Presidente de Canal 1 en Colombia advierte sobre intento de cierre por el Gobierno
- 19/08/2025 00:00
El presidente de la emisora televisiva colombiana, Ramiro Avendaño, denuncia que la decisión de caducar la concesión del canal “amenaza la libertad de expresión” El 15 de agosto, el presidente Gustavo Petro sorprendió a Colombia al ordenar al ministro de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), Julián Molina, iniciar un proceso de licitación para el Canal 1, a pesar de que la concesión en manos de Plural Comunicaciones tiene vigencia legal hasta 2037.
La decisión, interpretada como un intento de “caducidad anticipada”, encendió alarmas sobre la independencia de los medios y el respeto al marco jurídico. En diálogo con La Estrella de Panamá, Ramiro Avendaño Jaramillo, presidente de Canal 1, aseguró que lo que está en juego “no es un tema empresarial, sino un asunto de principios: la libertad de prensa y la libertad de expresión en Colombia”.
Peligroso antecedente Avendaño explicó que el Gobierno estaría utilizando la figura de la caducidad contractual para arrebatar la concesión y entregarla a un tercero “que cumpla con unos intereses ideológicos”.
“No se trata de nacionalizar el canal como lo hizo Hugo Chávez con Radio Caracas Televisión en Venezuela, sino de caducar un contrato para reasignarlo. El Canal 1 funciona como un rehén: se nos intimida para que el resto de los medios aprendan a comportarse”, afirmó.
El Ejecutivo señaló que la falta de respaldo de un conglomerado económico los convierte en un blanco más fácil: “Puede que hayan decidido ir primero contra Canal 1, porque no pertenecemos a un gran grupo político o financiero”.
El presidente del canal recordó que Plural Comunicaciones pagó 35 millones de dólares por la concesión y ha invertido más de 130 millones en su operación. Además, subrayó que Canal 1, junto a RCN y Caracol, es uno de los tres canales privados de televisión abierta con cobertura nacional, llegando al 95% de los colombianos.
“Si se desconoce un contrato extendido por ley hasta 2037, no solo se violenta la libertad de prensa, también la libertad de empresa y la libre competencia”, advirtió.
Solidaridad y temores En medio de la controversia, Avendaño destacó la solidaridad recibida de medios nacionales e internacionales. El Tiempo llevó el tema a portada, El Universal de Cartagena publicó un editorial y hasta voces como la de Cayetana Álvarez de Toledo, diputada española, expresaron su preocupación.
“Ya la gente comprendió que no es un pleito empresarial contra la emisora de televisión, y que, si logran cerrar Canal 1, el mensaje será de intimidación para todos los medios”, sostuvo.
No obstante, el ejecutivo advirtió que las presiones se extienden más allá del sector mediático. Según explicó, se han registrado intervenciones del Ministerio de Trabajo y otras entidades estatales contra supermercados, cadenas de salud y empresas de bebidas vinculadas a grupos con medios de comunicación. “Parece un patrón sistemático de intimidación contra actores económicos que sostienen medios independientes”, afirmó.
Sobre las consecuencias jurídicas, Avendaño señaló que una eventual caducidad generaría demandas millonarias contra el Estado colombiano. “Al final, todos los ciudadanos pagarían con sus impuestos por un perjuicio ocasionado por una decisión arbitraria”, dijo.
Riesgo democrático Para Avendaño, el mayor peligro no es la pérdida de la concesión, sino el precedente que pueda sentar contra otros medios. “Lo que vemos es un modelo de miedo y retroceso. Si logran cerrar un canal independiente, el mensaje será de intimidación para todos los periodistas y empresas mediáticas”, advirtió.
En ese sentido, recordó que Colombia tiene una larga historia de violencia contra comunicadores: “No podemos olvidar los asesinatos de Guillermo Cano, Jaime Garzón, Diana Turbay y más recientemente el senador Miguel Uribe. El país sabe lo que significa callar voces críticas”.
Consultado sobre el futuro inmediato, Avendaño fue categórico: “Nuestra línea editorial no cambiará. Nuestro eslogan es ‘El 1 libre como tú’ y vamos a mantenernos fieles a la libertad de prensa. Defenderemos nuestros derechos en los estrados jurídicos, pero sobre todo en el terreno de la opinión pública, con apoyo de nuestros anunciantes y televidentes”.
El presidente del canal de televisión reconoció que algunos anunciantes han recibido hostigamientos de entidades estatales en las últimas semanas, pero confía en que la solidaridad prevalezca. “Invertir en Canal 1 hoy no es solo comprar pauta publicitaria: es respaldar la democracia y la libertad de expresión en Colombia”, concluyó.
El 15 de agosto, el presidente Gustavo Petro sorprendió a Colombia al ordenar al ministro de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), Julián Molina, iniciar un proceso de licitación para el Canal 1, a pesar de que la concesión en manos de Plural Comunicaciones tiene vigencia legal hasta 2037.
La decisión, interpretada como un intento de “caducidad anticipada”, encendió alarmas sobre la independencia de los medios y el respeto al marco jurídico. En diálogo con La Estrella de Panamá, Ramiro Avendaño Jaramillo, presidente de Canal 1, aseguró que lo que está en juego “no es un tema empresarial, sino un asunto de principios: la libertad de prensa y la libertad de expresión en Colombia”.
Avendaño explicó que el Gobierno estaría utilizando la figura de la caducidad contractual para arrebatar la concesión y entregarla a un tercero “que cumpla con unos intereses ideológicos”.
“No se trata de nacionalizar el canal como lo hizo Hugo Chávez con Radio Caracas Televisión en Venezuela, sino de caducar un contrato para reasignarlo. El Canal 1 funciona como un rehén: se nos intimida para que el resto de los medios aprendan a comportarse”, afirmó.
El Ejecutivo señaló que la falta de respaldo de un conglomerado económico los convierte en un blanco más fácil: “Puede que hayan decidido ir primero contra Canal 1, porque no pertenecemos a un gran grupo político o financiero”.
El presidente del canal recordó que Plural Comunicaciones pagó 35 millones de dólares por la concesión y ha invertido más de 130 millones en su operación. Además, subrayó que Canal 1, junto a RCN y Caracol, es uno de los tres canales privados de televisión abierta con cobertura nacional, llegando al 95% de los colombianos.
“Si se desconoce un contrato extendido por ley hasta 2037, no solo se violenta la libertad de prensa, también la libertad de empresa y la libre competencia”, advirtió.
En medio de la controversia, Avendaño destacó la solidaridad recibida de medios nacionales e internacionales. El Tiempo llevó el tema a portada, El Universal de Cartagena publicó un editorial y hasta voces como la de Cayetana Álvarez de Toledo, diputada española, expresaron su preocupación.
“Ya la gente comprendió que no es un pleito empresarial contra la emisora de televisión, y que, si logran cerrar Canal 1, el mensaje será de intimidación para todos los medios”, sostuvo.
No obstante, el ejecutivo advirtió que las presiones se extienden más allá del sector mediático. Según explicó, se han registrado intervenciones del Ministerio de Trabajo y otras entidades estatales contra supermercados, cadenas de salud y empresas de bebidas vinculadas a grupos con medios de comunicación. “Parece un patrón sistemático de intimidación contra actores económicos que sostienen medios independientes”, afirmó.
Sobre las consecuencias jurídicas, Avendaño señaló que una eventual caducidad generaría demandas millonarias contra el Estado colombiano. “Al final, todos los ciudadanos pagarían con sus impuestos por un perjuicio ocasionado por una decisión arbitraria”, dijo.
Para Avendaño, el mayor peligro no es la pérdida de la concesión, sino el precedente que pueda sentar contra otros medios. “Lo que vemos es un modelo de miedo y retroceso. Si logran cerrar un canal independiente, el mensaje será de intimidación para todos los periodistas y empresas mediáticas”, advirtió.
En ese sentido, recordó que Colombia tiene una larga historia de violencia contra comunicadores: “No podemos olvidar los asesinatos de Guillermo Cano, Jaime Garzón, Diana Turbay y más recientemente el senador Miguel Uribe. El país sabe lo que significa callar voces críticas”.
Consultado sobre el futuro inmediato, Avendaño fue categórico: “Nuestra línea editorial no cambiará. Nuestro eslogan es ‘El 1 libre como tú’ y vamos a mantenernos fieles a la libertad de prensa. Defenderemos nuestros derechos en los estrados jurídicos, pero sobre todo en el terreno de la opinión pública, con apoyo de nuestros anunciantes y televidentes”.
El presidente del canal de televisión reconoció que algunos anunciantes han recibido hostigamientos de entidades estatales en las últimas semanas, pero confía en que la solidaridad prevalezca. “Invertir en Canal 1 hoy no es solo comprar pauta publicitaria: es respaldar la democracia y la libertad de expresión en Colombia”, concluyó.