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- 16/09/2011 02:00
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PANAMÁ. A principio de año, el Cuerpo de Bomberos de Panamá (CBP) presentaba un déficit financiero para cubrir el pago de planilla. Pablo Tuñón, director general del CBP, buscó ayuda en la Compañía de Bomberos de Capira para apagar el fuego económico.
El pasado 3 de febrero, Tuñón pidió al Banco Nacional de Panamá transferir 50 mil dólares pertenecientes a la cuenta del cuartel de Capira al fondo común del CBP.
‘Con el fin de cubrir déficit en aspectos financieros presentados por el Benemérito Cuerpo de Bomberos de la República de Panamá, específicamente para cubrir las planillas de todas las instituciones de Bomberos a nivel nacional’, señala la carta que envía Tuñón al Banco Nacional.
Un mes antes (enero) otra carta similar había llegado al despacho del gerente general del Banco Nacional, Darío Berbey. El 11 de enero, el Cuerpo de Bomberos de Panamá solicitó a la entidad bancaria la transferencia de un millón 806 mil 66 dólares.
La solicitud llevaba la firma de Tuñón y de la contralora General de la República, Gioconda Torres de Bianchini.
La carta especificaba que la transferencia era solicitada por el Benemérito Cuerpo de Bomberos de Panamá, mediante la resolución No. 005-10 del 15 de diciembre de 2010.
Esta vez la transferencia se hacía del Fondo Administrativo del CBP a la cuenta común de la entidad. El fondo administrativo corresponde al 5% de Seguros Contra Incendios, que es utilizado exclusivamente en la compra de materiales para la extinción de incendios.
‘La Dirección General está utilizando indebidamente los fondos del 5%’, dijo una fuente del CBP, que prefirió el anonimato.
Pero eso no es todo. Con la creación de la Ley 10 de marzo de 2010, que reestructuró el Cuerpo de Bombero de Panamá, se estableció que tanto el 5% de Seguro contra Incendio, como el 20% de la tasas que cobra la entidad por los servicios de prevención, seguridad e investigación de incendios, deben depositarse en el Fondo de Fideicomiso.
‘Esto tampoco se está ejecutando, ya que esos ingresos se están depositando en el fondo común de funcionamiento’, dijo la fuente.
Con la reestructuración del Cuerpo de Bomberos de Panamá, a lo interno de la entidad apostaron al desarrollo institucional de los bomberos.
‘Contrario, se nombró a un grupo de personas sin conocimientos bomberiles y con salario por encima de lo que ganaban antiguos funcionarios’, alegó la fuente.
De los 3 mil dólares mensuales que recibía el antiguo director, Tunón se fijó un salario de 6 mil dólares mensuales.
Tuñón llegó al cargo luego de la reestructuración de la entidad y creó una estructura de personal con salario, que oscilan entre 2 mil y 4 mil dólares mensuales.
En junio de 2010 y bajo el viejo esquema bomberil, la planilla mensual era de 247 mil 157 dólares y en mayo de 2011 había aumentado a 489 mil 825 dólares, analizó la fuente.
HOMOLOGACIÓN
En medio de estas transferencias de fondos y de aumento salarial, surge otro reclamo bomberil relacionado con el incumplimiento de la Ley 10.
El artículo 94 de la ley estableció un periodo de un año para homologar los salarios de los bomberos, tomando en consideración el mejor salario, según cargo, grado, profesión o capacidad técnica.
El periodo se venció el pasado mes de mayo y hasta la fecha no se ha hecho las equiparaciones salariales.
Lo que es peor, Tuñón no incluyó la homologación en el presupuesto de 2012 que ya fue aprobado por la Asamblea Nacional.
El incumplimiento en la homologación ya provocó manifestaciones en Chiriquí. Los bomberos de esa provincia salieron a las calles el pasado 24 de agosto para exigir la homologación.
La Asociación de Bomberos del Cuerpo de Bomberos de Panamá, a la que no pertenece los bomberos de Chiriquí, exige el cumplimiento de la homologación de los salarios.
Gabriel Gómez, vicepresidente de la Asociación, dijo que la homologación solo representa 6.8 millones de dólares para la institución.
Dijo que han elevado las inquietudes a las autoridades del Ministerio de Gobierno, a la que pertenece el CBP, y hasta la fecha no han recibido repuesta.
La Asociación tiene previsto realizar una asamblea general y acordar acciones para exigir la homologación.
A pesar que se intentó por varias semanas tener una versión de Tuñón; no fue posible obtenerla. El pasado lunes se tenía programada una entrevista en su oficina de la avenida Cuba, al final fue cancelada.
La Oficina de Relaciones Públicas comunicó las versión de Tuñón sería enviada por correo electrónico, pero hasta ayer en horas de la tarde no habían repuestas.
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