Trump anuncia ataques terrestres contra Venezuela y aumenta la presión a Maduro
- 03/12/2025 00:00
La alocución ocurre en medio de acusaciones de crímenes de guerra, un presunto ultimátum a Nicolás Maduro para abandonar el poder y un llamado del Papa, a mantener la vía del diálogo
Ante la expectación creada en los últimos días en torno a las posibles acciones militares dirigidas a territorio venezolano, el presidente estadounidense Donald Trump se mostró decidido ayer a dar finalmente el paso en una declaración brindada a los medios acreditados en la Casa Blanca después de reunirse con su gabinete por novena vez desde que asumió su segunda presidencia.
“Empezaremos con los ataques con tierra. (...) El objetivo es atacar a los hijos de perra. Esta gente ha matado a 200,000 estadounidenses el año pasado”, dijo Trump, en referencia a los narcotraficantes venezolanos, a los que tuvo como objetivo en la primera fase de la operación Lanza del Sur, dentro de la que llevó a cabo más de una veintena de ataques a presuntas narcolanchas tanto en el mar Caribe como en el Pacífico oriental.
Los ataques terrestres serían parte de la segunda fase de esta operación armada, que trajo consigo al mayor portaviones del Ejército estadounidense, el U.S.S. Gerald Ford.
Si bien la administración Trump mantuvo desde el principio que sus operaciones buscaban poner fin al narcotráfico en el Hemisferio Occidental, analistas apuntan a una posible cambio de régimen y la salida de Nicolás Maduro, considerado ilegítimo por gran parte de la comunidad internacional desde las elecciones del 2024, en las que se autoproclamó como vencedor sin mostrar las actas oficiales de los comicios.
La hipótesis del cambio de régimen ha cobrado aún mayor fuerza desde que se supo que Trump - de acuerdo a la agencia noticiosa Reuters y, a su vez, citada por el diario El País – sostuvo una llamada telefónica con Maduro en la que este recibió el ultimátum de la Casa Blanca de dejar el poder antes del pasado viernes 28 de noviembre, a cambio de garantizarle su seguridad en un eventual traslado a un tercer país en caso de que tuviera que abandonar el territorio venezolano.
De igual modo, el líder venezolano exigió una amnistía para él y su familia y el cese tanto de las sanciones internacionales en su país como de los procesos que se le siguen en su contra en el Tribunal Penal Internacional de La Haya por crímenes de lesa humanidad.
Entre las propuesta de Maduro según la prensa estadounidense, estaba también la conformación de un gobierno interino liderado por la actual vicepresidenta de Venezuela Delcy Rodríguez, hasta la celebración de unas nuevas elecciones.
Mientras la comunidad internacional se mantiene en vilo a la espera de que en cualquier momento comienza la segunda fase de la operación Lanza del Sur, el secretario de Defensa Pete Hegseth tuvo que salir al paso de las acusaciones en su contra por presuntamente haber cometido un crimen de guerra el pasado 2 de septiembre, cuando se destruyó la primera narcolancha en el Mar Caribe.
De acuerdo a una investigación del diario estadounidense The Washington Post, la primera presunta narcolancha destruida por la operación estadounidense fue abatida por un primer ataque en el que se destruyó la embarcación, matando al instante a nueve personas. Sin embargo, de acuerdo a la investigación periodística, Hegseth ordenó un segundo ataque para terminar de asesinar a los dos supervivientes que se aferraban a los restos que quedaron de la lancha.
Algo que iría en contra de las leyes de la guerra al asesinar a un combatiente herido indefenso. “No hemos hecho sino empezar a atacar barcos del narco y a mandar narcoterroristas al fondo del océano por envenenar al pueblo estadounidense”, dijo Hegseth, que se encontraba sentado a la derecha de Trump.
La portavoz de la Casa Blanca Karoline Leavitt aseguró, por su lado, que la orden para dar ese segundo ataque – por el cual congresistas demócratas y republicanos pidieron una investigación – vino en cambio del almirante Frank Bradley. “La prensa no entiende que esas decisiones se toman en mitad de la niebla de la guerra”, intentó justificar por su parte Hegseth.