Inician honras fúnebres a Miguel Uribe Turbay en el Congreso de Colombia tras su asesinato
- 12/08/2025 10:06
El Congreso rinde homenaje póstumo al senador con cámara ardiente de tres días, marcada por discursos, retrasos y emotivos llamados a la unidad El Congreso de Colombia inició este 11 de agosto un homenaje póstumo de tres días al senador Miguel Uribe Turbay, asesinado recientemente en Bogotá. En el Salón Elíptico, lugar donde un año antes dio su discurso como vocero de la oposición, hoy se alzan arreglos florales y una fotografía en gran formato para despedir al congresista del Centro Democrático, víctima de la violencia que golpea al país.
Ceremonia y retrasos en la llegada del féretro El féretro permanecerá en cámara ardiente durante tres días, según lo decretado por el Congreso de Colombia. La jornada inicial estuvo marcada por largas esperas y la constante llegada de figuras políticas y allegados.
En la mañana, se anunció que el ataúd llegaría al Capitolio Nacional a las 3:00 p.m., pero la hora cambió varias veces debido a que Medicina Legal tardó más de nueve horas en realizar los análisis forenses. Finalmente, el cuerpo fue trasladado a la funeraria hacia las 4:00 p.m. para su preparación y posterior llegada al recinto legislativo.
Asistencia de figuras políticas y mensajes de unidad Entre los primeros asistentes estuvo el exsenador David Luna, quien pidió dejar en segundo plano el debate electoral y buscar símbolos de unidad nacional. También acudieron miembros del uribismo, como el concejal Andrés Barrios, testigo del atentado contra Uribe, y el exministro Fabio Valencia Cossio, quienes evitaron pronunciarse ante la prensa.
El representante Christian Garcés llamó a que la muerte del senador sirva para unir al país en la lucha contra el narcotráfico, al que calificó como el principal financiador de la violencia en Colombia.
Palabras de la familia y presencia de expresidentes En nombre de la familia, Julio César Turbay Quintero, tío de Miguel Uribe y hermano de Diana Turbay —también asesinada por la violencia—, pidió “dejar a un lado los discursos incendiarios” y promover la paz y el entendimiento.
Entre los asistentes por la entrada principal estuvieron el expresidente César Gaviria y su hijo Simón Gaviria, quienes no ofrecieron declaraciones. Sin embargo, previamente, César Gaviria había afirmado que el asesinato de Uribe evidenciaba el fracaso de la política de seguridad del actual gobierno.
Accesos restringidos y llegada de la familia Por la entrada lateral ingresaron quienes buscaban evitar a la prensa, como el encargado de negocios de Estados Unidos en Colombia, Jhon McNamara. El Salón Elíptico alcanzó una asistencia mayor a su capacidad habitual durante sesiones especiales.
Pasadas las 6:00 p.m., llegó María Claudia Tarazona, esposa del senador, junto a sus dos hijas. A pesar del visible dolor, tomó la palabra para dirigirse a los medios y pidió no poner en riesgo su seguridad mientras expresaba su mensaje.
El Congreso de Colombia inició este 11 de agosto un homenaje póstumo de tres días al senador Miguel Uribe Turbay, asesinado recientemente en Bogotá. En el Salón Elíptico, lugar donde un año antes dio su discurso como vocero de la oposición, hoy se alzan arreglos florales y una fotografía en gran formato para despedir al congresista del Centro Democrático, víctima de la violencia que golpea al país.
El féretro permanecerá en cámara ardiente durante tres días, según lo decretado por el Congreso de Colombia. La jornada inicial estuvo marcada por largas esperas y la constante llegada de figuras políticas y allegados.
En la mañana, se anunció que el ataúd llegaría al Capitolio Nacional a las 3:00 p.m., pero la hora cambió varias veces debido a que Medicina Legal tardó más de nueve horas en realizar los análisis forenses. Finalmente, el cuerpo fue trasladado a la funeraria hacia las 4:00 p.m. para su preparación y posterior llegada al recinto legislativo.
Entre los primeros asistentes estuvo el exsenador David Luna, quien pidió dejar en segundo plano el debate electoral y buscar símbolos de unidad nacional. También acudieron miembros del uribismo, como el concejal Andrés Barrios, testigo del atentado contra Uribe, y el exministro Fabio Valencia Cossio, quienes evitaron pronunciarse ante la prensa.
El representante Christian Garcés llamó a que la muerte del senador sirva para unir al país en la lucha contra el narcotráfico, al que calificó como el principal financiador de la violencia en Colombia.
En nombre de la familia, Julio César Turbay Quintero, tío de Miguel Uribe y hermano de Diana Turbay —también asesinada por la violencia—, pidió “dejar a un lado los discursos incendiarios” y promover la paz y el entendimiento.
Entre los asistentes por la entrada principal estuvieron el expresidente César Gaviria y su hijo Simón Gaviria, quienes no ofrecieron declaraciones. Sin embargo, previamente, César Gaviria había afirmado que el asesinato de Uribe evidenciaba el fracaso de la política de seguridad del actual gobierno.
Por la entrada lateral ingresaron quienes buscaban evitar a la prensa, como el encargado de negocios de Estados Unidos en Colombia, Jhon McNamara. El Salón Elíptico alcanzó una asistencia mayor a su capacidad habitual durante sesiones especiales.
Pasadas las 6:00 p.m., llegó María Claudia Tarazona, esposa del senador, junto a sus dos hijas. A pesar del visible dolor, tomó la palabra para dirigirse a los medios y pidió no poner en riesgo su seguridad mientras expresaba su mensaje.