• 31/05/2015 02:00

Enemigo público #3: Endulzantes artificiales

Pero igualmente dañino para la salud son las alternativas artificiales

Hace unos días reseñamos que el azúcar es uno de los peores productos que se pueden consumir. Pero igualmente dañino para la salud son las alternativas artificiales.

En 2005 se publicó el libro ‘Sweet Deception' en el cual se analizan muchas de las preocupaciones relacionadas con el consumo de endulzantes artificiales. Allí se explica que el aspartame, un ingrediente encontrado en NutraSweet, Equal y muchos alimentos y bebidas populares de ‘dieta', es un químico sintético compuesto de tres ingredientes —dos aminoácidos y un enlace de éster metílico, y que los aminoácidos son ácido aspártico y fenilalanina, dos componentes comunes de muchos de los alimentos que son usualmente seguros de consumir.

Pero no en el caso de aspartame, que ya es considerada una amenaza mayor que el azúcar para la salud pública y que puede causar defectos de nacimiento, cáncer, aumento de peso y tumores cerebrales. La razón es que el aspartame es metabolizado dentro del cuerpo en alcohol de madera (un veneno) y formaldehído, y no se eliminan del cuerpo mediante los residuos normales de filtración hechos por el hígado y riñones. Además, el problema con las partes de los componentes del aspartame es uno de sus volúmenes.

En una proteína normal, el contenido de ácido aspártico y fenilalanina es 4-5 por ciento del perfil aminoácido total. Esta es la manera en que la naturaleza intenta que el cuerpo humano interactúe con estos dos aminoácidos y no hay nada malo acerca de esta substancia siempre y cuando fuera ocurra de manera natural en un equilibrio adecuado con otros aminoácidos. Pero con el aspartame, el equilibrio de estos aminoácidos es 50 por ciento fenilalanina y 40 por ciento ácido aspártico (con un enlace del 10 por ciento de éster metílico o alcohol de madera). En otras palabras, en términos de porcentaje, esta es una cantidad masiva de dos aminoácidos aislados no naturales que no son encontrados en este rango en la naturaleza, unidos entre sí por un veneno.

El resultado de esta mezcla química es una neurotoxina con sabor dulce, y con una estructura antinatural que el cuerpo procesa de una manera muy diferente a cualquier otra proteína. Los aminoácidos en el aspartame literalmente atacan sus células e incluso atraviesan la barrera hematoencefálica para penetrar las células del cerebro, creando así una sobreestimulación tóxica celular, llamada excitotoxicidad.

Otro endulzante artificial de alta toxicidad es la sucralosa, un ingrediente del Splenda y creado sintéticamente en un laboratorio por medio de un proceso patentado de cinco pasos para agregar tres moléculas de cloro a una molécula de azúcar. Algunas personas argumentan que los alimentos naturales también contienen cloro. Sin embargo, en los alimentos naturales el cloro se conecta con enlaces iónicos que se desintegran fácilmente. Pero con Splenda, están en un enlace covalente que no se desintegra. De hecho, no existen enlaces de cloro covalentes en los compuestos orgánicos de la naturaleza —solo existen de manera sintética, en una forma hecha por el hombre. Además de Splenda, otros ejemplos de compuestos de cloro sintético covalentemente enlazados incluyen: DDT, PCBs y Agente Naranja.

El cuerpo humano no cuenta con enzimas que desglosen este cloro de enlace covalente. Nunca antes existió algo similar en la naturaleza y nunca tuvimos razón para hacerle frente. Debido a que no es desglosado ni metabolizado por el cuerpo, los fabricantes los promocionan como algo sin calorías —esencialmente, se supone que pasa a través de usted.

Sin embargo, la investigación (que es principalmente extrapolada de estudios animales) indica que casi el 15 por ciento de sucralosa es de hecho absorbida por el sistema digestivo y finalmente almacenada en el cuerpo.

En base a unos cien estudios, el FDA decretó que el Splenda es un producto inofensivo. Pero lo que no dicen es que la mayoría de esos estudios fueron realizados en animales y que en realidad presentaron muchos problemas. Por ejemplo, se observó la disminución de los glóbulos rojos, aumento de infertilidad y disminución de vitalidad en ratones machos, agrandamiento y calcificación de riñones, abortos espontáneos en casi la mitad de los conejos hembras, en comparación con el grupo de control que no presentó ningún aborto.

Los endulzantes artificiales son un peligro para la humanidad. Es un reflejo de una ciencia que lo único que persigue es el lucro y la tragedia humana.

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