María Corina Machado: Premio Nobel de la Paz

Tomada de Wikipedia
  • 17/10/2025 00:00

Como es sabido, el Premio Nobel de la Paz 2025 fue concedido hace pocos días a la luchadora social venezolana María Corina Machado, ingeniera industrial y profesora de 58 años de edad. Había 338 postulaciones entre individuos y organizaciones. Además del inmenso reconocimiento que implica ganarse este premio, en dinero representa una dotación de once millones de coronas suecas; lo cual, según internet, equivale hoy a $1,156,652.86.

Se trata, sin duda alguna, de un merecidísimo homenaje a su irrenunciable perseverancia, a su enormemente valiente y audaz lucha por la libertad de expresión en su país, como modelo a seguir contra las dictaduras que oprimen a sus pueblos so pretexto de ganarle la partida ya sea a la derecha o a la izquierda contestataria, imponiéndose por la fuerza a los pueblos y reprimiendo desvergonzadamente a sus opositores.

“La democracia es un prerrequisito para una paz duradera. Sin embargo, vivimos en un mundo donde está en retroceso, donde cada vez más regímenes autoritarios desafían las normas y recurren a la violencia”, dictaminó el Comité noruego al hacer pública su decisión. Había X candidatos al premio este año. Además, el Comité puntualizó lo siguiente al informar su fallo al mundo: “Observamos las mismas tendencias a nivel mundial: el Estado de Derecho es abusado por quienes ostentan el poder, la libertad de prensa es silenciada, los críticos son encarcelados y las sociedades son empujadas hacia regímenes autoritarios y la militarización. En 2024 se celebraron más elecciones que nunca (en diversos sitios del mundo), pero cada vez menos son libres y justas”.

Machado, una época conocida en su país y afuera como “La Dama de Hierro”, habría de señalar en conversación con Kristian Berg Harpviken, presidente del Comité Noruego del Premio Nobel de la Paz: “Este es el logro de un movimiento, de una sociedad. Ciertamente no merezco un premio así, pero lo recibo con humildad y agradecimiento en nombre del pueblo de Venezuela”, Posteriormente emitió una declaración personal, en la que afirmó, entre otras cosas: “Este inmenso reconocimiento a la lucha de todos los venezolanos nos impulsa a concluir nuestra tarea: conquistar la libertad”.

Se trata de una mujer inteligente, asombrosamente incansable, de una tenacidad inexpugnable y convicciones absolutamente democráticas, que no se ha dejado intimidar por las amenazas y la persecución del régimen hasta verse obligada a la clandestinidad en su país, y desde ahí seguir luchando sin tregua. Muy pocas personas en el mundo tienen esa capacidad de resistencia, ese magnetismo admirable que su lucha tenaz despierta en su pueblo. Me recuerda a otros grandes héroes de la humanidad perseguidos por sus ideas: Nelson Mandela y Martin Luther King.

María Corina Machado nace en Caracas el 7 de octubre de 1967, y tiene tres hijos que se encuentran fuera del país como una forma de protegerlos, ha señalado. Fue elegida diputada de la Asamblea Nacional de Venezuela por el Estado de Miranda en 2010, obteniendo la mayor cantidad de votos para un candidato a diputado en ese momento y comenzando su período en enero de 2011. En marzo de 2014 fue destituida de su cargo. Esto ocurrió después de aceptar el puesto de “representante alterna” de Panamá ante la Organización de Estados Americanos (OEA) para hablar sobre las protestas en Venezuela; dato éste que poco se conoce en Panamá.

El entonces presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, hoy acusado de participar con Maduro en el negociado del narcotráfico internacional, declaró en aquella ocasión que al aceptar un cargo diplomático de otro país, María Corina había violado la Constitución y, por lo tanto, perdía su investidura automáticamente. En realidad, su destitución era un castigo por sus críticas constantes al manejo de la cosa pública, para callarla. Lo cual no se logró: nunca fue más tenaz en sus esfuerzos por democratizar a su país, arriesgando su libertad y la vida misma.... Designado por el militar Hugo Chavez poco antes de fallecer en un hospital cubano, Maduro se robó descaradamente las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024, tras haber inhabilitado a María Corina, su más feroz contrincante; las ganaría ampliamente Eduardo González Urrutia, hoy asilado en España.

Como las decisiones de la cúpula venezolana resultan impredecibles, es difícil saber si la merecedora de un premio internacional tan importante, dispondrá de la libertad necesaria para salir de su actual escondite a fin de volar a Oslo a recibir su premio. De ocurrir semejante atropello, sería el último clavo que la Dictadura le estaría preparando desde ahora a su propio ataúd.

Un aplauso de pie para el Comité Noruego que eligió a María Corina para tan honroso galardón, así como para el valeroso pueblo venezolano: los millones que permanecen en el exilio en diversos países y los que día a día sufren los rigores de una oprobiosa tiranía.

Aprovecho para felicitar a mis talentosos colegas escritores, periodistas y fotógrafos venezolanos que eligieron a nuestro país como su segundo hogar, quienes aquí han sabido destacarse.

*El autor es escritor, profesor jubilado, promotor cultural y editor