El riesgo del negocio ¿Cómo se evalúa?

Primero es necesario conocer el nivel de riesgo y el impacto que este pueda tener los cuales son tres un evento de impacto alto, medio y bajo.

Para el manejo y la continuidad del negocio es necesario realizar una debida gestión de riesgo, el cual es un enfoque estructurado para manejar la incertidumbre ante una amenaza, esto ayuda a identificar, analizar y cuantificar las pérdidas y efectos secundarios para luego establecer las estrategias y acciones preventivas y correctivas.  Pero, cómo podemos manejarlo de una manera sencilla .

Primero es necesario conocer el nivel de riesgo y el impacto que este pueda tener los cuales son tres un evento de impacto alto, medio y bajo.  Por cada nivel existen criterios que permitirán la magnitud del impacto.  Algunos ejemplos:

Evento de riesgo alto: Algún decreto o ley: El gobierno impone una ley y hay que ejecutarlo por fuerza mayor. Otro ejemplo de evento de riesgo alto es el impacto financiero donde dicho evento afecta la solvencia y liquidez de la organización en la capacidad de hacerle frente a los compromisos.

Evento de riesgo medio un ejemplo puede ser fallas en la cadena logística que indica la posibilidad de que el cliente no reciba su mercancía o la fecha tope para entrega de trabajos definidos, esto hace relevancia a una fecha específica de entrega o de término.

Evento de riesgo bajo un ejemplo de ello son los tiempos cortos de entrega, la empresa lo puede superar sin mayor esfuerzo y finalmente como otro ejemplo es la suspensión parcial de las operaciones esto puede ser que un proceso vaya más lento, pero no interrumpe.

Una vez identificado el nivel de riesgo del evento, la empresa debe evaluar las consecuencias y para ello es necesario definir las tareas y cómo se va evolucionando.  Posteriormente se debe definir las acciones y estrategias según la prioridad y la información que se tiene.  La gestión de riesgo como mencioné son procesos con el fin de buscar e implementar algunas medidas o estrategias.  Estas acciones se deben clasificar acorde a la velocidad y duración del impacto.  Algunos ejemplos que te ayudarán a tener una guía.

Si el impacto es crítico: Acuerdos con terceros que apoyen la entrega o fabricación, gastar solo lo necesario o suspender toda venta que no genere ingreso mediato.

Si el impacto es moderado: Mantener abierto los canales de comunicación o reportar a la gerencia las condiciones especiales de los clientes de ser necesario para realizar cambios y ajustes con la finalidad de no perder el cliente.

Si el impacto es menor: No adquirir ningún compromiso comercial o laboral.

Si el impacto es crítico: Revisar la cobertura del seguro derivadas de una afectación grave, búsqueda de fondo o buscar alternativas para generar ingreso de manera rápida.

Impacto moderado: Renegociar con los proveedores.

Impacto bajo: Buscar nuevo proveedor.

Éstos ejemplos son una pequeña guía para que vayas evaluando y midiendo el riesgo del negocio.  Obviamente hay que realizar una matriz de riesgo donde se debe colocar un valor.  Sin importar el tamaño de la empresa es preciso anotar los posibles riesgos para tomar decisiones acertadas.