los ganados y otras especies. La utilización de semillas para el consumo humano es un mundo que no se ha logrado explorar del todo, sin embargo, las dietas vegetarianas que han tomado auge en los últimos años han dado visibilidad a las semillas y sus beneficios para la salud.

Según la dietista-nutricionista Raquel Bernácer, miembro de la Academia Española de Nutrición y Dietética, la importancia de estos pequeños pero importantes componentes de una dieta balanceada reside en que añaden textura, sabor y un toque diferente en las recetas. "Una vez que se prueban, se confirma que son productos muy versátiles, sabrosos y fáciles de utilizar en la cocina", comentó Bernácer al diario El País.

La fiebre por la semilla de chía es un beneficio a la reducción de grasas en el cuerpo.

La fiebre por semillas como la chía, lino, de calabaza y granada, entre otras, más que una moda en algunos lugares, posee beneficios innegables para la salud. Quienes definen sus estilos de alimentación como vegetarianos o veganos incluyen estos ingredientes casi como prioridad por sus similitudes con las proteínas, fibras y grasas naturales que sustituyen -en algunos casos de forma efectiva- las grasas animales. 

Pese a sus grandes propiedades de ayuda a la digestión e incluso a enfermedades, no se recomienda ingerir grandes cantidades de estas semillas, sino mantener porciones pequeñas en comidas y meriendas a lo largo del día. 

"La chía se suele consumir remojada en leche o alguna bebida vegetal, formando una especie de pudin", expresó Bernácer. Por otro lado, un apunte de la prestigiosa Clínica Mayo, en Rochester, Minnesota (EE UU), arrojó que la chía "contribuye al control de peso, pues su contenido en fibra favorece el proceso digestivo y modera el apetito por su efecto saciante. Un puñado de semillas de chía contienen cinco veces más calcio que un vaso de leche, el triple de antioxidantes que los arándanos, tres veces más hierro que las espinacas, el doble de proteína que cualquier verdura y más potasio que un plátano". 

Almendras, semillas de calabaza y de lino contribuyen a un mejor control de peso y añaden mayor calcio y fósforo al cuerpo.

Incluso, para evitar el consumo excesivo o constante del chocolate, las semillas de calabaza llegan a ser un suplemento saludable y con mayor proporción de triptófano, un aminoácido que estimula la secreción de serotonina. De parte de las semillas de sésamo, se absorben nutrientes como calcio, de la cual se anotan cinco veces más que en un vaso de leche con solo una cucharada de ella. 

Sin embargo, se debe tener en cuenta que las semillas pueden no ser una opción viable para todo público, ya que algunas —como la de lino— pueden presentar dificultades al masticarse y no ser digeridas de manera correcta, creando afecciones en el estómago o los intestinos. 

Aun así, no es algo de lo que preocuparse mucho, ya que son más los beneficios que las dificultades de ingerir estos ingredientes. Aunque sea poca la cantidad que añadamos en las comidas, lo que aseguramos al organismo es un aporte importante de nutrientes y  proteínas, minerales, ácidos grasos, vitaminas y fibra. Los ácidos grasos son esenciales por el consumo de omega 3 y 6 y su virtud principal es que refuerzan la salud cardiovascular. Asimismo, la fibra contribuye de manera importante al bienestar intestinal.

Lo Nuevo
comments powered by Disqus