Nuevos correos revelan los vínculos ocultos entre Donald Trump y Jeffrey Epstein

Los correos divulgados por el Congreso revelan que Jeffrey Epstein mencionó a Donald Trump en conversaciones con Ghislaine Maxwell y el periodista Michael Wolff, sugiriendo que el entonces magnate conocía su red de abusos. AFP
  • 12/11/2025 10:47

Tres correos inéditos del pederasta Jeffrey Epstein exponen su cercanía con Trump y abren sospechas sobre lo que la Casa Blanca podría estar ocultando

El Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes de Estados Unidos divulgó tres correos electrónicos inéditos del millonario Jeffrey Epstein, cuyos contenidos han vuelto a situar en el centro del escándalo al presidente Donald Trump. Los mensajes, enviados entre 2011 y 2019, sugieren que el entonces empresario tenía conocimiento de la conducta criminal del financiero y que su silencio formó parte de un pacto tácito entre ambos.

En uno de los correos, fechado en 2011 y dirigido a Ghislaine Maxwell, Epstein afirma que Trump “pasó horas” en su residencia junto a una de sus víctimas, cuyo nombre permanece reservado. “Quiero que te des cuenta de que el perro que aún no ha ladrado es Trump”, escribió el pederasta a su colaboradora, quien actualmente cumple una condena de veinte años por tráfico sexual de menores. En el mismo mensaje agrega que el entonces magnate “no ha mencionado ni una sola vez” aquel encuentro con la joven.

Advertencias y silencios

En otro intercambio, fechado en enero de 2019, Epstein sugiere que el ya presidente de Estados Unidos estaba al tanto de sus delitos. “Por supuesto que sabía sobre las chicas, dado que le dijo a Ghislaine que parara”, escribió al periodista Michael Wolff, conocido por sus libros críticos sobre Trump.

Un tercer correo, de 2015, muestra la preocupación del propio Epstein ante la posibilidad de que, durante un debate republicano, le preguntaran a Trump por su relación con él. “Si tuviéramos que prepararle una respuesta, ¿cuál crees que debería ser?”, consultó el financiero. Wolff respondió: “Déjalo que se ahorque solo. Si dice que no ha estado en la casa o que no ha montado en el avión, eso te dará una valiosa moneda política”. Epstein añadió que esa “moneda” podía servir para “colgar” a Trump o para que este le “debiera” algo.

Negaciones y versiones contradictorias

Trump ha negado en repetidas ocasiones haber tenido conocimiento de los crímenes de Epstein, a quien definió como “un bicho raro”. Tampoco se ha probado judicialmente que el presidente participara o encubriera los abusos. Su amistad con el financiero, sin embargo, se extendió por más de quince años, hasta aproximadamente 2004. Las versiones sobre el final de esa relación son contradictorias, pero todas coinciden en que ocurrió antes del primer proceso judicial contra Epstein en 2006.

El suicidio del millonario en 2019, mientras esperaba juicio por tráfico sexual de menores, no logró apagar las sospechas. Su muerte, en una celda de máxima seguridad en Manhattan, reavivó teorías sobre un posible asesinato y dejó abiertas incógnitas que hoy vuelven a resonar con la publicación de los correos.

Maxwell y el fantasma del indulto

La difusión de los mensajes coincide con nuevos reportes sobre los intentos de Ghislaine Maxwell de obtener un indulto presidencial. Según fuentes del Congreso, la excolaboradora de Epstein habría solicitado el perdón de Trump, bajo el argumento de “cooperación judicial”. Se ha filtrado además que la reclusa recibe un trato privilegiado en la prisión donde cumple condena, “como si estuviera en un hotel”, según un confidente citado por legisladores demócratas.

La reacción política

El congresista Robert García, demócrata por California, declaró que “estos correos plantean preguntas evidentes sobre qué más está ocultando la Casa Blanca y la verdadera naturaleza de la relación entre Epstein y el presidente”. Los archivos fueron obtenidos por el Congreso mediante orden judicial de la herencia del financiero.

La publicación coincide también con el inminente fin del cierre de Gobierno más largo en la historia de Estados Unidos, que ha mantenido paralizada la actividad legislativa durante más de cuarenta días. Con su reapertura, los demócratas esperan avanzar en la difusión completa de los llamados “papeles Epstein”, documentos que podrían contener los nombres de poderosos empresarios y políticos implicados en la red de tráfico sexual.