Ricardo A. de la Guardia Arias, un poeta panameño que escribió poemas en inglés

Un poema panameño perdido de 1904 resurge desde los archivos familiares y revela el talento en inglés de un joven poeta del siglo pasado.
  • 23/11/2025 00:00

Ricardo Alfonso nació en Panamá el 20 de abril de 1884. Su poema, “Cuando yo haya muerto”, se publicó en inglés en octubre de 1904. El poeta cursaba entonces estudios universitarios en Santa Clara University, del Estado de California

“Cuando yo haya muerto”

Es el título en español de un hermoso poema escrito originalmente en inglés por un joven poeta panameño a principios del siglo pasado. El título original del poema es “When I am dead”. El poeta fue Ricardo Alfonso de la Guardia Arias, y quien me lo envió fue su nieta, María Cristina de la Guardia. Su hermano, Jorge de la Guardia, descubrió esta pequeña joya literaria entre los viejos papeles de la familia, junto con otros poemas del mismo autor también escritos en inglés, su segundo idioma. María Cristina y Jorge son amistades que mi esposa Catherine y yo consideramos parte de nuestra familia extendida. Ambos son conocedores de nuestra experiencia profesional como traductores de textos educativos, literarios y empresariales con nuestro antiguo servicio de traducción In Other Words...Inc., en Oakland, California, ciudad donde la familia de la Guardia también residió.

Al recibir este poema, quedamos impresionados por su belleza lírica y la refinada sensibilidad del poeta. ante el tema de la muerte. Sin mayor información acerca de su autor, decidí traducirlo al español. Mi esposa me advirtió, diciéndome: “vale la pena traducirlo, pero será un desafío”. Al iniciar mi traducción, pensé que su autor debió haberlo escrito a una edad avanzada al contemplar el término de su propia vida. Mi admiración por el poeta aumentó, al descubrir que fue escrito por un joven de apenas 20 años de edad. Esta circunstancia acentuó el respeto que me causó su emotividad poética expresada en inglés del siglo XIX.

Ricardo Alfonso nació en Panamá el 20 de abril de 1884. Su poema, “Cuando yo haya muerto”, se publicó en inglés en octubre de 1904. El poeta cursaba entonces estudios universitarios en Santa Clara University, del Estado de California. Esta universidad es la más antigua de California. Fue fundada por jesuitas en 1851, dos años después de iniciarse el gran movimiento migratorio de la fiebre del oro hacia el oeste de los Estados Unidos, con el que se inició el renacer del Istmo de Panamá como país puente del comercio internacional. El campus de la Universidad de Santa Clara se construyó en los predios de la antigua Misión Santa Clara de Asís, fundada por sacerdotes franciscanos en 1777, como parte de su labor evangelizadora. El nombre de la institución honra la memoria de la santa que fundó la Orden de las Hermanas Claretianas. Estas alusiones históricas tienen relevancia porque dos de los poemas de Don Ricardo están inspirados por dicha Misión. Uno se titula en inglés “The Mission Cross” (“La Cruz de la Misión”) y el otro “The Mission Bells” (“El Campanario de la Misión”.) [Nota: Los títulos en español son traducciones mías.]

Jorge de la Guardia encontró entre los archivos de su abuelo una docena de poemas, casi todos escritos en inglés. Datan de los años 1904 y 1905. Fueron publicados en The Redwood, una revista estudiantil mensual de la Universidad de Santa Clara. Estos datos estimularon mi curiosidad. Descubrí que tienen implicaciones históricas y literarias. Los años mencionados fueron posiblemente los dos últimos de la formación universitaria de Don Ricardo en California. Lo considero así, porque al regresar a Panamá, nuestro joven poeta fue nombrado Edecán de Manuel Amador Guerrero, el primer Presidente de Panamá, cuya gestión presidencial fue de 1904 a 1908.

La mención de The Redwood es también significativa. Se trata de un órgano estudiantil universitario fundado en 1903 y editado cada mes con el apoyo del cuerpo docente de la institución. Uno de sus propósitos era publicar “lo mejor de la producción literaria de los estudiantes”. Esto indica que la creatividad del joven poeta panameño era altamente apreciada en la Universidad de Santa Clara. En el curso de un año, entre abril de 1904 y mayo de 1905, ocho poemas de Don Ricardo aparecen publicados en The Redwood. Todos en inglés. Es algo impresionante por la lucidez literaria de poemas escritos en un lenguaje que no era su idioma nativo. Por ahora, no sabemos si la creatividad poética de Don Ricardo, fue una afición limitada a sus años como estudiante universitario. Sin embargo, creo no errar al afirmar que es el único poeta panameño que ha escrito y publicado poesía en inglés, invitado por una publicación de su propia casa de estudios en los Estados Unidos.

En 1909 Don Ricardo contrajo matrimonio con su prima hermana Guillermina Arias Diez, hija de Agustín Arias Feraud. Al fallecer su suegro, Don Ricardo se dedicó a administrar los bienes familiares hasta el año 1922. En años posteriores ejerció funciones administrativas en el nuevo Hospital Santo Tomás, fundado en 1924. También fue Gerente del canódromo para carreras de galgos (Greyhound Racing) en la Vía España, que se creó en 1927. En 1929 fue nombrado Cónsul de Panamá en San Francisco, California, y se radicó con su familia en la ciudad de Oakland, donde falleció dos años después, en 1931, a la temprana edad de 47 años.

Como nota final de esta reseña biográfica, deseo observar que los vínculos de la familia de la Guardia con la Universidad de Santa Clara continuaron por cuatro generaciones. Tres de sus hijos: Agustín, Ricardo y Samuel, al igual que su nieto y su bisnieto, ambos también llamados Agustín, cursaron estudios en esta universidad.

Incluyo a continuación el poema original en inglés de Ricardo Alonso de la Guardia Arias, con el texto de mi traducción al español. Espero haberle hecho justicia a la versión original del autor, honrar su memoria y deleitar a los lectores de La Estrella de Panamá en ambos idiomas. La Decana de la Prensa Istmeña, a través de su larga trayectoria periodística de más de 170 años, tuvo también antecedentes bilingües.

Versión original

“WHEN I AM DEAD”

When I am dead, my dearest,

May thy heart forsake me ne’er;

This is my last petition,

This is my dying prayer.

When I am dead, my dearest,

Let no tears bedew thy face,

For tears soon dry and vanish

And leave behind no trace;

But when a sad remembrance

Thy heart fills with despair,

Seek not relief in weeping,

Seek it in silent prayer.

When I am dead, my dearest,

Let no flowers bedeck my tomb,

For flowers soon dry and wither,

And waste their sweet perfume;

But take unto the altar

These flowers and lay them there;

And kneeling me remember,

Remember me in prayer.

When I am dead, my dearest,

Let not time’s hand efface

From out thy mind where lieth

My last, long resting place;

Go to the lonely churchyard

In the stilly twilight air

Seek out my tomb and o’er it,

Breathe forth a fervent prayer.

When I am dead, my dearest,

Let thy heart forsake me ne’er;

This is my last petition,

This is my dying prayer.

Ricardo A. de la Guardia Arias

Printed in THE REDWOOD

University of Santa Clara, California

October 4, 1904, page 22

Traducción

“CUANDO YO HAYA MUERTO”

Cuando yo haya muerto, querida mía,

Que tu corazón jamás me abandone;

Es lo último que te pido,

Es mi oración de moribundo.

Cuando yo haya muerto, querida mía,

Que las lágrimas no rocíen tu rostro,

Porque se secan y desvanecen pronto

Sin dejar huella alguna;

Sino que cuando un amargo recuerdo

Tu corazón entristezca,

No busques alivio llorando,

Búscalo en la oración silenciosa.

Cuando yo haya muerto, querida mía,

No dejes que flores adornen mi tumba,

Porque las flores se secan y marchitan pronto,

Y desperdician su dulce aroma;

Sino que lleva al altar

Esas flores y deposítalas allá;

Y de rodillas recuérdame,

Recuérdame al orar.

Cuando yo haya muerto, querida mía,

No dejes que la mano del tiempo

Borre de tu memoria el sitio donde reposo,

Mi última morada de descanso eterno;

Visita el cementerio solitario

Con su silente aire crepuscular

Encuentra mi tumba y sobre ella

Exhala una oración ferviente.

Cuando yo haya muerto, querida mía,

Que tu corazón jamás me abandone;

Es lo último que te pido,

Es mi oración de moribundo.

Traducción de Alcides Rodríguez Nieto

Oakland, California

4 de noviembre de 2025