Nacional de béisbol mayor, una experiencia frente a la pandemia

El torneo de béisbol mayor está en sus primeras entradas, pero no hay duda de que el experimento hasta ahora está cumpliendo con las expectativas.

Aún falta un largo trecho por recorrer, pero las medidas sanitarias impuestas han resultado efectivas y, salvo, por las naturales lluvias de la época, los partidos se realizan según lo programado.

La osada idea de efectuar el campeonato a pesar de la pandemia y casi que, al finalizar el año, ha supuesto toda una inédita experiencia en lo referente a medidas de salud en materia deportiva.

Decenas de personas relacionadas con el Ministerio de Salud (Minsa), Caja de Seguro Social (CSS) y Fedebeis han tenido que ver con esta iniciativa, que ha impuesto una nueva actitud entre todos los actores involucrados.

La buena marcha hasta ahora del máximo torneo de la pelota local, es un espaldarazo a otras iniciativas similares que buscan salir del ostracismo que se vieron obligados a tomar, después del estallido de la pandemia.

Es cierto que aún falta un largo trecho por recorrer y lo que vive hoy el deporte istmeño tampoco es nuevo en otras latitudes. No obstante, el paso decidido y contundente que dio el béisbol fue importante y, por qué no decirlo, envalentonó a otros a imitarle.

Ahora bien, todo podrá hacerse, pero con una nueva mentalidad en el comportamiento, sobre todo en el panameño común, muy dado a la informalidad.

Efectivamente, cualquier actividad deportiva podrá realizarse, siempre y cuando se guarden las normas de seguridad sanitaria recomendadas, y que se conformen las barreras pertinentes y adecuadas, entre ellos, los llamados comités de bioseguridad.

“Hasta el momento, y esperemos que continúe así, todo marcha según lo planeado”, señaló el doctor Saúl Saucedo, líder de la comisión médica de la Federación de Béisbol.

“Mantener el fenómeno de burbuja es fundamental”, dijo el profesional de la medicina al tiempo que expresó que “las normas de bioseguridad establecidas deben continuar, (porque) ello garantiza el proceso”.

El doctor Saucedo, junto con otros galenos, fue quien elaboró a mediados de año el protocolo de seguridad sanitaria, cuando el máximo organismo de la pelota local mantuvo la idea de efectuar el torneo suspendido en marzo pasado.

Para ello contó con colaboración de personal médico local y con material científico publicado en el exterior, ya que mientras que en Panamá aún se teorizaba sobre el tema, Japón y Corea del Sur realizaban sus competiciones de béisbol y, en otras latitudes, los futbolistas salían a las canchas.

Pero no todo ha sido color de rosa, ya que en medio de la cuarentena de los equipos participantes, previo al torneo, ocurrió una situación inesperada y que prendió las alarmas.

Varios peloteros coclesanos, incluyendo a su director Manuel Rodríguez, dieron positivo después de que, en una primera prueba, no fueran detectados.

En su momento, los galenos responsables de los exámenes, incluyendo al doctor Saucedo, explicaron que las primeras pruebas fueron las llamadas “rápidas”, las cuales resultaron negativas, principalmente, porque en su mayoría los examinados eran asintomáticos.

Sobre el particular, Saucedo indicó que lo ocurrido estuvo dentro de las proyecciones, teniendo en cuenta que el nuevo coronavirus es un “fenómeno de contaminación comunitaria”.

Lo cierto es que fue un momento crucial para el campeonato, ya que puso a prueba el protocolo de bioseguridad preestablecido, que dejó a los afectados en otra cuarentena, en tanto se hacían los exámenes pertinentes. El momento fue superado con entera satisfacción y cada uno de los involucrados se insertó nuevamente en la burbuja de sus respectivos equipos.

Pero el trabajo continúa. “El protocolo indica vigilancia permanente, donde interviene el subcomité de cada equipo, el comité de la Federación y las autoridades médicas”, explicó Saucedo.

“Ellos están en fenómeno de burbuja, donde hay vigilancia y seguimiento permanente”, destacó.

“Es sumamente importante la intervención del subcomité de cada equipo, la comunicación directa y constante que tenga con el comité médico de la Fedebeis, que a su vez informa diariamente a las direcciones regionales de salud”, añadió.

A propósito de las autoridades de Salud, hacemos mención de los profesionales que directa o indirectamente han estado involucrados en este torneo. Ellos son: Grettna Martínez, Mario Lozada, Yavier Gordón, Luis Pérez, Ayvar Hernández, Nadja Porcell, Toryk Arce y Justo Medina.

El éxito de una gestión, como es un torneo nacional en medio de una pandemia, conlleva muchas acciones responsables, entre ellas, un cambio de actitud de todos sus protagonistas.

En ese sentido, existe la posibilidad de que uno de los actores del campeonato rompa las reglas, lo que podría llevar al traste con todo lo trabajado hasta ahora.

El convite, la pasada semana, de un grupo de árbitros en el hotel donde se hospedan, captado para la historia en una foto, pareciera que rompe todos los esquemas de bioseguridad planteados.

Ahora, es muy posible que todo estuvo controlado y aceptado en su momento por las autoridades respectivas, pero aún así, es un riesgo que no debe correrse por la salud y la vida de todos los involucrados.

No hablamos de tomar acciones disciplinarias, pero sí un llamado de atención porque ninguno de los participantes es un niño, y mucho menos un adulto ignorante de sus responsabilidades.

Este no es momento para celebrar, sino para echar hacia adelante un campeonato al que algunos solo dieron horas de vida, y otros tantos apostaron que ni siquiera arrancaría.