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- 16/09/2011 02:00
CUBA. Cuba aseguró que ‘nunca’ aceptó discutir con el ex gobernador Bill Richardson una eventual liberación del contratista estadounidense Alan Gross, condenado a 15 años por espionaje, en su reciente visita ‘privada’, en la que hizo declaraciones ‘calumniosas’.
La liberación de Gross ‘nunca estuvo sobre la mesa durante los preparativos de su visita, lo cual se le aclaró al Sr. Richardson inmediatamente que lo planteó’, dijo la directora de América del Norte de la cancillería local, Josefina Vidal, en declaraciones escritas entregadas a la prensa.
Richardson, ex gobernador de Nuevo México, viajó a Cuba la pasada semana para ver a Gross y conversar con las autoridades cubanas sobre una posible excarcelación, pero dijo que tal posibilidad le fue negada tras una entrevista con el canciller Bruno Rodríguez.
En declaraciones a la prensa antes de marcharse dijo sentirse ‘decepcionado’, pues ‘no he podido visitar a Gross ni discutir su caso con el gobierno cubano’.
Tanto la familia del contratista de 62 años como el Gobierno de Estados Unidos, lamentaron esa negativa, alegando el crítico estado de salud del preso.
‘Se le recordó al Sr. Richardson que Cuba es un país soberano, que no acepta chantajes, presiones, ni prepotencias’, dijo Vidal, y agregó que la salud de Gross ‘es normal, de acuerdo con su edad y padecimientos crónicos’.
Gross ‘recibe una atención médica esmerada, lo cual pudo corroborar la Sección de Intereses de EEUU durante la visita consular que le hizo el pasado 9 de septiembre’ y en un encuentro de los funcionarios consulares norteamericanos con los médicos que lo atienden, el día 1 de ese mes.
El gobierno Cubano condenó a Gross a 15 años de prisión por actuar ‘contra la independencia y la soberanía’ de la isla al entregar equipos de comunicación satelital a personas consideradas opositoras por el gobierno, sanción que fue ratificada por el Tribunal Supremo.