• 22/09/2011 02:00

La Polémica MO

INGENIERO AGRÓNOMO.. Como panameño no puedo quedarme callado en relación al caso Mo. Yo quiero partir diciendo, que si Mariano Rivera h...

INGENIERO AGRÓNOMO.

Como panameño no puedo quedarme callado en relación al caso Mo. Yo quiero partir diciendo, que si Mariano Rivera hubiera nacido en Costa Rica, El Salvador o Paraguay jamás hubiera tocado una bola de béisbol, entonces, el debe estar agradecido de ser panameño. Las respuestas que ha esbozado, respondiendo a cuestionamientos deportivos y personales, más la actitud tomada en algunas ocasiones, han hecho que muchos panameños no estén satisfechos y, por ende, no les interesa el récord alcanzado por Mariano Rivera.

Mariano Rivera es un producto panameño, fue descubierto por panameños y no por norteamericanos. La no participación en los clásicos mundiales es una de las detonantes para que muchos panameños se disgustaran con Mariano. Tal vez, la gente siente que Mariano, a pesar de sus excusas, no muestra hasta el momento interés alguno por participar y defender los colores de su país.

El hecho de que haya construido una mansión rodeada de casas humildes, cuyos propietarios son precisamente sus amigos de infancia, la gente lo ve como un insulto. Tal vez si la hubiera construido en Costa del Este, o una zona exclusiva para millonarios, no hubiera recibido tanta criticas.

El hecho de que nunca se ha preocupado por la fundación de una escuela de béisbol bien establecida, para que los niños de Puerto Caimito y otras comunidades tenga una oportunidad más viable que la que el tubo, es otra causa o motivo para el disgusto. Una escuela de béisbol con todos los elementos (cuadro reglamentario y con buen césped, graderías cómodas, vestidores, salón para charlas, gimnasio, etc.) y con ello crear las condiciones para que surjan más Marianos Rivera en su natal Puerto Caimito.

Estoy tratando de comprender el porqué muchos no están satisfechos ni les interesan los logros de Mariano.

Me cuenta un técnico de la escuela 20—30 de Santiago de Veraguas, que cuando vino a Panamá el presidente George. W. Bush fueron invitados a un acto en donde participaba Mariano Rivera; los niños entre otras cosas, tenían el deseo de una firma en sus pelotas del grandes liga panameño, ídolo de mucho de ellos; sin embargo, fue imposible, los niños se quedaron con las ganas, ya que Mariano no tuvo tiempo para ellos, además su seguridad personal fue un obstáculo. En esos pequeños detalles, sobre todo tratándose de niños, está inmersa la grandeza de los individuos.

El hecho de que Mariano tenga un acento extraño al hablar Español, un ‘aaaa’, antes de pronunciar la siguiente palabra, hacen pensar a muchos que el Español se le olvidó, no es el caso de Carlos Lee ni Carlos Ruiz. Puede que sea una maña, pero en realidad es ortodoxa y rara.

Sabemos que Mariano hace mucha labor social, que ayuda a muchas iglesias y gente en particular. Sin embargo, no se dan a conocer y es por eso que cualquier desliz como los antes mencionados tapan por completo todas las buenas acciones de su parte.

No sé que otros detalles habrá de fondo para que muchas personas, inclusive de La Chorrera, sean indiferentes a los logros de Mariano. No es el primer caso. Si nos pusiéramos a investigar, por lo general, este escenario se repite frecuentemente con personas que nacieron en cuna humilde, surgieron y se olvidaron de sus raíces, demostraron un desinterés y alejamiento luego de convertirse en personas famosas.

Pienso que el hecho de tener la dicha en Panamá de un Roberto Durán, que en donde quiera que se encuentre piensa en su país, que todavía camina y visita su Chorrillo; un Carlos Lee, que cree en su país invirtiendo en su natal Aguadulce, creando fuentes de trabajos para sus amigos y coterráneos, abona a que muchos encuentren una gran diferencia y puedan sustentar su disgusto. A diferencia de cualquier persona común, las acciones de toda figura pública están sujetas a críticas, porque hieren sentimientos colectivos en un momento dado.

Lo Nuevo