La quiebra de RG Hotels era evidente

Actualizado
  • 02/12/2015 01:00
Creado
  • 02/12/2015 01:00
Avalúos amañados y fideicomisos que no protegían las garantías de los inversionistas son algunas de las fallas encontradas

Los compromisos de RG Hotels ascienden a $70 millones, mientras que los bienes no llegan a $40 millones, declaró ayer el abogado penalista Alvin Weeden, referente al escándalo en el mercado de valores propiciado por la quiebra de la empresa.

‘Consideramos que ya estaban en quiebra de activos y de liquidez antes de la emisión de bonos de 2012, es más dicha actividad fue para pagar obligaciones y para poder funcionar', destacó el jurista.

‘De La Guardia hizo comentarios que no son ciertos, al decir que retrotraer a la quiebra anulaba los fideicomisos',ALVIN WEEDENABOGADO PENALISTA

Según Weeden, la teoría era que con la ganancia de las ventas por la construcción de las villas en el área de playa y el edificio Aqua Tower, se lograría sanear las finanzas de la empresas, pero ni se levantaron los proyectos, e incluso, las losas evaluadas por ingenieros de la edificación de 12 pisos apuntaban a que las bases no eran suficientes para sostener la estructura. ‘Evidentemente ese dinero no se inyectó'.

ACERCA DE LA QUIEBRA

El abogado detalló que el propósito de los inversionistas norteamericanos no es perjudicar en absoluto los fideicomisos, sino que con los pocos bienes que tienen les devuelvan algo de dinero a los bonohabientes.

‘Retrotraer la quiebra al 2012 en nada afecta el derecho a los inversionistas de los fideicomisos, porque ellos no han cometido ningún fraude sino que han sido estafados, porque realmente el sistema los estafó y ellos tienen todo el derecho a cobrar íntegro lo poco que se obtenga de ese fideicomiso', reiteró Weeden.

El jurista explicó que ‘al comparecer a la quiebra, se busca que quienes se llevaron el dinero indebidamente, bancos o cualquiera que lo haya hecho, devuelva esos dineros a la masa, para que en alguna forma ellos puedan cobrar un poquito más'.

Los bonos totalizaban $30 millones, señaló Weeden, y su cálculo en garantías de fideicomisos es de $9 millones. por lo que es mucho más grave la situación en este caso, debido a que de cada dólar invertido por los accionistas, apenas tendrían $0.13 de recobro. ‘Estamos hablando de más de 150 inversionistas nacionales y extranjeros'.

Para el jurista ‘la responsabilidad recae en todo el sistema. El director del Registro Público de aquella época tiene mucha responsabilidad en esto, los funcionarios que calificaron este fideicomiso, las compañías de avalúos cuyas evaluaciones no correspondían a la realidad, los dueños de las empresas y los corredores de valores que recomendaron los bienes como una inversión segura', resaltó. Acotó que ‘las autoridades no se molestaron en leer los fideicomisos, porque si hubieran leído se habrían percatado de que era un fraudecomiso'.

INVOLUCRADOS

Señaló que el ministro de Economía y Finanzas, Dulcidio De La Guardia, ha hecho comentarios que no son ciertos al afirmar que retrotraer a la quiebra anulaba los fideicomisos y las garantías que en los fideicomisos tenían los inversionistas, y eso no es así en la ley, ni es la intención de los inversionistas norteamericamos.

Weeden detalló que De La Guardia estaba vinculado a un banco que manejaba valores de esa naturaleza. ‘Imaginénse al ministro vendiendo estos bonos. La Bolsa de Valores de Panamá también tiene un alto nivel de responsabilidad, porque si no conocen los bienes que se están negociando, está muy mal estructurada'.

‘Aquí hay corrupción atrás. No puedo creer que el Registro Público haya pasado esos fideicomisos porque una propiedad que esta secuestrada no puede ser dada fuera del comercio y no se puede hacer ningún acto de registro con ella, porque sería un fraude', recalcó.

‘Lo vemos con preocupación porque se está impactando los derechos de los tenedores de bonos',DULCIDIO DE LA GUARDIAMINISTRO DE ECONOMÍA

Antonio Bonilla, uno de los inversionistas afectados, dijo que en el caso de los bonos fue una oferta que estaba en la bolsa publicada, ‘no fue una empresa privada, por lo que eso significa que todo lo que nos mostraron a nosotros tiene que ser legítimo'.

Aseguró que contaban con los requisitos y cuando entraron a trabajar se dieron cuenta de que todo era mentira: ‘Nosotros no podíamos participar en un fraude, tenemos que denunciarlo'.

Acotó que en lo personal considera que las obligaciones van a crecer mucho más. Por el momento se habla de $70 millones, pero no se ha contado a toda la gente que compraron apartamentos y que están pagando hipotecas, pensando que tenían un área social, lobby y piscina, y en verdad no tienen nada, ni siquiera un acceso a la playa. ‘Yo creo que esto va a ser elevado sobre los $150 millones'.

En tanto, el abogado de la quiebra, Jorge Lau, detalló que uno de los objetivos principales de la retrotracción de quiebra es la posibilidad, porque habría que materializarla, de poder recuperar una serie de bienes del grupo RG Hotels y Casa de Campo, que debieron ingresar y nunca se registraron en el patrimonio.

‘Conforme con las dos emisiones que suman $30 millones, deduciendo los $11 millones que se iban a pagar en los compromisos previos bancarios, quedaban $19 millones, que iban a ser utilizados para la construcción del edificio y del proyecto de playa.

‘Con las retrotracción podemos llegar a ese momento histórico de 2012 y comenzar a tocar la puerta de cada uno de los que se beneficiaron con los $19 millones, incorporarlos al patrimonio y tratar de pagarles a toda la masa', dijo Lau.

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