El Gobierno interino de Nepal ha comenzado a reanudar servicios esenciales este lunes, en un intento de recuperar la normalidad
- 17/01/2024 00:00
Un nuevo producto de exportación
Los primeros productos fueron camarones, café, azúcar, algo de arroz. También se incursionó en legumbres, no solo a países vecinos, sino a mercados lejanos y que dieron alguna idea de nuestras capacidades, además de la franja acuosa del Canal de Panamá, que abrió una ruta marítima internacional, al servicio de múltiples destinos y la prolongación permanente del comercio.
Se trata de finanzas, de economía, de intercambio de materias y bienes, de servicios, pero ahora nos encontramos también, que rozamos una nueva actividad delictiva, que posee múltiples aristas, en que el punto común es el tráfico de estupefacientes. Quizás se inició como un pequeño movimiento de marihuana silvestre proveniente de las islas del Pacífico y definida como de alta calidad natural.
Pronto se expandió el flujo, excedentes de una producción de cocaína, heroína, derivados provenientes de Colombia. Se establecieron localmente fórmulas hacia el norte y arribaron cargamentos por primera vez a las costas gallegas, donde se expandían otras modalidades de tierras abruptas.
Asombrosamente, nos enteramos en los servicios noticiosos que la policía internacional persigue a un grupo de panameños que se dedica a diferentes acciones ilegales, con sedes situadas en países cercanos, redes de tráfico humano, drogas, lavado de dinero proveniente de los ilícitos y todo tipo de nuevos métodos para la prosperidad del vicio. Las noticias dan cuenta de que han sido capturados importantes ‘líderes’ de organizaciones criminales del patio.
Se plantea que hurtos, secuestros, robos, asaltos bancarios, delitos informáticos, extorsión, exportación de especies naturales y otros, han creado un abanico del mal del que se surten ahora otros demandantes que fortalecen las bases de un amplio y pingüe negociado extendido sin límite y que pone en acción a las autoridades internacionales. Quizás la Interpol refuerza sus mecanismos de investigación, seguimiento y control.
Uno se pregunta ¿por qué hay mayores opciones de éxito para tales emprendimientos que vulneran la legalidad? Hay que recordar que esto supone un conjunto de valores, principios, normativas e instituciones que garantizan el cumplimiento de los preceptos. Con la recurrencia de alcances en el exterior, es primordial empujar el descalabro de acciones contra la infraestructura de la justicia y su efectiva ejecución en el país.
Se atrapó a uno, dos, tres elementos que actúan en Costa Rica por la facilidad esconderse en los pliegues fronterizos; además en Honduras, México y su complicada y confusa línea de límites con Estados Unidos de América. Se organizan contactos, puntos de encuentros y el dinero fluye en estas corrientes que no encuentran un punto final, tanto en el surgimiento de actores, en los emprendimientos, como en las bandas disfrazadas de honorables sociedades.
Por lo general, algún oscuro manto envuelve las aventuras que se mezclan con prácticas imperceptibles para las fuerzas policiales, pero hay fisuras que se abren y posibilitan ejercer medidas correctivas.
Ahora son indicadores que abren un diagnóstico que para nada enorgullece y deja solo un saldo que se perfila negativamente con el impulso económico que una población de un poco más de cuatro millones de habitantes debe empujar para lograr cambios. Las cifras que las autoridades ofrecen como balance, dan luces sobre pequeños cambios y distensión de estas conductas sociales patológicas.
La presencia de estos líderes en las sombras en el exterior, que ponen en peligro la seguridad, es otro reto para definir las potencialidades locales y una obligante necesidad de crecimiento. Acuerdos eficientes, que vayan cerrando espacios y no dejen atajos ni fórmulas para burlar el desempeño de la justicia,
Afortunadamente, surgen novedosas iniciativas virtuales que consolidan tendencias, buscan coincidencias, relaciones que parecieran invisibles al ojo humano. Un salto cualitativo es obligante y seguir los pasos en las huidizas variantes del crimen. Lo importante es evitar que generaciones emergentes consideren que esta es una formación profesional y el surgimiento de carreras que conduzcan hacia un futuro más sostenible. Imposible conclusión.