Subarriendan a extranjeros apartamentos de Curundú

Pese a que los contratos de copropietarios de los apartamentos del Proyecto Curundú prohíben  el subarriendo, el Banco Hipotecario Nacional (BHN) ha recibido denuncias de que algunos de sus ocupantes originales están subarrendándolos, y lo que es más grave, a extranjeros.

El Proyecto Curundú, un complejo inmobiliario de 1,008 soluciones habitacionales,  dirigido a mejorar la calidad de vida de estos panameños que vivían en condiciones sanitarias y estructurales deplorables,se construyó con fondos del Estado durante la gestión del presidente Ricardo Martinelli.

Ramón Hernández, gerente ejecutivo del BHN, expresó que estos proyectos "no son para sacar beneficios. La denuncia que estamos recibiendo es que personas que pagan $56.00 mensuales lo subarriendan en $300.00 al mes. Se quedan con cerca de $250 mensuales", aseguró el funcionario, quien anunció el inicio de operativos para detectar estas irregularidades.

En otro orden, lamentó que se estén dando casos de personas que están volviendo a construir viviendas de madera y zinc, las que replican lo que antes existía en  Curundú, detrás del Mercado de Abastos. "Hemos emitido comunicaciones para lograr reunirnos con el Municipio y el representante de corregimiento para tratar el tema y buscar una solución", indicó el gerente.

La renovación de Curundú incluyó la construcción de 1,008 soluciones habitacionales, a un costo de $94.3 millones, ejecutado por la Constructora Odebrecht. El aspecto urbanístico se enfocó en atender las necesidades básicas de los residentes del área con la construcción de sistemas de servicios básicos de agua potable, saneamiento y electricidad.

También se canalizó el cauce del río Curundú para reducir los focos de inundaciones y riesgos sanitarios; se construyeron seis canchas de fútbol sintéticas, seis canchas de uso múltiple y seis parques infantiles; un centro de capacitación; la construcción de calles, aceras y áreas peatonales; y el remozamiento de la fachada del estadio Juan Demóstenes Arosemena.

Curundú fue entregado en 2014, y ha sido la única obra de renovación urbana y social en Panamá que ha reubicado a sus residentes en el mismo sector.