No al clientelismo, sí a la educación y el deporte
- 08/09/2025 00:01
Menos política, más transparencia y eficiencia. La idea de condicionar los auxilios económicos del Instituto para la Formación y Aprovechamiento de los Recursos Humanos (Ifarhu) al cumplimiento estricto de compromisos es una nueva propuesta para un problema de vieja data. El Ifarhu ha sido, por décadas, un cofre usado para pagar favores políticos. En campaña, los candidatos prometen becas; cuando están en el poder, quienes los eligieron se las exigen. Si no se cambia de raíz el modelo clientelista, estamos condenados a repetir los mismos escándalos, gobierno tras gobierno. Recientemente, la Asamblea aprobó en primer debate un proyecto de ley para “despolitizar” las federaciones deportivas, otro foco ancestral de escándalos y pago de favores. Tenemos que dejar de usar la educación y el deporte de los jóvenes como moneda de cambio si queremos un mejor país. La responsabilidad no es solo del gobierno y de los políticos clientelistas; como ciudadanía, debemos honrar nuestras responsabilidades al ser beneficiados con recursos públicos y no regalar el voto a cambio de una promesa oportunista.