• 19/11/2020 00:00

Revivamos Boca la Caja

Medellín, segunda más poblada de Colombia, fue de las ciudades más violentas de América Latina. Lugar de reclutamiento de los jóvenes de la red de sicarios de Pablo Escobar.

Medellín, segunda más poblada de Colombia, fue de las ciudades más violentas de América Latina. Lugar de reclutamiento de los jóvenes de la red de sicarios de Pablo Escobar. Dividida en comunas (equivalente a nuestros barrios), había una muy particular: la Comuna 13, donde, por lo extenso y alto (como edificio de 24 pisos), se escondían narcos y guerrilleros y asediaban al ejército. En acción muy censurada a Álvaro Uribe, por la extensa violación de derechos humanos y muerte de mucha gente inocente, el ejército limpió la zona a la brava. Hoy, sin olvidar la tragedia que vivieron, se ha convertido en atracción turística de Medellín, ahora una de las urbes más exitosas del mundo. Sus grafitis le dan un colorido sin igual al lugar y reflejan con crudeza toda la tragedia que vivieron durante esos aciagos años. Al entrar allí, se siente un intenso vibrar positivo de su gente.

Con el apoyo de Francia, se construyeron escaleras mecánicas a través de esa montaña que, además de hacerle accesible a sus habitantes para llegar a sus viviendas, es de visita obligada de más de 36 mil turistas por mes. Fue una tremenda obra de ingeniería subir esos cerros la estrafalaria maquinaria que allí se instaló. Hay restaurantes, fondas, bares, tiendas de artesanías y “souvenirs”, bailes, y todo lo que uno se puede imaginar, para hacer atractivo el icónico lugar. Los bailadores locales de “hip hop” ya han recorrido medio mundo mostrando lo que allí aprendieron tras el fin de la violencia.

Algo parecido podemos hacer en Panamá con el pintoresco Boca la Caja, en San Francisco, rodeada por el Corredor Sur y por barrios de clase media y alta, que la hunden en el fondo de los rascacielos que la rodean. Por años sus residentes han rehusado mudarse, vendiendo sus propiedades para que allí se construyan más apartamentos. ¿Por qué, en lugar de tratar de sacarlos de su privilegiado entorno, no trabajamos un proyecto de la ciudad que brinde mejor vida a sus habitantes, sin que se tengan que mudar? ¿No sería algo fabuloso? Quienes hemos recorrido muchas veces sus angostas calles nos damos cuenta del gran potencial que allí se encuentra y de la armonía que, con algún ingenio, allí se puede obtener para beneficio de sus habitantes.

Propongo crear en Boca la Caja una especie de Comuna 13 en Medellín. Dirigida por la misma gente que vive allí. De seguro que, además de reivindicar a la hacendosa gente que ha hecho su vida en el lugar, sería una gran atracción, en una ciudad que carece de muchos atractivos turísticos. ¿Por qué? El icónico sitio cuenta con una serie de ventajas que se podrían repotenciar: un excelente Centro de Salud, de los mejores de la ciudad, utilizado, no solo por residentes, sino por sus pudientes vecinos. Una comunidad de pescadores, que podrían agruparse en cooperativa con la ayuda de la Ipacoop, iniciando con mercaditos internos que vendan y cocinen lo que ellos producen, concesionando a restaurantes espacios frente a la playa y promoviendo lo que no se encuentra en la ciudad: un lugar apropiado para organizar viajes y pesca artesanal en pequeñas embarcaciones en la bahía. Sus calles internas están en bastante buen estado y sus viviendas se pueden pintar de varios colores. Seguro que la Universidad de Panamá, con su Facultad de Arquitectura, diseñaría y abrazaría el proyecto. Igual de la Contraloría y del Miviot en la consecución de la información de la cantidad de gente que allí vive y de la distribución de las viviendas. Y de la Capac, en ideas para mejorar la propuesta. Lo más importante: el valor y calidad de su gente. Pienso plantear el proyecto al alcalde José Luis Fábrega en reunión que le he solicitado.

Debemos promover la superación de nuestra gente humilde y trabajadora. Sería el inicio de una idea que podría servir de ejemplo para el resto de la misma ciudad y el país. Se trató, sin éxito, de hacer algo parecido en Curundú y con el Casco Viejo de Colón.

Tenemos una gran diferencia con Medellín. En Boca la Caja no hay nada que se parezca a Pablo Escobar Gaviria. Si ellos pudieron crecer, nosotros también lo podríamos lograr. Aparecerían muchas manos amigas a ayudar. Desarrollaríamos una ola de emprendedores que tanto necesitan los jóvenes panameños. Lo más importante: elevaríamos el nivel de vida de muchos panameños.

Alcalde de Panamá (dic. 1989 - abril 1991).
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