Balbina Herrera: Los diputados no pueden ser la única expresión del PRD
- 21/09/2025 07:02
La dirigente señala que la crisis del partido llevó a que corrieran en las pasadas elecciones con tres candidatos presidenciales. Urge análisis y renovación interna, aunque sin renuncia de toda la cúpula hasta 2027
En noviembre próximo se renovarán cinco de los diez cargos de la dirección del Partido Revolucionario Democrático (PRD), tras la catastrófica derrota en las elecciones de 2024, que dejó al colectivo en cuidados intensivos y dio fuerza a las voces que a lo interno exigen cambios urgentes. Unas elecciones parciales en la cúpula, que no toca al presidente del partido, Benicio Robinson y a otros dirigentes señalados de ser corresponsables de la debacle. Para la exministra de Trabajo y dirigente histórica del PRD, Balbina Herrera, la renovación debe pasar por un “repensar” del partido, aunque descartando la salida inmediata de la actual dirigencia hasta las elecciones internas de 2027. “Todo el mundo quiere llegar al puesto, pero ¿para qué?”, cuestiona la también exdiputada en el Polígrafo de La Estrella de Panamá, quien reconoce que el partido tiene cada vez más incisiones y fustiga con dureza a experredistas que eligieron “no dar la pelea dentro del PRD”.
La elección del 2024 fue muy fuerte para nosotros, fuimos tres candidatos presidenciales. Si tú analizas el resultado electoral en las áreas de organización, o sea, las estructuras base, como los representantes de corregimientos y alcalde, la situación fue distinta. La gente depositó más de medio millón de votos en esa elección. Lo más importante es entender que no fue solamente la elección del 2024, es un proceso que amerita una discusión profunda de parte de los líderes de nuestro colectivo y de nuestra dirección intermedia.
Cuando yo perdí las elecciones como candidata presidencial, en el CEN pusimos nuestro cargo a disposición y se hizo la renuncia. Ahora, con las modificaciones del Tribunal Electoral (TE), si renuncian todos los miembros del CEN, hay que hacer un Congreso Nacional Extraordinario; ese congreso tendría que hacerse con los 4.200 delegados. Entonces, es un costo adicional que tiene que correr el partido, no el TE. Se toma la decisión de que renuncien cinco, que serán electos por el Directorio Nacional, que son 300. Nos hubiera gustado que hubieran renunciado todos, sí. ¿Tenemos el recurso y las condiciones para hacer un congreso extraordinario? No.
Nosotros vamos a tener el congreso ordinario en el 2027, donde se deben renovar todas las estructuras. Si no tendríamos que hacer un congreso en el 2025 y otro en 2027. Ven acá, hagamos una pausa, vamos a mirar y prepararnos con una interacción entre los antiguos miembros y las nuevas generaciones. El gran tema es que todo el mundo quiere llegar al puesto, pero, ¿para qué vas a llegar? Tú mismo lo has dicho, estamos en cuidados intensivos, pero en realidad necesitamos discutir cuál es la situación del contexto internacional y nacional que vivimos, discutir si el partido está cumpliendo su rol. ¿Por qué fuimos con tres candidatos presidenciales? Tenemos que hacer una discusión interna con franqueza y con transparencia.
Claro, lo que pasa es que cuando estamos en las cosas buenas, ahí estamos activados y nada pasa, pero cuando viene la dura, que ya el PRD la ha pasado bastantes veces, entonces resulta que yo me voy porque la gente no me gusta fulano. Así no se tiene una familia ni tampoco se organiza un partido. Tú tienes que estar en las buenas, en las regulares y en las malas (...) la discusión tiene que darse, no salirse del partido diciendo que no se puede dar la discusión.
Yo creo que vamos a mandar ese mensaje con la renovación integral del partido en 2027.
Para que no ocurra lo que me pasó a mí. Perdí las elecciones, yo era la presidenta del partido y todo mi equipo renunció. Pero no hicimos algo, el análisis del porqué perdimos. Entonces llegó un nuevo CEN y no hicieron nada. Yo saqué 600 mil votos y dejamos un subsidio de 12 millones en el partido. ¿Eso no era suficiente para hacer una valoración integral? Esto no es solo un problema de cargos solamente, porque al final nadie sobra. En 2024 tuvimos los votos en las bases, pero en la presidencial había tres candidatos de origen PRD: Gaby Carrizo, Zulay Rodríguez y Martín Torrijos. Los que se alejaron o renunciaron, ¿de dónde crees que sacaron los votos? En vez de analizar internamente, lo que hicimos fue dividirnos.
Yo voy a evitar nombres porque no quiero crear algún nivel de ronchas, pero otros cargos que no son la presidencia y la secretaria general se renovaron, pero cuando perdimos se fueron, incluso figuras jóvenes (...) si hay algo que yo tengo que reconocerle al presidente Cortizo, fue que en su gobierno le dio oportunidad a muchos jóvenes ¿Cuál fue la posición de los jóvenes? Decir que “tú eres un dinosaurio y yo joven”, eso no funciona así. Tú no puedes menospreciar las experiencias y eso es un tema que nosotros tenemos que valorar.
¿Qué le voy a ofrecer a la población si internamente no hay condiciones? La tarea ahora es mirarnos a dentro. Responder ¿Por qué nos desvinculamos de los movimientos sociales del país? ¿Dónde están los intelectuales que formó el PRD? O es que ya llegamos a un nivel de comodidad y no queremos arriesgar, con esto me refiero a los profesionales PRD, que ante una convocatoria para entrar en la discusión, dice que “las aguas tienen que estar claras para sumarse”. ¿Dónde está tu convicción? El papel ahora es mirar hacia dentro.
Nuestro partido tiene que entenderse que es un colectivo que tiene distintas corrientes. Además, la expresión del partido en la Asamblea, no es ni puede ser la única expresión del PRD. Ese es un sector importante de nuestro colectivo. Hay más de otros 300 cargos de elección popular que la gente votó en la papeleta del PRD.
Es algo de lo que tenemos que hablar y discutir. Además, eso no es solo una distorsión en los partidos, sino también es del país. En esta concepción en la cual el rol de los diputados, pasa porque muchos quieren actuar como representantes, creen que si no lo hacen no serán reelectos.
Sí existe, lo que ocurre es que no podemos tener a Omar Torrijos solamente como cliché, como una marca que sale cada vez que hay elecciones. La historia ha demostrado, después de 25 años de la recuperación del Canal, que Torrijos tenía razón. Esto, a pesar de que dentro de colectivos nuestros no quería ni siquiera tocarlo. Hay gente en la calle, que no son miembros del partido y se identifican con el torrijismo. Son casos que debemos analizar en un mundo que ha cambiado muchísimo.
Si hay posibilidades de lograr un consenso mucho más amplio donde podemos hablar otros sectores, no tengo ningún problema de estar como de no estar. Por que yo tengo una voz que, independientemente del puesto, yo existo. Uno no tiene liderazgo porque es representante, diputado, fue ministro de Estado o candidato presidencial. Tú eres dirigente porque te formas para eso. No me corto las venas si tengo que estar o no.
Como buena dirigente, no descarto nada.
La gente se cuestiona mucho la personalidad del presidente Mulino. Quienes lo conocemos, sabemos cuál es su personalidad. Yo lo único que recomiendo, con toda la experiencia que nosotros hemos vivido en este país postinvasión, es que tenemos que hablar con la gente. La experiencia de 1989 nos enseñó que hay que dialogar, la confrontación no nos va a llevar a buen camino. El presidente dice que no va a aspirar a un cargo más adelante, pero el problema no es él, sino el país que va a dejar.
No le pidas tanto a los partidos políticos que estamos, como tú mismo dijiste (risas), en cuidados intensivos...
Estoy de acuerdo. Tenemos que aprender a pensar con una mirada crítica las cosas, el gobierno y en general todo. El problema es que en Panamá se ha aprendido eso de que, si no estás de acuerdo conmigo, te tacho. ¿Que nos falta en el PRD? Sí, tienes toda la razón, no vengo aquí a pegar una mentira porque esa no soy yo. Los partidos tenemos que tener una posición clara.