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- 01/08/2011 02:00
PANAMÁ.. En medio de la crisis causada por la bacteria Klebsiella pneumoniae carbapenemasa en el Complejo Hospitalario Arnulfo Arias Madrid de la Caja de Seguro Social (CSS), dirigentes de las asociaciones de pacientes solicitan la separación de los cargos del director general, Guillermo Sáez Llorens y su director Nacional de Prestaciones de Salud, el cirujano Javier Díaz.
‘Javier Díaz podrá ser muy buen cirujano pero de administración de salud no sabe nada, de lo contrario, habría tomado las recomendaciones que le dio el Ministerio de Salud MINSA el año pasado’, dice Roger barés, presidente del Comité de Protección al Paciente y Atención a los Familiares.
Barés insta a que Sáez Llorens, Díaz y el sub director, Marlon de Souza, dejen sus cargos hasta que concluyan las dos investigaciones, una del Ministerio Público y otra del MINSA por el caso de las bacterias.
David Ocálagan, dirigente de los pacientes con Insuficiencia Renal Crónica, concuerda con Barés en que por la transparencia de esas investigaciones los directivos de la CSS deben poner sus cargos a disposición del presidente de la República, Ricardo Martinelli.
Para Ocálagan lo grave es que no le prestaron la mínima atención a la advertencia que le había enviado el MINSA, ‘nunca tomaron las recomendaciones, por lo que son responsables directos de la tragedia’.
Gabriel Pascual, vocero del Comité por el Derecho a la Salud y la Vida, sostiene que esto ocurre por la falta de atención que le pone a los hospitales. ‘Pacientes que fueron envenenados con el jarabe han fallecido por esta bacteria, lo que demuestra la incapacidad del director para atender los problemas de salud de la institución’.
Juan Jované, exdirector de la CSS, considera que el Ministerio Público o el MINSA le debe solicitar la separación a los directos de la institución.
REUNIÓN CINCO ESTRELLAS
Mientras que los familiares lloran las víctimas, la CSS ha convocado a cinco días de reuniones en dos lujos hoteles de ciudad y de playa para encontrar las posibles soluciones a la crisis.
‘Es penoso que se gaste el dinero de los asegurados en esos hoteles’, dice Gabriel. ‘Las bacterias no se matan desde los hoteles’, critica Ocálagan. ‘Yo nunca fui partidario de reuniones en hoteles costosísimos, eso no tiene sentido porque lo que tienen es un problema científico que requiere de soluciones no de reuniones’, lamenta Jované.
Los dirigentes también cuestionan la función de la Junta Directiva de la CSS, que debería fiscalizar no solo las inversiones que realiza el director de la CSS sino la forma en que se ofrecen los servicios de salud.
‘Lo ocurrido es legalmente penado, es homicidio culposo’, dice Barés.