Eliminatorias en el horizonte para Panamá
- 30/04/2025 00:00
Mayo da la partida de la preparación para el cierre de la segunda ronda eliminatoria de la Concacaf hacia el mundial, con Belice y Nicaragua en la agenda como rivales Con mayo en el calendario, comienza mañana la cuenta regresiva en la planificación y preparación de la Selección de Panamá al irse acercando, a medida que transcurren los días, los dos encuentros decisivos de la segunda ronda de las eliminatorias al Mundial 2026, que deben afrontar al inicio de junio: el 7 frente a Belice como visitante en el FFB Field de Belmopán, y el 10 de local, en el Rommel Fernández, frente a Nicaragua.
Quedan 38 días para asumir el objetivo de arrebatarle el liderato del Grupo D a Nicaragua, consumando “como se espera” la clasificación del conjunto canalero a la tercera ronda, en la cual tres grupos conformados por 4 selecciones cada uno definirán, de septiembre a noviembre, los 3 cupos directos y las 2 opciones de repechaje asignadas a la Concacaf para el torneo de selecciones más importante del globo, que en su versión vigésimo tercera tendrá de anfitriones a Estados Unidos, México y Canadá, el próximo año.
El panorama no pinta para preocuparse, evaluando el rendimiento del equipo: Panamá está de segundo en el grupo con seis puntos, igual número que Nicaragua. Los nicas le adelantan por mejor gol de diferencia, al poseer ellos +7 mientras lo panas tienen +4, y además clasifican los dos primeros del grupo, lo que hace que en el ámbito futbolístico nacional algunos posen más la mirada en la Copa Oro que se disputará inmediatamente días después, en Estados Unidos, a partir del 14 de junio. La Copa Oro es un anhelo pendiente que permitiría coronar con un título internacional el proceso de Christiansen.
El próximo encuentro eliminatorio presenta a Belice como un rival débil, están prácticamente eliminados, sin chances, perdieron sus dos encuentros y tienen un déficit de -6 goles. Estos resultados propiciaron en junio del año pasado que la Federación de Fútbol de Belice (FFB) destituyera al entrenador español David Pérez, nombrando en julio al nacional Carlos Charlie Slusher como su director técnico.
Slusher, exjugador y figura del fútbol beliceño con experiencia en la dirección de la selección caribeña, tampoco ha podido darle la vuelta a la situación. Estuvo en el banquillo en los compromisos del pasado marzo contra Costa Rica para definir uno de los cupos para la Copa Oro; ganaron los ticos ampliamente derrotándole en los dos partidos 7-0 y 6-1. Aunque triunfaran en los dos encuentros que les restan, contra Panamá y Guyana, debido a cómo está el grupo sería una proeza acompañada de milagro que se colaran entre los dos primeros.
Sin embargo, el exceso de confianza y menospreciarles podría redundar a su favor para hacerle daño a Panamá con un marcador inesperado, al tener poco que perder en la eliminatoria; no hay que dar por sentado, anticipadamente, una victoria en territorio beliceño y el fútbol tiene en su historia antecedentes de castigos ejemplares a la soberbia.
De Belice golpear a Panamá, podría fungir con ello como un factor desequilibrante en el Grupo D a favor de Guyana, debido a que Guyana es actualmente tercera con 3 puntos. Si esta le gana en la misma jornada a Nicaragua, y en la siguiente fecha Panamá se complica con Nicaragua, los guyaneses podrían enredar el grupo con un triunfo ante Monserrat al cerrar de locales alcanzando 9 puntos.
La Selección de Nicaragua, que es líder del grupo, sorteó sin dificultad sus dos primeros partidos de la eliminatoria y había venido mostrando crecimiento en la región bajo la dirección del entrenador chileno Marco Antonio Figueroa; por ello, no dejó de sorprender que, en marzo, en la disputa por el cupo a la Copa Oro, teniendo de rival a Guadalupe, perdiese los dos partidos; un hecho que denota una baja en su rendimiento.
El encuentro de Nicaragua contra Guyana del 6 de junio, en Managua, deberá servir de termómetro para aproximar un juicio sobre el nivel que pueda exponer el conjunto nica en el Rommel Fernández. Para Panamá avanzar en la eliminatoria es prioritario y es una oportunidad para ganar impulso en el camino hacia la Copa Oro; una opaca presentación en la eliminatoria dejaría a los panameños afectados.
La eliminatoria y la Copa Oro de nuevo pondrán a prueba la capacidad en la confección de la plantilla y el seguimiento a los jugadores de Thomas Christiansen y su cuerpo técnico. Para las eliminatorias, por ser una competición avalada por la FIFA, los clubes están obligados a ceder los jugadores solicitados por sus selecciones; para la Copa Oro, al ser un torneo regional, no están necesariamente obligados a hacerlo, aunque regularmente si no se encuentran en una etapa decisiva de la temporada o están iniciando la pretemporada, los clubes suelen no poner impedimentos, pues las convocatorias a las selecciones alzan la cotización de sus jugadores.
Entre los desafíos que se encontrarán en esta ocasión están, por ejemplo, situaciones como las que les plantea la Liga MX de México. El F.C. Juárez, en el que está jugando José Luis Rodríguez, el domingo terminó su participación al empatar 1-1 y quedar eliminados en la instancia del torneo denominada Play-In, en la definición por la tanda de penales 2-1 ante los Pumas de Adalberto Carrasquilla. Ambos han venido siendo titulares en sus clubes y son piezas relevantes de la selección; tras la eliminación Rodríguez entró en una etapa de reposo.
Carrasquilla tiene por delante el partido del domingo próximo ante Monterrey; si ganan continúa activo hacia los cuartos de final, si lo pierden estará en la misma situación de Rodríguez. Hay que planificarles el descanso que van a requerir y la incorporación enseguida a los trabajos de la selección, procurando atenuar el bajón de forma que puedan presentar al perder continuidad en sus campeonatos
En Europa, las ligas están terminando entre mediados de mayo y la última semana de este mes. La siguiente temporada la asumen una vez concluido el Mundial de Clubes en julio. La Ligue 1 de Francia, donde participa Amir Murillo, concluye el 18 de mayo. En Suramérica la liga ecuatoriana, con Ismael Díaz y Fajardo como presencias panameñas, está programada para terminar en septiembre, y la chilena que tiene a Waterman y Yaniz continuará su actividad hasta diciembre. Cada territorio con sus características propias. Así que deberán acertar en los tiempos de incorporación individual en el plantel para que el equipo sostenga la continuidad de un proceso que le ha permitido crecer a la selección y darles alegrías a los panameños, pero que debe clasificar al mundial para alcanzar la meta hacia la que se puso en marcha desde que Thomas Christiansen la asumió.
Con mayo en el calendario, comienza mañana la cuenta regresiva en la planificación y preparación de la Selección de Panamá al irse acercando, a medida que transcurren los días, los dos encuentros decisivos de la segunda ronda de las eliminatorias al Mundial 2026, que deben afrontar al inicio de junio: el 7 frente a Belice como visitante en el FFB Field de Belmopán, y el 10 de local, en el Rommel Fernández, frente a Nicaragua.
Quedan 38 días para asumir el objetivo de arrebatarle el liderato del Grupo D a Nicaragua, consumando “como se espera” la clasificación del conjunto canalero a la tercera ronda, en la cual tres grupos conformados por 4 selecciones cada uno definirán, de septiembre a noviembre, los 3 cupos directos y las 2 opciones de repechaje asignadas a la Concacaf para el torneo de selecciones más importante del globo, que en su versión vigésimo tercera tendrá de anfitriones a Estados Unidos, México y Canadá, el próximo año.
El panorama no pinta para preocuparse, evaluando el rendimiento del equipo: Panamá está de segundo en el grupo con seis puntos, igual número que Nicaragua. Los nicas le adelantan por mejor gol de diferencia, al poseer ellos +7 mientras lo panas tienen +4, y además clasifican los dos primeros del grupo, lo que hace que en el ámbito futbolístico nacional algunos posen más la mirada en la Copa Oro que se disputará inmediatamente días después, en Estados Unidos, a partir del 14 de junio. La Copa Oro es un anhelo pendiente que permitiría coronar con un título internacional el proceso de Christiansen.
El próximo encuentro eliminatorio presenta a Belice como un rival débil, están prácticamente eliminados, sin chances, perdieron sus dos encuentros y tienen un déficit de -6 goles. Estos resultados propiciaron en junio del año pasado que la Federación de Fútbol de Belice (FFB) destituyera al entrenador español David Pérez, nombrando en julio al nacional Carlos Charlie Slusher como su director técnico.
Slusher, exjugador y figura del fútbol beliceño con experiencia en la dirección de la selección caribeña, tampoco ha podido darle la vuelta a la situación. Estuvo en el banquillo en los compromisos del pasado marzo contra Costa Rica para definir uno de los cupos para la Copa Oro; ganaron los ticos ampliamente derrotándole en los dos partidos 7-0 y 6-1. Aunque triunfaran en los dos encuentros que les restan, contra Panamá y Guyana, debido a cómo está el grupo sería una proeza acompañada de milagro que se colaran entre los dos primeros.
Sin embargo, el exceso de confianza y menospreciarles podría redundar a su favor para hacerle daño a Panamá con un marcador inesperado, al tener poco que perder en la eliminatoria; no hay que dar por sentado, anticipadamente, una victoria en territorio beliceño y el fútbol tiene en su historia antecedentes de castigos ejemplares a la soberbia.
De Belice golpear a Panamá, podría fungir con ello como un factor desequilibrante en el Grupo D a favor de Guyana, debido a que Guyana es actualmente tercera con 3 puntos. Si esta le gana en la misma jornada a Nicaragua, y en la siguiente fecha Panamá se complica con Nicaragua, los guyaneses podrían enredar el grupo con un triunfo ante Monserrat al cerrar de locales alcanzando 9 puntos.
La Selección de Nicaragua, que es líder del grupo, sorteó sin dificultad sus dos primeros partidos de la eliminatoria y había venido mostrando crecimiento en la región bajo la dirección del entrenador chileno Marco Antonio Figueroa; por ello, no dejó de sorprender que, en marzo, en la disputa por el cupo a la Copa Oro, teniendo de rival a Guadalupe, perdiese los dos partidos; un hecho que denota una baja en su rendimiento.
El encuentro de Nicaragua contra Guyana del 6 de junio, en Managua, deberá servir de termómetro para aproximar un juicio sobre el nivel que pueda exponer el conjunto nica en el Rommel Fernández. Para Panamá avanzar en la eliminatoria es prioritario y es una oportunidad para ganar impulso en el camino hacia la Copa Oro; una opaca presentación en la eliminatoria dejaría a los panameños afectados.
La eliminatoria y la Copa Oro de nuevo pondrán a prueba la capacidad en la confección de la plantilla y el seguimiento a los jugadores de Thomas Christiansen y su cuerpo técnico. Para las eliminatorias, por ser una competición avalada por la FIFA, los clubes están obligados a ceder los jugadores solicitados por sus selecciones; para la Copa Oro, al ser un torneo regional, no están necesariamente obligados a hacerlo, aunque regularmente si no se encuentran en una etapa decisiva de la temporada o están iniciando la pretemporada, los clubes suelen no poner impedimentos, pues las convocatorias a las selecciones alzan la cotización de sus jugadores.
Entre los desafíos que se encontrarán en esta ocasión están, por ejemplo, situaciones como las que les plantea la Liga MX de México. El F.C. Juárez, en el que está jugando José Luis Rodríguez, el domingo terminó su participación al empatar 1-1 y quedar eliminados en la instancia del torneo denominada Play-In, en la definición por la tanda de penales 2-1 ante los Pumas de Adalberto Carrasquilla. Ambos han venido siendo titulares en sus clubes y son piezas relevantes de la selección; tras la eliminación Rodríguez entró en una etapa de reposo.
Carrasquilla tiene por delante el partido del domingo próximo ante Monterrey; si ganan continúa activo hacia los cuartos de final, si lo pierden estará en la misma situación de Rodríguez. Hay que planificarles el descanso que van a requerir y la incorporación enseguida a los trabajos de la selección, procurando atenuar el bajón de forma que puedan presentar al perder continuidad en sus campeonatos
En Europa, las ligas están terminando entre mediados de mayo y la última semana de este mes. La siguiente temporada la asumen una vez concluido el Mundial de Clubes en julio. La Ligue 1 de Francia, donde participa Amir Murillo, concluye el 18 de mayo. En Suramérica la liga ecuatoriana, con Ismael Díaz y Fajardo como presencias panameñas, está programada para terminar en septiembre, y la chilena que tiene a Waterman y Yaniz continuará su actividad hasta diciembre. Cada territorio con sus características propias. Así que deberán acertar en los tiempos de incorporación individual en el plantel para que el equipo sostenga la continuidad de un proceso que le ha permitido crecer a la selección y darles alegrías a los panameños, pero que debe clasificar al mundial para alcanzar la meta hacia la que se puso en marcha desde que Thomas Christiansen la asumió.