Grupos armados atacan dos campos de refugiados sirios en el Líbano

Varios grupos armados atacaron hoy dos campos de refugiados sirios situados en el este y norte del Líbano, donde causaron dos heridos por disparos e incendiaron varias tiendas de campaña, informó la Agencia Nacional de Noticias (ANN).

Los heridos se produjeron en un campamento situado en Hosh tel-Safiye, en el oeste de Baalbeck, en el valle oriental de la Bekaa, donde los asaltantes dispararon desde un vehículo todoterreno a una pareja de refugiados y robaron dos móviles y dinero.

Antes, grupos armados incendiaron varias tiendas de campaña de los refugiados sirios en la aldea de Masha, en la región septentrional de Akkar, limítrofe con Siria, según la ANN, que añadió que se inició una investigación para descubrir a los culpables.

El presidente de la municipalidad de esta localidad, Zakaria el Zohbi, denunció este ataque e instó a los dirigentes de seguridad a encontrar a los responsables y castigarlos. Estos incidentes ocurren después de la ejecución, el pasado viernes, del policía Ali Bazal por el grupo yihadista Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria.

Junto al grupo extremista Estado Islámico, el Frente al Nusra mantiene secuestrados con vida a 25 soldados y policías de más de una treintena que capturó en agosto pasado cuando combatió contra el Ejército libanés en la región de Arsal (noreste), limítrofe con Siria.

Hoy, por segundo día consecutivo, las familias de los militares cortaron la carretera de Qalamún, en el norte del Líbano, en protesta contra la gestión de esta crisis por parte del Gobierno, mientras los grupos yihadistas siguen amenazando con matar al resto de rehenes.

Ayer, los familiares exigieron al Gobierno libanés ejecutar a los islamistas que se encuentran en las cárceles libanesas. Desde el estallido del conflicto en la vecina Siria, en marzo de 2011, han aumentado los atentados, secuestros, enfrentamientos armados y otros actos violentos en el Líbano, dividido entre los partidarios y detractores del presidente sirio, Bachar al Asad.