Extienden hasta mayo la vigencia del carné de solicitante en condición de refugiado

La Oficina Nacional para la Atención de Refugiados (Onpar) extendió hasta el 15 de mayo del presente año la vigencia de los carnets de solicitantes de la condición de refugiado que vencieron a el pasado mes de marzo. 

La extensión de la vigencia, que surge tras la propagación de COVID-19 en Panamá, fue publicada mediante la Resolución P-095-20 del 16 de abril de 2020

La Onpar, como adscrita al Ministerio de Gobierno (Mingob), reiteró que se mantiene el servicio de consultas a través del correo electrónico consultasonpar@mingob.gob.pa y la comunicación telefónica 512-7228/7229/7230.

Todas estas medidas pueden ser prorrogables conforme a la situación del Estado de Emergencia Nacional y las recomendaciones que emita el Ministerio de Salud.

En enero pasado, la Onpar mantenía una mora de 20 mil solicitudes de refugio pendientes por evaluar su admisión o no al trámite.

La extensión de la vigencia hasta mayo así como otras acciones a favor de los refugiados han sido reconocidas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en su último comunicado del 9 de abril sobre la protección a los derechos humanos de las personas migrantes, refugiadas y desplazadas frente a la pandemia de COVID-19.

En 13 puntos, la CIDH insta a los países a implementar medidas que protejan las derechos políticos, económicos y sociales fundamentales en medio de la crisis por el nuevo coronavirus. Además recordó a los gobiernos tener "presente y no olviden sus obligaciones internacionales y la jurisprudencia de la Corte para asegurar la efectiva vigencia y protección de los derechos humanos en la respuesta y contención ante la pandemia".

En tanto, otras organizaciones internacionales han invitado también a los gobiernos del mundo a "liberar sin demora" a las personas refugiadas y migrantes que están en lugares de detención formales e informales, en condiciones de hacinamiento e insalubridad, considerando las letales consecuencias que tendría un brote de COVID-19 en estos centros de detención.

En un comunicado conjunto entre la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Internacional para los Migrantes (OIM), la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas (Oacnudh) y la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), los organismos advierten que COVID-19 ha demostrado que no discrimina, y que muchas personas refugiadas, desplazadas forzosamente, apátridas y migrantes enfrentan un riesgo mayor.

En el escrito destacan que "tres cuartas partes de las personas refugiadas en el mundo y muchos migrantes se encuentran en regiones en desarrollo donde los sistemas de salud están ya sobrepasados y subcapacitados".

Señalan que muchas viven en campos sobrepoblados, asentamientos, refugios improvisados o centros de recepción, donde carecen de un adecuado acceso a los servicios de salud, agua limpia y saneamiento.

"La situación de las personas refugiadas y migrantes que se encuentran en lugares de detención formales e informales, en condiciones de hacinamiento e insalubridad, es particularmente preocupante. Considerando las letales consecuencias que un brote de COVID-19 tendría, deberían ser liberadas sin demora", advierten.

Aseguran que niños y niñas migrantes y sus familias y aquellas detenidas sin bases legales suficientes, deberían ser inmediatamente liberadas.

A través de su cuenta en Twitter, la Oacnudh para América Central y República Dominicana publicó las directrices esenciales para incorporar la perspectiva de derechos humanos en la atención de la pandemia por COVID-19, que se deben tomar en cuenta en la atención a la crisis sanitaria y sus consecuencias.

Los expertos en derechos humanos instan a las personas a proteger a las más vulnerables, mantener el derecho a la información, económica y social, así como los estados de alarma, de excepción y de otras figuras análogas.