MiniFabLab, ‘fábricas’ de ideas para los estudiantes
- 09/05/2025 00:00
Diez colegios industriales y técnicos de diferentes puntos de Panamá recibirán MiniFabLabs, laboratorios móviles equipados con una serie de herramientas tecnológicas, como parte de un proyecto piloto de fomento educativo de la Senacyt en conjunto con el Meduca y Ciudad del Saber Jerobuan Guerrel, estudiante de electrónica del Colegio Artes y Oficios Melchor Lasso de la Vega, observa con detenimiento los movimientos de la impresora 3D de uno de los laboratorios móviles o MiniFabLab, presentados recientemente en la Ciudad del Saber como parte de un proyecto educativo que permite combinar creatividad, tecnología y aprendizaje práctico.
Era la primera vez que Jerobuan podía apreciar el funcionamiento de una máquina que convierte modelos digitales en prototipos reales. “En nuestro colegio, la impresora nos va a ayudar bastante porque podremos hacer diferentes proyectos y piezas de manera más rápida”, apuntó el estudiante, tras completarse el proceso de impresión en unos pocos minutos.
Módulos multifuncionales Los MiniFabLab presentados también estaban dotados con otras herramientas digitales (plotter de corte, microcontroladores, sensores y motores), softwares educativos para diseño asistido por computadora y para programación visual o textual; material de trabajo como cartón, vinilo, filamento PLA (termoplástico fabricado a base de recursos renovables como el almidón de maíz, raíces de tapioca o caña de azúcar), cables y leds (diodos emisores de luz), espacio modular con mesas, computadoras, proyectores, impresoras multifuncionales y secciones de almacenamiento, además de múltiples herramientas y utensilios para trabajos técnicos.
Inspirados en el espíritu global de los FabLabs y en la filosofía del pensamiento maker, estos módulos multifuncionales forman parte de un proyecto piloto lanzado días atrás por la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), en conjunto con el Ministerio de Educación (Meduca) y la Fundación Ciudad del Saber, que consiste en la distribución de MiniFabLabs en 10 colegios de bachillerato industrial y técnico de diferentes provincias del país, para que los estudiantes puedan enriquecer su aprendizaje a través de la exploración activa de herramientas como el dibujo técnico, diseño asistido por computadora (CAD), prototipado y corte digital, impresión 3D o la integración básica de componentes electrónicos, entre otras alternativas.
El Instituto Profesional y Técnico (IPT) Bocas del Toro, el IPT Beatriz Miranda de Cabal e IPT Chiriquí Oriente, ambos en Chiriquí; el IPT Azuero, en Los Santos; el IPT Veraguas; el IPT Colón; el IPT Leonila Pinzón e IPT Industrial de Aguadulce, los dos en Coclé, y el Colegio Artes y Oficios Melchor Lasso de la Vega y el IPT San Miguelito, ambos en la provincia de Panamá, son los que recibirán los primeros módulos del proyecto.
Estos colegios fueron seleccionados por su proximidad con los FabLabs de la Universidad de Panamá y la Universidad Tecnológica de Panamá, con el propósito de generar un vínculo que amplíe las posibilidades de los proyectos trabajados en los MiniFabLabs y también para que los estudiantes vean una carrera universitaria como una alternativa más cercana y real, explicó la doctora María Heller, directora de innovación en el aprendizaje de la ciencia y la tecnología de la Senacyt.
“Los conocimientos adquiridos y los trabajos realizados con estos equipos no solo estimularán la creatividad, sino que aportarán valor concreto a la formación de jóvenes técnicos, preparándolos para enfrentar los desafíos de una industria en transformación, donde la capacidad de diseñar, fabricar y comprender tecnologías es una ventaja competitiva”, destacó la doctora Heller.
Imaginar y crear Los FabLabs nacieron como una iniciativa del Massachusetts Institute of Technology o MIT en Estados Unidos, para que los jóvenes estudiantes desarrollaran propuestas fuera de las horas de clases, como un espacio para imaginar, crear y usar herramientas para trabajar proyectos y con ese propósito se distribuirán los primeros MiniFabLabs en los colegios panameños, señaló Serafín Blis, coordinador de aprendizaje de la ciencia y tecnología de la Senacyt.
“Los MiniFabLab son fábricas de ideas. Esperamos que las herramientas de los MiniFabLab sean recursos que permitan desarrollar una nueva generación de jóvenes técnicos que desde su formación en los IPT empiecen una transformación de la educación, estudiantes que piensen fuera de la caja, de manera no lineal”, añadió Blis.
Luego de entregar los módulos con los equipos a los 10 colegios seleccionados y de proporcionar la correspondiente capacitación a los profesores encargados, prosigue Blis, la Senacyt, a través de su Dirección de Innovación en el Aprendizaje de la Ciencia y la Tecnología (Diact) hará más adelante una evaluación de los resultados y casos de éxito obtenidos gracias al empleo de los MiniFabLabs para avanzar con los siguientes pasos de este proyecto piloto.
Más información de la Diact en la página web de la Senacyt: www.senacyt.gob.pa/aprendizaje-y-popularizacion/.
Jerobuan Guerrel, estudiante de electrónica del Colegio Artes y Oficios Melchor Lasso de la Vega, observa con detenimiento los movimientos de la impresora 3D de uno de los laboratorios móviles o MiniFabLab, presentados recientemente en la Ciudad del Saber como parte de un proyecto educativo que permite combinar creatividad, tecnología y aprendizaje práctico.
Era la primera vez que Jerobuan podía apreciar el funcionamiento de una máquina que convierte modelos digitales en prototipos reales. “En nuestro colegio, la impresora nos va a ayudar bastante porque podremos hacer diferentes proyectos y piezas de manera más rápida”, apuntó el estudiante, tras completarse el proceso de impresión en unos pocos minutos.
Los MiniFabLab presentados también estaban dotados con otras herramientas digitales (plotter de corte, microcontroladores, sensores y motores), softwares educativos para diseño asistido por computadora y para programación visual o textual; material de trabajo como cartón, vinilo, filamento PLA (termoplástico fabricado a base de recursos renovables como el almidón de maíz, raíces de tapioca o caña de azúcar), cables y leds (diodos emisores de luz), espacio modular con mesas, computadoras, proyectores, impresoras multifuncionales y secciones de almacenamiento, además de múltiples herramientas y utensilios para trabajos técnicos.
Inspirados en el espíritu global de los FabLabs y en la filosofía del pensamiento maker, estos módulos multifuncionales forman parte de un proyecto piloto lanzado días atrás por la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), en conjunto con el Ministerio de Educación (Meduca) y la Fundación Ciudad del Saber, que consiste en la distribución de MiniFabLabs en 10 colegios de bachillerato industrial y técnico de diferentes provincias del país, para que los estudiantes puedan enriquecer su aprendizaje a través de la exploración activa de herramientas como el dibujo técnico, diseño asistido por computadora (CAD), prototipado y corte digital, impresión 3D o la integración básica de componentes electrónicos, entre otras alternativas.
El Instituto Profesional y Técnico (IPT) Bocas del Toro, el IPT Beatriz Miranda de Cabal e IPT Chiriquí Oriente, ambos en Chiriquí; el IPT Azuero, en Los Santos; el IPT Veraguas; el IPT Colón; el IPT Leonila Pinzón e IPT Industrial de Aguadulce, los dos en Coclé, y el Colegio Artes y Oficios Melchor Lasso de la Vega y el IPT San Miguelito, ambos en la provincia de Panamá, son los que recibirán los primeros módulos del proyecto.
Estos colegios fueron seleccionados por su proximidad con los FabLabs de la Universidad de Panamá y la Universidad Tecnológica de Panamá, con el propósito de generar un vínculo que amplíe las posibilidades de los proyectos trabajados en los MiniFabLabs y también para que los estudiantes vean una carrera universitaria como una alternativa más cercana y real, explicó la doctora María Heller, directora de innovación en el aprendizaje de la ciencia y la tecnología de la Senacyt.
“Los conocimientos adquiridos y los trabajos realizados con estos equipos no solo estimularán la creatividad, sino que aportarán valor concreto a la formación de jóvenes técnicos, preparándolos para enfrentar los desafíos de una industria en transformación, donde la capacidad de diseñar, fabricar y comprender tecnologías es una ventaja competitiva”, destacó la doctora Heller.
Los FabLabs nacieron como una iniciativa del Massachusetts Institute of Technology o MIT en Estados Unidos, para que los jóvenes estudiantes desarrollaran propuestas fuera de las horas de clases, como un espacio para imaginar, crear y usar herramientas para trabajar proyectos y con ese propósito se distribuirán los primeros MiniFabLabs en los colegios panameños, señaló Serafín Blis, coordinador de aprendizaje de la ciencia y tecnología de la Senacyt.
“Los MiniFabLab son fábricas de ideas. Esperamos que las herramientas de los MiniFabLab sean recursos que permitan desarrollar una nueva generación de jóvenes técnicos que desde su formación en los IPT empiecen una transformación de la educación, estudiantes que piensen fuera de la caja, de manera no lineal”, añadió Blis.
Luego de entregar los módulos con los equipos a los 10 colegios seleccionados y de proporcionar la correspondiente capacitación a los profesores encargados, prosigue Blis, la Senacyt, a través de su Dirección de Innovación en el Aprendizaje de la Ciencia y la Tecnología (Diact) hará más adelante una evaluación de los resultados y casos de éxito obtenidos gracias al empleo de los MiniFabLabs para avanzar con los siguientes pasos de este proyecto piloto.
Más información de la Diact en la página web de la Senacyt: www.senacyt.gob.pa/aprendizaje-y-popularizacion/.