Mulino defiende lucha antidrogas

PANAMÁ. Que el país sea considerado por Estados Unidos (EEUU) como el ‘pasillo’ de la droga no es algo que le preocupe al ministro de Seguridad Pública, José Raúl Mulino.

‘Es natural que EEUU diga que somos ‘pasillo’ de la droga hacia ese mercado’, comentó el ministro en un correo electrónico enviado a La Estrella en respuesta a los resultados de la lista anual de EEUU sobre países considerados como grandes productores o de tránsito de droga, donde Panamá es ubicado en la posición 22 de los países considerados ‘pasillos’ de la droga. ‘Somos la primera frontera por ser vecinos de Colombia. Igual pasaría si en vez de cocaína fuera oro. Seguiríamos siendo la misma frontera’, sostuvo.

El jefe de Seguridad Pública recalcó que la relación de cooperación y reconocimiento de EEUU al esfuerzo de Panamá son amplias y en todo los niveles del Gobierno norteamericano, se defiende, hecho que asegura le han reiterado en Washington.

Los resultados de este informe sobre narcotráfico se dieron precisamente dos días después de que el ministro defendió en la Asamblea Nacional los avances del Gobierno en la lucha contra el crimen como consecuencia del trasiego de droga.

En la Asamblea, el ministro Mulino fue cuestionado por dos antiguos aliados del gobierno: los diputados panameñistas José Blandón y Adolfo Valderrama; y por Leandro Ávila, del opositor Partido Revolucionario Democrático.

Mulino asegura que su intervención en el Legislativo estuvo llena de información y estadísticas, aunque la mayoría de los diputados no hablaron. ‘Los oficialistas no salieron a defender al gobierno ni mucho menos a mí’, dijo el ministro.

Mulino enfatizó la importancia de que se resalten los esfuerzos que lleva adelante el gobierno en la lucha contra el narcotráfico y advirtió que ‘los enfoques negativos lo único que hacen es bajar la moral de los miles de miembros de la Fuerza Pública que día a día trabajan y se exponen en la lucha contra las drogas’.

Hace dos semanas, autoridades panameñas y estadounidense llevaron a cabo la operación Tacoma, en la que se desactivó una red que operaba en Colombia y utilizaba la costa atlántica panameña para el trasiego de la droga.