Se agudiza la batalla interna por el control del CEN del PRD

El Partido Revolucionario Democrático (PRD) finaliza hoy la fase de renovación de sus áreas de organización nacional.

Para esta tarde se convocó el congresillo del circuito 8-8, que había sido suspendido por decisión del Tribunal Electoral, que resolvió una demanda contra el recuento de la Comisión Nacional de Elecciones.

Los delegados concluyen la tarea de elegir a los nuevos miembros del Consejo Directivo Nacional (CDN) en cada una de las 26 áreas de organización.

En su Congreso del 30 de octubre, los delegados escogerán a los nueve miembros del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), el máximo organismo interno de decisión.

Los congresillos son el ‘termómetro' de cada una de las corrientes del PRD para medir su fuerza y establecer la posibilidad de acceder al control del partido.

Ernesto Pérez Balladares y Pedro Miguel González se disputan el liderazgo y ambos se dan como victoriosos con los resultados de los 25 congresillos realizados hasta el fin de semana.

En el circuito 8-8 ejercerán el voto 223 delegados.

A partir de mañana, los diferentes candidatos a los puestos de elección del CEN saldrán a convencer a los delegados de que su propuesta es la mejor opción.

‘Viene la negociación a todo vapor. Los votos empiezan a aumentar su valor nominal y la cotización de quién da más', asegura el analista de mercado Jaime Porcell, quien recuerda que el partido está analizando su futuro político con miras a las elecciones de mayo de 2019.

Cada una de las corrientes políticas intenta y se vanagloria de que serán ellos quienes llevarán al partido al poder, perdido en las elecciones de 2009 por heridas que hasta la fecha no se han sanado, sino que se perciben más profundas

Porcell, testigo de la llegada del PRD al poder en 1994, con la primera elección después de la invasión estadounidense y de cómo han evolucionado las pugnas internas, se atreve a pronosticar que el CEN estará compuesto por miembros de ambas facciones. ‘Será un CEN mixto', anticipa.

El CEN que será elegido por 4,200 delegados estará vigente por cinco años, por lo que podrá atribuirse el regreso al poder o ver la tercera derrota seguida del PRD en las urnas.

El analista de mercado ve como positiva la conformación de un CEN con miembros de las diferentes corrientes, pues estarán representados los seguidores de Benicio Robinson y Pedro Miguel González.

El control absoluto que ejerció la ‘ola azul' liderada por Juan Carlos Navarro —y quien en 2014 cargó con la segunda derrota electoral del partido, calificada como una de las más catastróficas por llegar de tercero— no fue la mejor estrategia.

‘Un CEN mixto está obligado a buscar la unidad necesaria', explica Porcell, pues todas las corrientes deberán conversar para llegar a un acuerdo político que beneficie al partido.

La unidad hay que construirla y preservarla. Si por cualquier circunstancia se anula a alguna de las corrientes, se producirá más desunión, concluye Porcell.

Al exmagistrado del Tribunal Electoral Guillermo Márquez Amado, le es difícil dar una opinión sobre lo que va a pasar en el próximo congreso del PRD. Sin embargo, reconoce que en el partido hay varios grupos disputándose el control.

Un inconveniente identificado por Márquez Amado y que a su juicio le hace daño a la unidad del PRD, y de cualquier partido, es que las elecciones son por nóminas.

‘La nómina que gana se lleva todos los cargos. La posibilidad de trabajar en la circunscripción respectiva con otro miembros del partido de otra nómina y de buscar entendimiento no es sano para la democracia interna del partido', plantea Márquez Amado.

El PRD intenta con este congreso sanar heridas de arrastre.

EL PRD EN EL TIEMPO

Las heridas partidarias tienen resultados negativos

El PRD salió del poder en las elecciones de mayo de 2009, cuando fue derrotado por CD.

En las elecciones de 2014, obtuvo el tercer lugar de preferencia entre los votantes.