Estados Unidos vuelve a concentrarse en el hemisferio occidental: ¡exigimos respeto!

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  • 24/11/2025 00:00

Mi experiencia como analista de inteligencia militar, en operaciones de inteligencia en manejo de crisis de alto impacto como guerras en Centroamérica. Por más de 45 años, mi tarea ha sido la de analizar, la defensa de la nación panameña, desde la óptica del estricto apego del interés nacional de Panamá.

Comprender el pensamiento táctico y estratégico de las amenazas hacia Panamá de donde se originarán.

Hay una nueva realidad. La batalla estratégica con la República Popular China para la supervivencia de los Estados Unidos se está librando en el hemisferio occidental. No es en Asia, no es en el viejo continente, Europa. Quién está en control del hemisferio Occidental con todas sus ventajas, mares, canales, recursos minerales estratégicos. Dominará al mundo.

Panamá no es campo de batalla

Como decía el Gral. Omar Torrijos: “Ni con la izquierda ni con la derecha con Panamá”. Los enemigos de los EE.UU. no son necesariamente nuestros enemigos. Ese es el concepto desarrollado por el presidente José Raúl Mulino. (Doctrina Mulino) Pero con un vacío ideológico desde la visión de gobiernos de derecha en Argentina, Ecuador, Perú, Chile próximamente donde hay partidos y sociedades ideológicamente formadas. Frente a gobiernos de izquierda Brasil, Colombia, México, Honduras, y totalitarios Venezuela, Nicaragua, Cuba.

China por años ha penetrado al hemisferio occidental con su proyecto estratégico de quitárselo a los EE.UU. No con un concepto militar, pero sí con un concepto de potencia para asegurar la comida a su pueblo, tal es el caso de su flota pesquera, pescando en aguas cercanas al continente. Y, asegurarse los recursos minerales para su industria militar y comercial, y consolidarse como potencia comercial controlando el canal de Panamá, espacio vital para ambas potencias.

Los chinos están a la ofensiva en el hemisferio occidental por mantenerse en los países que cooptaron aplicando “métodos no muy kosher”. Ahora el gobierno de EE. UU. actual salió al paso a enfrentarlos.

Hay que decirlo muy claro: Panamá no es su campo de batalla. Búsquense a otros. Así de sencillo. ¡Esa es su guerra!, no la de Panamá.

En América hay una guerra en desarrollo para el control del hemisferio occidental, que por errores estratégicos de los EE. UU., por décadas abandonaron al hemisferio occidental y su esfuerzo estratégico se concentró en las guerras contra el terrorismo mundial Irán, Irak, Medio oriente, la OTAN.

No nos metan en su pelea refiriéndose a EE. UU. y China.

Panamá sí mantiene algunas amenazas y enemigos en común con los EE. UU.: el uso del narco terrorismo como arma, un tipo de “guerra hibrida” a los gobiernos democráticos, penetrándose en nuestra sociedad.

Ley antimafia

Respaldo la política de Estado como la creación de la Ley Antimafia, la Ley de Extinción de Dominio (con un marco definido que no aplique a asuntos políticos) hay que reinventarse frente a las organizaciones criminales transnacionales.

Pero el presidente primero tiene que limpiar al Órgano Judicial como bien lo declaró en su conferencia de prensa. Limpiar a los estamentos de seguridad, limpiar al Consejo de Seguridad, limpiar al Ministerio Público.

Lo primero es hacer una limpieza profunda como también Ud. lo dijo en campaña, para que funciones la ley antimafia.

Esta es la nueva realidad geopolítica. Hay que comprender el nuevo pensamiento del presidente Donald Trump en su segundo mandato, tomemos como referencia las declaraciones del secretario de Estado, Marco Rubio. Desconoce a la ONU.

El concepto tradicional del derecho internacional está prácticamente erradicado de la política exterior y económica de los EE. UU.

A la administración MAGA solo le interesa sus propios intereses, definidos por la propia administración actual. Maltratan a gobiernos amigos, aliados históricos, imponen aranceles punitivos a naciones amigas y de mala forma actúan metiéndonos en su guerra geopolítica. La gran prensa de Estados Unidos -que desarrolló su matriz de información- publicó que están realizando el entrenamiento de pequeñas unidades (tamaño pelotón) en Panamá, en la escuela de supervivencia en la selva de Ft. Sherman. Colón. No hay tropas del U.S. Army entrenando en Panamá, y mucho menos como parte del esfuerzo bélico en desarrollo en el Caribe. La versión de los EE. UU. nos impone su matriz de guerra de una forma poco amistosa.

Igualmente, ocurrió con la embajada de China con el inoportuno e inaceptable método “quebrar brazos” y abusar en aplicar su influencia en nuestros asuntos internos, lo cual es un acto de intimidación de China con el tema de los diputados que viajaron a Taiwán.

¿La pregunta que ganamos?

Estos dos hechos recientes poco amistosos de Estados Unidos y China en contra de Panamá, maltratándonos e interviniendo en nuestros asuntos e intereses nacionales. Respeto es lo que deben comprender ambas potencias con Panamá.

Panamá es soberano con un gobierno democrático y tenemos nuestros propios intereses. Se puede cooperar, pero sin empujar o imponernos matrices de comportamiento alineados con sus políticas e intereses como potencias.

El mensaje del gobierno a Estados Unidos y a China: Respeto, respétenos. Por un lado, están los intereses de ambas potencias en guerra comercial enfrentados. Esa es su guerra. No es la guerra de Panamá.