Economía

La urgente necesidad de inyectar liquidez a la economía

Entre enero y mayo de 2025, los financiamientos bancarios al sector productivo aumentaron 8,7 % en comparación con el mismo período del 2024. Archivo | La Estrella de Panamá
  • 28/07/2025 00:00

La aprobación de la Ley 462 de la CSS y la salida de Panamá de la lista discriminatoria de la Unión Europea se suman a algunos indicadores que comienzan a mostrar evolución positiva, dando pie para ser cautelosamente optimistas con respecto al mediano plazo

El futuro económico de Panamá depende de la inversión privada, por lo que es necesario analizar el impacto de los choques económicos en el empleo. Entre el 2019 y 2024 la economía panameña sufrió dos “shocks”, la pandemia y el cierre minero, con la consecuente pérdida del Grado de Inversión de Fitch Ratings en marzo 2024, cada uno con repercusiones laborales diferentes.

En ese mismo lapso, la inversión privada disminuyó en más de $4,600 millones y la deuda externa aumentó en $28 mil millones. 60.018 personas más empezaron a buscar trabajo, pero en el 2024 el Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel) tramitó casi 100.000 contratos laborales menos que en el 2019, el Metro y Mi Bus transportaron 196 mil pasajeros diarios menos (23 % de reducción) y.10.542 jóvenes perdieron sus trabajos.

Dos “shocks” y tres “aftershocks” desde el 2019

Entre el 2019 y 2025 la economía panameña sufrió dos “shocks”, la pandemia y el cierre minero, con la consecuente pérdida del Grado de Inversión de Fitch Ratings en marzo 2024, cada uno con efectos laborales diferentes. A ésto se le agregan tres “aftershocks”, las protestas sociales del 2022, 2023 y 2025, incluyendo “la masacre laboral de Bocas del Toro”.

La pandemia eliminó 407.000 empleos formales privados entre el 2020 y 2021, mientras que el cierre minero ocasionó la pérdida de 54.107 empleos formales no agrícolas entre agosto 2023 y octubre 2024.

Entre agosto 2019 y octubre 2024, 44.261 asalariados privados perdieron sus empleos, pero agregamos 19.409 nuevos funcionarios y 28,372 informales a la economía. De cada cinco empleos que genera hoy la economía, tres son informales y los otros dos son funcionarios.

Masivo impacto del cierre minero en la Provincia de Panamá

En la provincia de Panamá, la destrucción de empleo ocasionada por el fiasco minero en 14 meses superó la devastación laboral de la pandemia en 26. Entre agosto 2019-octubre 2021, la Provincia perdió 98,186 empleos, mientras que entre agosto 2023 y octubre 2024 desaparecieron 104.723, 6.537 más que los empleos perdidos producto de la crisis de la Covid-19.

La repentina interrupción de $900 millones de compras anuales de la operación minera a 24 sectores de la economía. la disminución de $2,165 millones en financiamientos bancarios al sector productivo, producto del aumento de las tasas de interés debido a la pérdida del Grado de Inversión, y la pérdida de $1,600 millones de flujo de Inversión Extranjera Directa (IED) entre 2019 y 2024, representaron la desaparición de $4,600 millones de dinero privado de la economía, al tiempo que la deuda externa aumentó en $28,000 millones en ese mismo período.

El 54 % de empleos perdidos por pandemia en la provincia de Panamá fueron trabajadores con nueve o menos años de escolaridad, versus 22 % como resultado del cierre minero, donde tres de cada cuatro empleos trabajadores que perdieron sus trabajos (agosto 2023-octubre 2024) tenían 12 o más años de escolaridad.

Los sectores mayormente impactados fueron el Comercio (19 % de la contracción del empleo), Construcción (12 %), Educación (10%), Información/Comunicaciones (4 %) y Actividades Financieras (4 %).

Cuatro de cada cinco empleos formales perdidos en esos 14 meses se dieron en empresas con más de 50 trabajadores, y 34.615 profesionales universitarios perdieron sus trabajos, 35 % de la reducción total de empleo, incluyendo 27 % de todos los empleos formales del sector Financiero y de Seguros en la Provincia.

Tal como vimos con la Ampliación del Canal, una inyección de $5,000 millones a esta economía en 6 años “la pone a volar”, pero una reducción de $4,600 millones en 5, “la asfixia”.

Los jóvenes han sido “los Corderos del Sacrificio”

Los jóvenes de 15 a 29 años pasaron de representar 1 de cada 4 nuevos empleos generados por la economía (2004-2009) a no tener participación en la expansión del empleo. De hecho, entre el 2019 y 2024, 10,542 jóvenes perdieron sus trabajos.

Hoy los jóvenes son la cuarta parte de los trabajadores y la mitad de los desempleados del país. El 18 % de los jóvenes hombres y 33 % de las mujeres son “Ninis” (octubre 2024)

De hecho, entre agosto 2023 y octubre 2024, el desempleo juvenil (15 a 29 años) pasó de 15,4 % a 17, 8%. Para los hombres jóvenes, pasó de 12,6 % a 13,7 %, mientras que para las mujeres aumentó de 19,6 % a 23,4 %, un aumento de casi cuatro puntos porcentuales en 14 meses.

Por otro lado, según el más reciente Informe Laboral del INEC (octubre 2024), la escolaridad promedio del trabajador panameño (a) entre 15 y 29 años es de 10.7 años aprobados, un año menos que la media de escolaridad de la fuerza laboral del país, lo cual sugiere que los jóvenes están incursionando en el mercado laboral sin haber completado sus estudios de Bachillerato, máxime cuando las dos terceras partes de los empleos en la economía provienen de sectores que requieren niveles de escolaridad inferiores a los 12 años.Este fenómeno ya había sido advertido por el Banco Mundial en su Informe “Mejores Empleos en Panamá, el rol del capital humano” (julio 2012), donde señaló que sólo 1 de cada 3 alumnos que inicia Primer Ciclo se gradúa de Bachiller, y 95% de los graduandos humildes no continúa sus estudios, mientras que menos del 2 % de los jóvenes del quintil más pobre de la población estudia más allá de la Educación Media y se ve forzado a incursionar a un mercado laboral para el cual no está preparado.

60% de los empleos que hoy tienen los jóvenes son informales, y aquellos que obtienen empleos formales, lo hacen con salario promedio de $698.14 mensuales, $35.87 menos que el salario promedio en la economía ($734.01)

Comienzan a haber indicios de recuperación

La aprobación de la Ley 462 de la Caja del Seguro Social (CSS) y la salida de Panamá de la lista discriminatoria de la Unión Europea se suman a algunos indicadores que comienzan a mostrar evolución positiva, dando pie para ser cautelosamente optimistas con respecto al mediano plazo.

Entre enero y mayo de 2025, los financiamientos bancarios al sector productivo aumentaron 8,7 % en comparación con el mismo período del año pasado, síntoma de un mayor nivel de confianza en el clima para la inversión privada.

Esto se refleja en el mercado laboral. En el primer semestre del 2025 se tramitaron 142.391 nuevos contratos laborales, 2,3 % más que en el mismo período del 2024 (139.162), y el promedio mensual de nuevos contratos laborales en el segundo trimestre del 2025 (25.082) fué 13 % superior al del primer trimestre (22.213).

El futuro de la Inversión Extranjera en Panamá pasa por Donoso

Hoy tenemos la mayor tasa de informalidad laboral de los últimos 20 años (49.3%), así como los niveles de endeudamiento y déficit fiscal ($6,416 millones) más altos de nuestra historia.

Hemos creado una economía artificial, donde los beneficios se convirtieron en derechos, financiados con plata prestada. Una economía que necesita inversión privada, pero está “adicta” a la deuda.

Esto requerirá resolver el futuro de la mina de cobre. Qué hacemos, cómo y cuándo, desde la perspectiva de los inversionistas extranjeros, determinará nuestra capacidad para convencer a otros de que invertir en Panamá es buen negocio. De lo contrario, seguiremos siendo una economía de informales y funcionarios, financiada con plata prestada.

Entre el 2019 y 2025 la economía panameña sufrió dos “shocks”, la pandemia y el cierre minero, con la consecuente pérdida del Grado de Inversión de Fitch Ratings en marzo 2024, cada uno con efectos laborales diferentes. A ésto se le agregan tres “aftershocks”, las protestas sociales del 2022, 2023 y 2025, incluyendo “la masacre laboral de Bocas del Toro”.