Buscando la luna de miel

PANAMÁ. Su gobierno todavía no ha empezado, pero Ricardo Martinelli quiere entrar, ahora mismo, a lo que los analistas llaman la “luna de miel de los primeros 100 días”.

Luego de una transición en la que salió más golpeado de lo que esperaba, Martinelli vuelve a tomar la ofensiva. Jamás esperó las duras críticas que tuvo que enfrentar por varios de sus nombramientos que los medios cuestionaron por diferentes causas. Lo cierto es que la nueva estrategia de “La Alianza por el Cambio” apunta a una reconexión con el idilio popular que supo conseguir durante la campaña y que también lo llevó al poder.

Por eso, Judy Meana, vocera del nuevo gobierno, se encargó de anunciar a los cuatro vientos los “ejes o compromisos” que se ejecutarán en los 100 primeros días de gobierno. Meana, quien nada como pez en el agua en el mundo de la política, sin por eso perder su belleza, dejó en claro que la gestión del nuevo presidente iniciará buscando cumplir algunas de las promesas de campaña. Los cuatro ejes son: pensión de 100 dólares para ancianos, aumento a la Policía Nacional, creación de la Secretaría del Metro y en el tema de la canasta básica los productos Compita no se venderán casados.

Martinelli intentará mostrarse en los zapatos del pueblo desde el minuto cero. Quiere generar las condiciones para decirle pronto a los panameños que él es diferente, que no tienen que esperar cinco años para ver sus promesas cumplidas, sino apenas unos días.

Sin embargo, muchos de los presentes en la conferencia de Meana también esperaban respuestas o propuestas para mitigar problemas urgentes como la explosión social en Arraiján que empezó siendo un reclamo por las instalaciones educativas y parece haberse convertido en algo mucho más profundo.

Martinelli ha sido muy eficaz construyendo el relato agónico de un país que necesitaba un cambio urgente. Y ese cambio era él. La gente le creyó y votó por él. Martinelli ahora responde a esa virtualidad publicitaria poniendo en movimiento las propuestas que deberían modificar ese relato. Las cosas, en principio, parecen bastante más complejas.

Roberto “Bobby” Velásquez, ex candidato a la Alcaldía capitalina por el Partido Revolucionario Democrático (PRD) aunque dice que ve como positivo las primeras metas del nuevo gobierno, porque son para beneficio de la población, considera que se deben enfocar expectativas de mejorar temas que quedaron pendientes en los sectores de salud y educación.

Velásquez manifestó que el PRD como colectivo responsable será garante de que el nuevo gobierno cumpla con sus promesas.

Para el analista político, Ramón Jiménez Velez, los anuncios de Martinelli demuestran que está empezando con buen pie y que va a cumplir con sus promesas de campaña.

“Aunque hay temas más urgente y de más impacto que hay que resolver, Martinelli va a cumplir con los temas más inmediatos y menos difíciles”, indicó Jiménez Velez.

El sociólogo Marco Gandásegui, va más allá en sus apreciaciones y señala que aunque es partidario de las cuatro compromisos que adquirió el nuevo gobierno para ejecutar en los primeros 100 días de gestión, hay un ingrediente que falta en los anuncios.

Según Gandásegui ese ingrediente lo es un “Plan Nacional de Desarrollo de gobierno en cinco años”. Manifestó que aunque los cuatro primeros puntos a ejecutar son parte de sus promesas de campaña, Martinelli también prometió poner fin a la violencia y a la pobreza, proyectos que se logran con un plan.

“El no puede estar picoteando de aquí y de allá. Todo debe ser parte de un Plan de Desarrollo que obliga a que se tomen en cuenta aspectos importantes como la pobreza y la inseguridad”, acotó Gandásegui.