Bosques de generación, una alternativa de reforestación ante el cambio climático

MEDIO AMBIENTE
’La Estrella de Panamá’ se desplazó a un bosque de generación ubicado en las montañas de María Chiquita, en Colón. Richard Bonilla | La Estrella de Panamá
Con un árbol de carapa detrás suyo, la ingeniera forestal Iliana Armién de Futuro Forestal explica a los presentes en qué consiste el concepto de ‘Bosque de generaciones’. Richard Bonilla | La Estrella de Panamá
La biodiversidad se genera en un terreno que antes no era un bosque como tal. Richard Bonilla | La Estrella de Panamá
  • 22/11/2025 23:37

La iniciativa reforesta terrenos degradados con especies locales para recuperar ecosistemas, y capturar dióxido de carbono

El progreso del calentamiento global y la deforestación de los bosques son algunos de los síntomas que evidencian el peor momento bajo el que está pasando el medio ambiente.

De acuerdo a la última edición del ‘Diagnóstico de Bosques y Otras Tierras Boscosas’ realizada por el Ministerio de Ambiente en el 2023, se perdieron más de 350,000 hectáreas de bosques y otro tipo de tierras boscosas a nivel nacional. Una situación que pone en riesgo tanto la biodiversidad como las cuencas hidrográficas, al igual que la sostenibilidad ecológica del país.

Este mismo informe, publicado en el 2024, así mismo señala que a pesar de que el 67.15% del territorio panameño sigue estando cubierto por bosques y rastrojos, la pérdida de esas 352,873 hectáreas representa una reducción del 4% de la cobertura forestal de Panamá.

Para revertir el daño realizado por la naturaleza debido al cambio climático, existen diversos métodos diseñados para tratar de revertir las consecuencias de este flagelo. Una de ellas es la reforestación de los bosques mediante los Bosques de Generación, un concepto con el que se busca devolver la vida a las tierras marcadas por la degradación, y que se muestra como una de las alternativas frente a los efectos del cambio climático.

Dicho concepto se centra en la conversión de pastizales abandonados o antiguas plantaciones de monocultivo en bosques mixtos ricos en especies. Los Bosques de Generación son formados por especies arbóreas locales que se adaptan al entorno en el que son sembrados. En cambio, solo se retiran los árboles individuales y los huecos resultantes se replantan rápidamente con nuevos plantones, creando así un ecosistema de diversos estratos, inspirado en el bosque tropical.

Un equipo periodístico de La Estrella de Panamá tuvo la oportunidad de observar de primera mano cómo funciona uno de estos modelos del Bosque de Generaciones, ubicado en las montañas del corregimiento de María Chiquita, en la provincia de Colón. Es en este terreno donde se están reforestando 180 hectáreas. De las cuales, 160 corresponden a especies plantadas y 20 al manejo de la regeneración de árboles del lugar. Una tarea realizada desde el año 2019 en esta zona y que está siendo llevada a cabo por la empresa Futuro Forestal. Su cofundadora es la ingeniera forestal Iliana Armién, quien junto con Andreas Eke crearon dicha empresa en 1994.

Iliana Armién, cofundadora de la empresa Futuro Forestal.

En la visita realizada por este diario, Armién aseguró que la plantación de ciertas especies arbóreas en el lugar obedece a un plan meticuloso con el cual se garantiza la existencia de la estructura de un bosque con maderas valiosas para su comercialización en un modelo que busca establecer un balance entre la conservación ambiental y el desarrollo económico.

“Los bosques de generaciones logran ampliar los ecosistemas forestales para expandir la superficie donde conviven la flora y la fauna. (...) En esta área, nuestra meta era transformarla, lo que antes era un potrero cuya cobertura vegetal se perdió por la erosión del territorio, y restaurarla como un bosque. Este es un esquema que ya venimos trabajando desde hace 30 años, en los cuales hemos adquirido la experiencia suficiente como para adaptar este concepto a distintos lugares. Este es uno de ellos. A diferencia de un bosque natural donde podrías encontrar dos árboles de una misma especie, aquí podemos encontrar 200 árboles de una misma especie. Donde estamos hay 600 árboles en total”, resumió.

4,670 hectáreas se encuentran bajo manejo del Bosque de Generaciones.

El impacto climático – medido tanto en los territorios que son parte del proyecto de Futuro Forestal, y que se encuentran en las provincias de Colón y Darién – es de 4,670 hectáreas que se encuentran bajo manejo del esquema del bosque de generaciones. Entre los años 2016 y 2024, se lograron secuestrar 250,000 toneladas de dióxido de carbono.

El proyecto de Bosques de Generaciones también forma parte del Corredor Verde de Panamá, una iniciativa de reforestación y conservación que conectará los bosques del Pacífico y el Caribe panameño, recorriendo así el istmo de Panamá con una franja continua de Bosques de Generación. Una iniciativa que contempla la promoción de oportunidades de empleo para las comunidades locales e indígenas de los lugares donde está presente el proyecto.

A su vez, el proyecto del Bosque de Generaciones está financiado por las Concesiones Corporativas de Carbono, un mecanismo con el que las empresas invierten directamente en los proyectos forestales y, de la misma forma, compensan las emisiones de dióxido de carbono, para que eventualmente puedan cumplir con el estándar de carbono neutro.

La profundidad del bosque de generaciones.

El proceso para crear un bosque de generaciones conlleva varias actividades, entre las que se encuentran la evaluación de posibles especies y su adaptación a las condiciones del terreno. En general, se busca que las especies de árboles que se vayan a plantar sean longevas, duraderas y, en último término, maderables para su comercialización sostenible y capaces de capturar dióxido de carbono.

Adicionalmente, el funcionamiento del proyecto forestal está supervisado por el Estado a través del Ministerio de Ambiente (MiAmbiente), que aprueba e inspecciona los planes de reforestación que se tengan que realizar. MiAmbiente además recibe reportes anuales del funcionamiento.

De igual forma, hay una colaboración estrecha con diversas instituciones locales como la Universidad Tecnológica de Panamá, la Asociación para la Conservación de la Naturaleza y universidades internacionales como la de Friburgo (Alemania) y PH Zurich (Suiza), para examinar temas relacionados con la formación de los futuros ingenieros forestales así como la biodiversidad que contienen estos bosques, y que se convierte en materia de estudio.

La fauna y la flora

El mantenimiento de los Bosques de Generaciones es una labor constante en la que se elimina cualquier atisbo de intromisión en la armonía de ese bosque, ya sean árboles grandes - cuyas raíces perturban el crecimiento de los más chicos - o los helechos que interrumpen el curso normal del funcionamiento de las plantaciones que conforman ese Bosque de Generaciones.

Entre las especies arbóreas que se pueden encontrar en este bosque de generaciones están las carapas – caracterizadas por una estética de copos rojos situados en la copa del árbol –, los nísperos, los almendros, las terminalias, y las pornosias, por mencionar algunas de ellas. En cuanto a la fauna, este bosque tiene presencia de animales espectaculares a la vista del ojo humano como el jaguar, el puma, el ñeque y el yaguarandí, por citar algunos.

Un jaguar captado por una de las cámaras trampa, insertadas dentro del bosque.

La gerente de investigación y desarrollo de Futuro Forestal Susanne Zeng explicó que la cuenca hidrográfica del Canal de Panamá – donde se sitúa este bosque en María Chiquita – alberga la mayor cantidad de biodiversidad posible con una variedad de aves, felinos y mamíferos.

“Con la habilitación del corredor verde, nosotros buscamos brindarle un mayor espacio a la fauna tanto en Colón como en Darién. En lo que se refiere al impacto del proyecto, nuestros estudios realizados entre 2015 y 2022 comprueban que ha habido un aumento de la biodiversidad. (...) Entre las plantaciones de especies en peligro de extinción que estamos realizando están las orquídeas como el Flor del Espíritu Santo o el Cerbera odollam, que es conocido como el ‘árbol suicida’ ya que solamente fructifica una vez y se muere. Nuestra meta es proteger a las especies en peligro en extinción”, añadió.

La cuenca hidrográfica del Canal de Panamá, un espacio repleto de biodiversidad.

En conversación con este diario, Zeng destacó que después de seis años de haberse iniciado el proyecto, ya hay una cobertura boscosa encaminada a la construcción de un bosque como tal.

“Vamos por el buen camino y, por el momento, el monitoreo es positivo. Ya hay 150 especies arbóreas dentro de las áreas reforestadas. Por otro lado, hay que pensar la mejor manera de realizar la silvicultura en estos bosques como la forma en la que se usan los fertilizantes o si se necesitan hacer podas en ciertas áreas o no, por lo que la investigación científica es determinante para ayudarnos a hacer un buen manejo forestal para lograr bosques productivos y biodiversos”, valoró.

El director de Educación Ambiental y de Comunicaciones Club Cordillera/AJC Fernando Prieto-Tapia, quien también asistió en el recorrido, dijo que esta es una iniciativa que aporta a la biodiversidad como a la comunidad con la facilitación de empleos para el desarrollo humano de los habitantes que residen en estas zonas de reforestación.

El recorrido se dio en lo alto del bosque de Portobelo.