La aviación siria tiene como blanco zonas de Palmira

La aviación del régimen sirio bombardeó hoy puntos de la ciudad monumental de Palmira, en un intento de dañar a los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI), que ayer se apoderaron de ella y que ya controlan más de la mitad de Siria.

Por el momento, poco se sabe de lo que los extremistas están haciendo en el interior de la urbe moderna y en su parte antigua, que está en la periferia suroccidental.

La poca información que ha trascendido es que aviones del Ejército tomaron como objetivo algunos barrios de la localidad, ubicada en la provincia central siria de Homs, tal y como explicó a Efe por internet el activista Zaer al Jalediya.

La fuente agregó que hubo choques aislados entre los efectivos gubernamentales y los radicales en áreas próximas a Palmira, pero de poca importancia, porque el grueso de las tropas del régimen y sus milicias aliadas se replegaron ayer.

Las Fuerzas de Defensa Nacional, milicianos progubernamentales, ayudaron a evacuar a los civiles de la población, pero Al Jalediya destacó que muchos ciudadanos no pudieron escapar y siguen en Palmira.

Según la televisión oficial siria, el director general de Antigüedades y Museos de Siria, Maamún Abdelkarim, subrayó que las autoridades intentan ahora contactar con "partes de la comunidad local" para identificar los riesgos que afronta el sitio arqueológico, pese a la dificultad en las comunicaciones. El responsable sirio reconoció que su mayor temor es que Palmira sea destruida por "los criminales del EI".

Lamentó, además, que la comunidad internacional no haya hecho lo suficiente para protegerla, tras los repetidos llamamientos de la Dirección General de Antigüedades siria para defenderla como ciudad que forma parte del patrimonio mundial.

Abdulkarim recordó que la resolución 2199 aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU en febrero pasado criminaliza la destrucción y el saqueo del legado cultural de Siria e internacional. Palmira, uno de los seis sitios sirios incluidos en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, fue en los siglos I y II d.C. uno de los centros culturales más importantes del mundo antiguo y punto de encuentro de las caravanas en la Ruta de la Seda.

Durante la semana que ha durado la ofensiva del EI para tomar su control y el de otras zonas del este de Homs, al menos 462 personas han perdido la vida, de acuerdo con las cifras publicadas hoy por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

De esas víctimas, 71 eran civiles -doce de ellos menores-, 241 efectivos leales al presidente sirios, Bachar al Asad, y 150 extremistas.

Con la conquista de esta región, los yihadistas dominan ya 95.000 kilómetros cuadrados del territorio sirio, lo que equivale a más de la mitad del país, pese a los bombardeos de la coalición internacional, liderada por EEUU.

El Observatorio indicó que el EI está presente en nueve provincias sirias: Homs y Hama, en el centro; Al Raqa, Deir al Zur y Al Hasaka, en el noreste; Alepo, en el noroeste; Sueida, en el sur; y Damasco y Rif Damasco.

Los radicales también tienen en su poder la mayoría de los campos de gas del país, menos el yacimiento de Al Shaer, en el este de Homs y en manos del régimen, y el de Ramilan, en poder de las Unidades de Protección del Pueblo -milicias kurdo sirias-, en Al Hasaka.

En declaraciones a Efe, el analista militar libanés Hisham Yaber precisó que Palmira es importante para el EI porque en sus alrededores hay yacimientos de gas y petróleo, además de "varios depósitos de armas del régimen".

En su opinión, los radicales, que iniciaron su ataque en esa región el pasado 13 de mayo, aprovecharon que el ejército está ocupado en otros frentes como Yisr al Shogur, en Idleb (noroeste); Al Qalamún, en la frontera con el Líbano; y Duma, en la periferia de Damasco, para lanzar la ofensiva contra Palmira. El futuro de las ruinas de esta ciudad es incierto por el historial de destrucción que tiene el EI de lugares arqueológicos en Siria e Irak, que ha empleado con fines propagandísticos.

Esta organización anunció hoy que había tomado toda Palmira, tras dominar el aeropuerto y la prisión, donde, aseguró, que mató a un gran número de sus oponentes, en un comunicado difundido por internet y cuya veracidad no puedo ser comprobada.

Los yihadistas proclamaron un califato en junio de 2014 en las zonas que controlan en territorio sirio e iraquí.