¿Diálogo lento o cauteloso?

¿Q uién puede precisar cuánto es pronto o no para identificar avances reales para el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre EEUU y Cuba? Nadie se compromete a una respuesta en ninguna dirección. Al finalizar este viernes en Washington la segunda ronda de negociaciones entre la representante de Cuba, Josefina Vidal, y la diplomática estadounidense para América Latina, Roberta Jacobson, ambas calificaron de ‘alentadora’ la segunda ronda de negociaciones, pero a su vez eludieron por igual comprometerse con una fecha límite para anunciar el tan esperado evento. Sin embargo, el encuentro hemisférico del próximo mes de abril, por realizarse en Panamá, podría ser la fecha para tal anuncio.

¿Será la Cumbre de la OEA en la capital panameña el marco ideal para tal anuncio? Podría ser, pero nadie apuesta por ello. Se trata del ‘deshielo’ de cinco décadas de desconfianza. Y faltan solo cinco semanas para que Panamá albergue la Cumbre de las Américas.

La jefa de la delegación norteamericana, Roberta Jacobson, manifestó en rueda de prensa que aún es posible restablecer las relaciones diplomáticas para ese entonces. A finales de marzo se tiene previsto el tercer encuentro diplomático, pero, según explicaron Vidal y Jacobson, tendrá un carácter mucho más ‘técnico’ que político.

Los temas que podrían dilatar el restablecimiento de las relaciones son los temas fuera de la agenda acordada. Eso ocurrió el pasado viernes, y de continuar la tendencia, se podría dilatar el restablecimiento de las relaciones diplomáticas.

Por un lado, los representantes estadounidenses insisten en subrayar los Derechos Humanos como prioridad y, por su parte, la representante de La Habana, Josefina Vida, señaló la importancia que para su país tiene que Cuba salga de la lista de países que ayudan al terrorismo. Estar en la lista negra le impide a Cuba acceder a créditos en la banca internacional.

Pero el Secretario de Estado, John Kerry, no tardó en reaccionar para advertir que se trata de un asunto ‘por separado’, muy riguroso, y requiere el mandato del Congreso. Vidal dijo que había que crear un contexto adecuado para anunciar la reanudación de la relaciones, rotas en 1961.