Varela en la Cumbre

La espinosa situación por la que atraviesa el ABC sudamericano le abre una oportunidad de oro a Panamá. Se trata de Argentina, cuya presidenta está en aprietos por una vorágine de problemas y en el ocaso de su mandato y los serios cuestionamientos por los que atraviesan las mandatarias de Brasil y Chile, centrados en actos de corrupción. Tomando en cuenta la fortaleza de estas tres mujeres, pero que ahora tienen una popularidad diezmada y considerando que más al norte no hay un liderazgo fuerte, el presidente Juan Carlos Varela se coloca en una posición cimera en el escenario latinoamericano. Justo la Cumbre de Las Américas le ha dado una posición ventajosa y así lo reconocen sus pares regionales. Panamá entonces es faro emblemático y la catapulta de la Cumbre nos presenta un horizonte prometedor. Como ‘país de moda’, a los panameños nos queda abrirnos a un nuevo escenario. Para nadie es ajeno que vengan muchos, muchísimos más extranjeros; gran cantidad de ellos con talentos necesarios para catapultarnos hacia el desarrollo. Así las cosas, Varela y su Gobierno deben sentar las bases y garantizar un país de oportunidades, pero con equilibrio. Con seguridad jurídica y respeto por las libertades... Esperemos que sepa aprovechar la oportunidad y comportarse como un verdadero líder y guía.