• 30/12/2018 01:00

Víctimas del olvido

Se saben con exactitud los nombres de los 23 soldados estadounidenses muertos, pero no el de los panameños caídos, convertidos tristemente en la nota más trivial de esta crónica

La historia, dice el insigne Gregorio Marañón, solo es perdurable y fecunda cuando se escribe como si se viviera. Podemos agregar, cada memoria rescatada del olvido nos acerca más a nosotros mismos, con la totalidad de nuestra vida reflejada en cada uno de esos precisos recuerdos.

La primera bomba del 20 Diciembre 1989 (20D) cayó sobre Panamá exactamente a las 00.45 a. m., cegando así las primeras vidas panameñas de la invasión. Su ensordecedor ruido resumió, en ese explosivo instante, los 21 años (1968 - 1989) del sistema cuartelero panameño y sus ocho presidentes títeres (de tristísima recordación), además de todos los desaciertos de seis administraciones presidenciales estadounidenses que le dieron su beneplácito y aprobación a esa época dictatorial panameña.

Cada una de las siguientes 422 explosiones del ataque aéreo y fuego artillero de las fuerzas armadas de EUA registradas por el sismógrafo de la Universidad de Panamá en las primeras trece horas del 20D (hasta que se averió) sumaron más muertos olvidados, víctimas del ‘arte operacional' de la invasión, planeado casi dos años antes (febrero 1988 – diciembre 1989).

Sin olvidar que la carrera militar del general Noriega se benefició de 25 años al servicio de varias agencias estadounidenses, especialmente la CIA (desde sus días como estudiante en el Instituto Nacional e Universidad de Panamá); el Departamento de Defensa (Servicio de Inteligencia); la antidrogas DEA, entre otras; además de sus vínculos con la Escuela de las Américas y como fiel aliado de EUA en la defensa del Canal de Panamá.

Esto cambió con la Administración Reagan (1980 - 88) que nunca estuvo de acuerdo con los Tratados Torrijos - Carter ni con la creciente insubordinación del dictador panameño, quien a finales de 1985 se negó a salirse del Grupo Contadora o a ayudar a los ‘Contras' nicaragüenses en la guerra sucia organizada por la CIA.

Ya para junio 1986 se inició una campaña mediática (New York Times, NBC) vinculando a Noriega con el narcotráfico, olvidando sus reuniones ese año con Oliver North en Londres, precisamente para financiar a los Contras con ese dinero ilícito. Así comenzaron las primeras ‘opciones de disuasión flexibles' estadounidenses, coronadas por el proceso judicial contra Noriega anunciado en Tampa y Miami el 5 febrero 1988.

Casi inmediatamente, el comandante en jefe del Comando Sur, general Frederick Woerner, cambia el Plan Conjunto de Defensa del Canal, OPLAN 6000-86, por otro ofensivo, denominado ELABORATE MAZE contra las Fuerzas de Defensa panameñas. Cada bomba caída el 20D recuerda otra víctima, pero también rescata del olvido otro eslabón más del plan invasión: ELABORATE MAZE devino en PRAYER BOOK, este en BLUE SPOON, y finalmente, en OPERATION JUST CAUSE.

Esta guerra termina oficialmente el 20 enero 1990, cuando comienza la ocupación militar estadounidense, denominada OPERACIÓN PROMOVER LIBERTAD, dirigida por general Marc Cisneros y el procónsul Deane Hinton, embajador estadounidense en Panamá, finalizada en septiembre 1994.

Se saben con exactitud los nombres de los 23 soldados estadounidenses muertos, pero no el de los panameños caídos, convertidos tristemente en la nota más trivial de esta crónica.

EXDIPLOMÁTICO

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