Reunión con Terrientes sobre destino de la termoeléctrica

Los miembros de la Coordinadora Ciudadana de La Chorrera se reunieron ayer con el ministro de Salud, Javier Terrientes, para plantearle las razones que los motivan a oponerse a la ampliación de la termoeléctrica del distrito.

La actividad, realizada en el salón de conferencias del Hospital Nicolás A. Solano, de La Chorrera, se da luego de la represión que sufrieran los participantes de una manifestación que cerró la vía principal hacia Puerto Caimito, como rechazo a la ampliación de la central de generación de energía eléctrica.

Ese día, la protesta impidió el traslado de uno de los tres motores que serían empleados por la empresa Pan Am Generating La Chorrera para la expansión de la planta en ese distrito, ubicada en el sector Río Congo, El Arado.

Frente al ministro, los quejosos manifestaron que la compañía utiliza un combustible fósil que ocasiona daños a la salud.

Según Raúl Ossa, exlegislador y vocero de la coordinadora, con sus propios recursos económicos han pagado estudios clínicos a personas vecinas a la termoeléctrica, que han arrojado en su cuerpo partículas del elemento químico vanadio.

Terrientes, por su lado, señaló que se ha creado una comisión para el diálogo que debe iniciar el lunes. ‘Nosotros no tenemos potestad de hacer detener el traslado de los megamotores de la termoeléctrica', alegó.

En un comunicado, la empresa informó que los tres motores nuevos para la expansión de la planta ya están en las instalaciones.

‘La ampliación de la planta de energía en La Chorrera es el proyecto más beneficioso que se ejecuta en Panamá Oeste, y cumple con el propósito de brindar confort y seguridad energética a miles de hogares chorreranos', señaló la compañía