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Gobierno recomienda nueva gestión para Barro Blanco
Actualizado
- 05/05/2015 02:00
Creado
- 05/05/2015 02:00
La Presidencia propuso la continuidad de la obra, sin la empresa Genisa. La comunidad indígena no acepta. El conflicto continúa
Casi tres meses después del inicio de las negociaciones, este lunes, el gobierno de la República de Panamá anunció la tan esperada decisión en torno al proyecto hidroeléctrico Barro Blanco.
A través de un comunicado enviado por la Secretaría General del Estado, la Presidencia dio a conocer su propuesta: el proyecto continuará, pero bajo la administración de una nueva compañía y no la actual, Generadora del Istmo, S.A. (Genisa).
El proyecto hidroeléctrico, cuya concesión fue aprobada en 2007, durante la administración de Martin Torrijos, está valorado en $130 millones y tiene un 95% de avance.
La decisión se tomó tras ser constatadas, durante el proceso de diálogo, ‘las recurrentes fallas administrativas y el manejo inadecuado' (de Genisa), plantea el comunicado.
Basado en lo anterior, el Gobierno se comprometió a ‘garantizar las acciones correspondientes, a fin de que la empresa asuma la responsabilidad legal, económica y social' de sus acciones.
El futuro del proyecto ‘bajo otra administración', continúa la nota de prensa, será definido, en conjunto, por el Gobierno de Panamá y la Comisión Indígena, ‘en función del bienestar de las comunidades'.
POSICIÓN DE LOS GRUPOS INDÍGENAS
El anuncio del Gobierno no fue bien recibido por el movimiento indígena M-10, que decidió retirarse de la mesa de negociación y proceder a realizar una reunión sin la participación de los delegados presidenciales.
Tras varias horas , la Comisión Indígena emitió un contra comunicado en el que detalla sus exigencias :
Suspensión definitiva de la construcción del proyecto hidroeléctrico Barro Blanco.
Que el Gobierno deje sin efecto el contrato de construcción de la empresa Generadora del Istmo, S.A.
No aceptar que ninguna otra empresa asuma o dé continuidad al proyecto de Berro Blanco.
Solicitar al Gobierno Nacional que, en lo sucesivo, el conflicto sea manejado por la Comisión Indígena, liderada por las autoridades tradicionales y administrativas y las comunidades afectadas.
El comunicado de la Comisión Indígena fue firmado por la cacica general Silvia Carrera; Manolo Miranda, del M-10; Crescencia Prado, diputada del circuito 12-3; Rolando Carpintero, alcalde de Munä; Jeremías Montero, cacique general Ködri, y Chito Gallardo, cacique local, todas estas autoridades de la región correspondiente al Tabasará.
Hasta el cierre de esta edición, ayer lunes, el Gobierno no había dado respuesta a la posición de las comunidades indígenas.
No obstante, Manolo Miranda, del M-10, señaló que ellos ‘esperan que el Gobierno se manifieste lo más pronto posible y se cierre Barro Blanco'. No se descartan cierres de calles en los próximos días.
LA POSICIÓN DE GENISA
Un tercer comunicado relacionado con el mismo tema fue emitido en el día de ayer. En este caso, se trataba de la tercera parte interesada, la empresa Genisa.
El documento enviado a este medio sostiene que Genisa ‘no ha sido notificada oficialmente de la decisión planteada' hoy por el Gobierno Nacional —que contempla la salida de Genisa de la construcción y administración del proyecto hidroeléctrico—.
La empresa dice haber valorado ‘siempre el diálogo' y asegura que mantendrá el apoyo y respeto a las autoridades nacionales y comarcales.
‘Estamos convencidos de que aún podemos lograr algún tipo de conciliación en el tema para evitar futuras consecuencias que afecten la seguridad jurídica del país', concluye el escueto comunicado de la empresa.
El proyecto fue paralizado el pasado 9 de febrero.
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Isabel de Saint Malo
‘ El dilema es atender el reclamo y cumplir los compromisos adquiridos',
VICEPRESIDENTA
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