Un día distinto en San José

S an José ha cambiado en estos días. Es lo que se percibe en el ambiente, lo que se aprecia entre su gente. Los X Juegos Centroamericanos han captado la atención mediática en este país, donde el fútbol manda con autoridad, y los espectáculos con artistas como Maná copan los coliseos y escenarios.

¿Hay alguna forma de escapar del embrujo que produce una justa deportiva, aun cuando sea en un nivel como el de esta región del continente? Costa Rica ha sido un anfitrión amable, cortés y lleno de curiosidades para todos los que estamos de visita en esta tierra. Es imposible ocultar lo pintoresco de su trazado de calles, sus edificios y un clima de excepción.

Sí, siento que al menos esta ciudad ha puesto su mejor cara al resto de Centroamérica. No hay manera de describir la forma como el local extrema sus atenciones para dejar bien a su país en estas competencias. Eso, siento, se nota, porque es muy expresivo.

Como panameño, he aprendido aquí algunos detalles que creo que pueden desarrollarse en nuestro beneficio como país. Nada del otro mundo, es simple sentido común y voluntad de hacer las cosas.

Deportivamente, la fiesta ha sido muy buena. Siete países, juegos pequeños, pero grandes en la confraternidad y la competencia. Mientras avanzan los días, la oportunidad de conocer algún sitio en la capital tica ha resultado imposible. Se compensa con el trato de los lugareños, porque el rigor exige presencia en los diferentes coliseos, donde Panamá compite con aspiraciones de medallas de oro.

PERIODISTA