Monseñor Ulloa reafirma que la navidad no es un cuento para niños

El arzobispo de Panamá, monseñor José Domingo Ulloa, este domingo 21 de diciembre, en su misa dominical. Iglesia Católica
  • 21/12/2025 11:45

El arzobispo ha vuelto a mencionar durante la misa dominical del 21 de diciembre que en esta navidad Cristo no solo encuentre cantos y luces sino una familia comprometida con la vida, la dignidad y la esperanza.

A pocos días de celebrarse la Navidad, el monseñor José Domingo Ulloa durante su reflexión de este domingo abordó nuevamente la importancia de recordar el verdadero significado de esta festividad.

“Hay que decirlo con firmeza y claridad: la Navidad no es un cuento para niños ni una tradición meramente emotiva. La Navidad es la respuesta de Dios al clamor profundo de la humanidad. Con la Navidad celebramos que Dios entra en nuestra historia concreta y necesitada de reconciliación para ofrecernos una paz verdadera y duradera”, afirmó Ulloa, al señalar que no se puede esperar al Príncipe de la Paz y, al mismo tiempo, seguir alimentando la división, la violencia y el egoísmo.

Ulloa subrayó este domingo que la Navidad es la celebración de un nacimiento, por lo que en cada vientre de una mujer embarazada se contempla el milagro sagrado de la vida. “Cada madre es un santuario vivo donde Dios sigue obrando”.

El arzobispo recordó que el domingo pasado señaló que no se puede celebrar la Navidad sin la representación del pesebre, símbolo central de la festividad cristiana. “No podemos aceptar celebrar la Navidad sin Jesús. Sería como celebrar un cumpleaños sin el cumpleañero o una fiesta sin la razón misma que la inspira”.

No se trata solo de compartir una mesa, sino de reencontrarnos desde el corazón, reconstruyendo puentes. Sabemos que en medio de la alegría también hay sillas vacías y rostros que extrañamos. Como cristianos creemos que la vida no termina, sino que se transforma. Por eso, incluso en medio de la ausencia, la Navidad es anuncio de esperanza. No podemos, como nación, acoger al Príncipe de la Paz y permanecer indiferentes ante la violencia o la corrupción”, declaró.

El líder de la Iglesia católica pidió vivir esta Navidad con verdad y defender la vida desde su concepción hasta su final natural. “Hay que acompañar a las madres gestantes, proteger a nuestros niños y adolescentes y no acostumbrarnos jamás a la pobreza ni a la desigualdad. Esto significa trabajar con decisión y sin exclusión por un país donde haya acceso a la salud, oportunidades reales de trabajo para todos y se rompan los círculos de violencia. Que la paz comience en el corazón, se construya en la familia y se proyecte en la sociedad”, concluyó.