Columnistas

De literatura y educación STEAM en el currículo educativo

  • 20/02/2024 00:00

El inicio de otro año escolar se asoma a nuestra ventana y aunque Panamá todavía suena a brisa de verano, la esperanza que traen los nuevos comienzos se refleja en los rostros de los apasionados de la educación.

No importa el rol que ocupes en este rompecabezas, si te corresponde la figura de estudiante, docente o padre de familia, detrás de cada persona se encuentra un ciudadano panameño por nacimiento o por decisión que puede aportar muchísimo a la educación nacional. Sí, porque es tarea de todos.

La educación, además de ser un derecho universal es un reto complejo, de esos donde muchos conocen la teoría, pero pocos se animan a ponerla en práctica, y aunque tanto en el sistema educativo estatal o particular, nos hemos sobrepasado con el uso de curitas y agua tibia, es tiempo de reflexionar y accionar para que nuestros estudiantes se conviertan en los ciudadanos que queremos mañana.

¿Qué herramientas incorporamos para abrir nuevas oportunidades a la educación panameña?

Incluir educación STEAM (enfocadas en la integración de ciencias, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas) nos permitirá gozar de un aprendizaje realista debido a que, a partir de problemas del diario vivir despertaremos el interés de nuestros estudiantes a través de la investigación de soluciones prácticas.

También, al afianzar la literatura desde la primera infancia, nuestros estudiantes cultivarán un pensamiento crítico y reflexivo para tomar decisiones evaluando las dos caras de la moneda, así como incorporar la creatividad como estrategia de innovación en los procesos permanentes de las empresas.

Integrar educación STEAM y literatura como herramientas de vida permitirá que nuestros estudiantes comprendan lo leído y sean capaces de comunicar sus propias conclusiones a través de la escritura o la expresión oral. Adicional, serán capaces de incorporar en su comportamiento las “power skills” o habilidades de empoderamiento, antes denominadas habilidades blandas.

De igual manera, la creación de bibliotecas y escuelas como templos del saber debe planificarse desde ya para que, en la siguiente década, cada uno de los más de 700 corregimientos a nivel nacional cuenten con estos centros de educación.

Son tantas las propuestas que existen en los panameños apasionados por la educación, que estoy convencida de que lo que se requiere es voluntad y enfoque. Preguntarnos de una vez por todas, qué hacemos como país para fortalecer el aprendizaje de la ciencia, la tecnología y la literatura sería un buen comienzo.

Al responder esta interrogante seríamos conscientes si el currículo en educación básica general, premedia y media se encamina a dar luces a nuestros estudiantes para que cursen una carrera científica o literaria, recordando que una educación de calidad permite a una persona desarrollar su imaginación y su potencial creativo.

La autora es periodista