Apadrinamiento en el Órgano Judicial

El martes 6 de mayo de 2025, a través de la página oficial del Órgano Judicial, la magistrada presidenta del Tribunal Superior de Niñez y Adolescencia, y designada como revisora del Consejo de Administración Judicial, Judith Cossú Admadé, notificó a los jueces de Niñez y Adolescencia y Penal de Adolescentes sobre los resultados satisfactorios del informe de evaluación del período probatorio.

Cabe señalar que este proceso de evaluación, entre otros, se rigen bajo la Ley 53 de 27 de agosto de 2015, que regula la carrera judicial y que dentro de sus objetivos están los procedimientos para el ingreso, traslado y ascenso de aspirantes; deberes y derechos de quienes laboran en el Órgano Judicial y establece principios éticos-judiciales.

Esta misma excerta legal establece los principios rectores de la carrera judicial, como la igualdad de oportunidades, la selección por méritos, integridad y transparencia. Sin embargo, para quienes dependen de esta institución, específicamente del Juzgado Municipal de Niñez y Adolescencia del distrito de Colón, nos queda la desazón de si quien funge como juez de este despacho, cumplió y cumple con los parámetros que ordena la Ley de Carrera Judicial.

Desde la apertura de este Juzgado Municipal en el distrito de Colón, el 16 de agosto de 2024, y que ha pasado por la no renovación de la primera juez nombrada, durante su inicio hasta el 15 de enero de 2025, y que a partir de esta fecha se da el nombramiento de la juez actual, quien fuera la secretaria judicial I de la juez anterior, que bajo su nombramiento este despacho en menos un mes ha contado con cuatro secretarios judiciales diferentes, esto inquieta a cualquiera.

No conforme con el manejo que ha mantenido el Órgano Judicial para los nombramientos de las dos jueces, que debieron estar sujetas a concurso de acuerdo con la Ley 53 de 27 de agosto de 2015, a menos de un año, el funcionamiento de este despacho da mucho que decir, pues quien lleva el nombre de juez municipal de Niñez y Adolescencia del distrito de Colón se ha visto envuelta en una serie de denuncias ante la Unidad Especial de Investigación y Transparencia del Órgano Judicial, desde su cargo de secretaria judicial I y ahora como juez.

No cabe duda de que el perfil de la juzgadora municipal de este distrito es asombroso. No obstante, en el ejercicio del cargo, parece desconocer su responsabilidad en cuanto a respetar el debido proceso y de cuáles son los asuntos que le competen de acuerdo a su naturaleza del caso. Además, viola derechos humanos de los usuarios que son parte de una población vulnerable, ignorando su obligación de respetar, cumplir y hacer cumplir la Constitución Política y la Ley.

En suma, pese a que se han presentado las denuncias correspondientes ante la Unidad Especial de Investigación y Transparencia del Órgano Judicial, a la que también se le ha solicitado una auditoría judicial exhaustiva y transparente que permita comprobar los hechos denunciados; sin embargo, se ha mostrado indiferente a estos hechos, pues parece que quien apadrina este tipo de figuras incompetentes controla desde dentro la impunidad.