Evasión e inequidad fiscal: el problema de las deterioradas finanzas públicas
- 09/06/2025 06:39
Expertos aseguran que el mayor dilema es no contar con dinero para los problemas de la población, mientras existe una brecha de incumplimiento del impuesto sobre la renta de unos $8 mil millones y privilegios fiscales, sin respuesta de las autoridades La evasión fiscal y la inequidad en los tributos, donde las actividades con mayores ganancias pagan menos impuestos, son las razones por las que el país no cuenta con suficiente dinero para enfrentar las necesidades de sus ciudadanos.
La brecha de incumplimiento ronda los $8.797 millones solo en impuesto sobre la renta de personas jurídicas (empresas), cifra que representa cuatro veces los aportes del Canal durante año pasado, que sumaron $2.470 millones, según un análisis de La Estrella de Panamá con base en los últimos datos oficiales de la Dirección General de Ingresos (DGI).
El cálculo de este medio se hizo basado en la tasa de incumplimiento del último “boletín estadístico tributario” de 2023 de la DGI, en relación con el producto interno bruto (PIB) nominal estimado por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), para el 2025.
Esta sería la razón por la cual las empresas o personas jurídicas aportan apenas el 36% del total recaudado del impuesto sobre la renta, mientras que las personas naturales aportan la mayor parte con el 64%, como suele decir el presidente José Raúl Mulino “los que no pagan planilla”.
Es por ello que expertos economistas y financistas recomiendan a las autoridades tomar acciones urgentes para evitar la evasión tributaria y la inequidad fiscal, porque la falta de ingresos ocasiona que el gobierno no pueda solventar las necesidades de la población y esto se suma al hartazgo generalizado que se manifiesta en las calles.
El reporte de La Decana “Gobierno sigue pidiendo prestado para pagar planilla y subsidios” del 26 de mayo, reveló que el ahorro corriente es negativo, lo que implica el frágil estado de las finanzas públicas y demuestran que las recaudaciones no alcanzan para los gastos operativos.
Este ahorro corriente negativo, según el análisis fiscal del gobierno central de 2004 – 2024, ha estado en su punto más bajo al cierre de diciembre pasado con - $2.989 millones.
“Estamos adquiriendo deuda para gastos operativos y no inversión, sino para pagar deuda, una dinámica que viene incrementándose de forma importante”, porque los ingresos están disminuyendo, pero los gastos siguen aumentado, apuntó el economista Adolfo Quintero.
Por su parte, para Ernesto Bazán, economista y analista de riesgo, “hay que advertir que si no se arreglan las finanzas públicas el país va a terminar quebrando” en un periodo de 8 a 12 años, porque la realidad de Panamá es similar a la de una persona que vive ficticiamente del saldo de su tarjeta de crédito que “va a terminar completamente empobrecida”.
¿Por qué quienes más ganan no son los que más aportan?
Las ‘distorsiones’
Aunque el Código Fiscal establece un Impuesto sobre la renta (ISR) de 25% y hasta 30% de las ganancias para las empresas, hay excepciones o incentivos fiscales.
Por ejemplo, del total de las ganancias netas que se obtienen en el país entre todas las personas jurídicas (empresas), las actividades financieras y de seguros se quedan con el 28,6%, sin embargo pagan al fisco un 19,6% del total de lo recaudado en impuesto sobre la renta.
Mientras que el negocio de la logística, tipificada como “transporte, almacenamiento y correo”, que obtiene el 13,4% de las ganancias que se obtienen en el país, aporta apenas el 9,9%.
“Tienen una mucho menor participación en el impuesto jurado a pagar, mientras que actividades altamente generadoras de empleos como el comercio y las industrias manufactureras -que muestran una participación en la generación de ganancias de 11,5% y 5,8%, respectivamente- tienen una mayor participación en el pago de impuestos” resaltó el docente y expresidente del Colegio de Economistas de Panamá, Raúl Moreira. (Ver cuadro).
Estas “distorsiones” se deben, a juicio de Bazán, a que el régimen impositivo de Panamá es territorial, lo que significa que si la transacción surte efectos fuera del país el impuesto es cero, lo que aplica para los bancos con licencia internacional.
“Tradicionalmente las actividades financieras han sido tratadas como las primas donnas dentro de las estructuras tributarias en Panamá, con bajos impuestos a pagar con relación a las ganancias generadas”, acotó Moreira.
Añadió que muchas de las actividades de transporte, almacenamiento, tienen subsidios que son “importantes exoneraciones fiscales”.
En tanto, las organizaciones extraterritoriales que generan utilidades por el 10,6% apenas aportan 1,5% de ISR.
Este diario intentó obtener una explicación de por qué las actividades que menos ganan son las que más aportan y sobre la desigualdad fiscal, mediante solicitud de entrevista y cuestionario a la DGI, pero al cierre de esta edición no hubo respuesta.
Para el economista Aristides Hernández el deterioro de las finanzas públicas se debe fundamentalmente a la evasión fiscal y a la “enorme cantidad de incentivos fiscales y exoneraciones que otorga el Estado al sector privado”.
DGI: ente sin respuestas
¿Cuál es la estrategia que tiene la DGI para revertir la recaudación tributaria de 6,6% por debajo de lo estimado y la evasión fiscal?, ¿Cómo van a aumentar los ingresos para coadyuvar a mejorar el balance fiscal y revertir la tendencia del ahorro corriente negativo?, fueron parte de las preguntas de La Decana que no encontraron respuestas en el director de la DGI, Camilo Valdés.
Por su parte, el viceministerio de Finanzas informó en el pasado reporte de este diario que se analiza y revisa el régimen de incentivos fiscales y exoneraciones tributarias.
Quintero apuntó, que según sus cálculos generales el problema de la evasión tributaria entre personas naturales y jurídicas está por el orden del 50%, evasión que se concentra en las compañías, porque a los trabajadores se les descuenta pero no hay certeza de que ese dinero llegue al fisco.
Recomendó el uso de tecnología para controlar esta situación y apuntó que se retomen a los auditores de campo para verificar que los contribuyentes cumplan con su responsabilidad.
Estos más de $8 mil millones en evasión representan un año de ingresos tributarios, o el 80% de los ingresos que no se captan, por lo que “se requiere una transformación de los controles de la DGI, pues hay fallas importantes”. acotó Quintero.
Están subsidiando a gente que tiene plata, las prioridades están invertidas. No se está haciendo nada para resolver el déficit y no habrá dinero para pagarle a los médicos, policías y educadores” economista. Ernesto Bazán, Raúl Moreira, Expresidente del colegio de economistas de panamáNo se ha escuchado ninguna gestión de la administración actual para llevar adelante los casos de defraudación heredados de la anterior. Como no hay certeza del castigo que siga la fiesta” ADOLFO QUINTERO,economistaLa evasión tributaria es una de las fallas que tiene el país, está por arriba del 50% en términos comparativos de los ingresos percibidos. La mayor evasión es en las personas jurídicas [empresas]”
La evasión fiscal y la inequidad en los tributos, donde las actividades con mayores ganancias pagan menos impuestos, son las razones por las que el país no cuenta con suficiente dinero para enfrentar las necesidades de sus ciudadanos.
La brecha de incumplimiento ronda los $8.797 millones solo en impuesto sobre la renta de personas jurídicas (empresas), cifra que representa cuatro veces los aportes del Canal durante año pasado, que sumaron $2.470 millones, según un análisis de La Estrella de Panamá con base en los últimos datos oficiales de la Dirección General de Ingresos (DGI).
El cálculo de este medio se hizo basado en la tasa de incumplimiento del último “boletín estadístico tributario” de 2023 de la DGI, en relación con el producto interno bruto (PIB) nominal estimado por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), para el 2025.
Esta sería la razón por la cual las empresas o personas jurídicas aportan apenas el 36% del total recaudado del impuesto sobre la renta, mientras que las personas naturales aportan la mayor parte con el 64%, como suele decir el presidente José Raúl Mulino “los que no pagan planilla”.
Es por ello que expertos economistas y financistas recomiendan a las autoridades tomar acciones urgentes para evitar la evasión tributaria y la inequidad fiscal, porque la falta de ingresos ocasiona que el gobierno no pueda solventar las necesidades de la población y esto se suma al hartazgo generalizado que se manifiesta en las calles.
El reporte de La Decana “Gobierno sigue pidiendo prestado para pagar planilla y subsidios” del 26 de mayo, reveló que el ahorro corriente es negativo, lo que implica el frágil estado de las finanzas públicas y demuestran que las recaudaciones no alcanzan para los gastos operativos.
Este ahorro corriente negativo, según el análisis fiscal del gobierno central de 2004 – 2024, ha estado en su punto más bajo al cierre de diciembre pasado con - $2.989 millones.
“Estamos adquiriendo deuda para gastos operativos y no inversión, sino para pagar deuda, una dinámica que viene incrementándose de forma importante”, porque los ingresos están disminuyendo, pero los gastos siguen aumentado, apuntó el economista Adolfo Quintero.
Por su parte, para Ernesto Bazán, economista y analista de riesgo, “hay que advertir que si no se arreglan las finanzas públicas el país va a terminar quebrando” en un periodo de 8 a 12 años, porque la realidad de Panamá es similar a la de una persona que vive ficticiamente del saldo de su tarjeta de crédito que “va a terminar completamente empobrecida”.
¿Por qué quienes más ganan no son los que más aportan?
Las ‘distorsiones’
Aunque el Código Fiscal establece un Impuesto sobre la renta (ISR) de 25% y hasta 30% de las ganancias para las empresas, hay excepciones o incentivos fiscales.
Por ejemplo, del total de las ganancias netas que se obtienen en el país entre todas las personas jurídicas (empresas), las actividades financieras y de seguros se quedan con el 28,6%, sin embargo pagan al fisco un 19,6% del total de lo recaudado en impuesto sobre la renta.
Mientras que el negocio de la logística, tipificada como “transporte, almacenamiento y correo”, que obtiene el 13,4% de las ganancias que se obtienen en el país, aporta apenas el 9,9%.
“Tienen una mucho menor participación en el impuesto jurado a pagar, mientras que actividades altamente generadoras de empleos como el comercio y las industrias manufactureras -que muestran una participación en la generación de ganancias de 11,5% y 5,8%, respectivamente- tienen una mayor participación en el pago de impuestos” resaltó el docente y expresidente del Colegio de Economistas de Panamá, Raúl Moreira. (Ver cuadro).
Estas “distorsiones” se deben, a juicio de Bazán, a que el régimen impositivo de Panamá es territorial, lo que significa que si la transacción surte efectos fuera del país el impuesto es cero, lo que aplica para los bancos con licencia internacional.
“Tradicionalmente las actividades financieras han sido tratadas como las primas donnas dentro de las estructuras tributarias en Panamá, con bajos impuestos a pagar con relación a las ganancias generadas”, acotó Moreira.
Añadió que muchas de las actividades de transporte, almacenamiento, tienen subsidios que son “importantes exoneraciones fiscales”.
En tanto, las organizaciones extraterritoriales que generan utilidades por el 10,6% apenas aportan 1,5% de ISR.
Este diario intentó obtener una explicación de por qué las actividades que menos ganan son las que más aportan y sobre la desigualdad fiscal, mediante solicitud de entrevista y cuestionario a la DGI, pero al cierre de esta edición no hubo respuesta.
Para el economista Aristides Hernández el deterioro de las finanzas públicas se debe fundamentalmente a la evasión fiscal y a la “enorme cantidad de incentivos fiscales y exoneraciones que otorga el Estado al sector privado”.
DGI: ente sin respuestas
¿Cuál es la estrategia que tiene la DGI para revertir la recaudación tributaria de 6,6% por debajo de lo estimado y la evasión fiscal?, ¿Cómo van a aumentar los ingresos para coadyuvar a mejorar el balance fiscal y revertir la tendencia del ahorro corriente negativo?, fueron parte de las preguntas de La Decana que no encontraron respuestas en el director de la DGI, Camilo Valdés.
Por su parte, el viceministerio de Finanzas informó en el pasado reporte de este diario que se analiza y revisa el régimen de incentivos fiscales y exoneraciones tributarias.
Quintero apuntó, que según sus cálculos generales el problema de la evasión tributaria entre personas naturales y jurídicas está por el orden del 50%, evasión que se concentra en las compañías, porque a los trabajadores se les descuenta pero no hay certeza de que ese dinero llegue al fisco.
Recomendó el uso de tecnología para controlar esta situación y apuntó que se retomen a los auditores de campo para verificar que los contribuyentes cumplan con su responsabilidad.
Estos más de $8 mil millones en evasión representan un año de ingresos tributarios, o el 80% de los ingresos que no se captan, por lo que “se requiere una transformación de los controles de la DGI, pues hay fallas importantes”. acotó Quintero.