Curu, una muestra cultural plasmada en piezas creativas

Curu es una marca que nació en 2015 “con el deseo de diseñar y experimentar en la creación de piezas de moda original”, así lo define su creadora Yamileth Campos, quien comparte que hoy, a las 6:45 p.m., presentará en el Fashion Week Panamá (FWP) su colección 'Diablika', inspirada en una de las manifestaciones culturales más antiguas de la región de Azuero, el diablico sucio.

“Hoy podrán conocer la nueva línea de indumentaria, las propuestas de carteras y calzados. Esta colección fue pensada en la sostenibilidad, creando diseños transformables, que se puedan reutilizar con solo quitar una pieza. Las carteras se pueden usar de día con crossbody con su strap grueso, y de noche como clutch, un bolso de estilo ejecutivo. El calzado está diseñado con tacones gruesos altos y de tacón mediano para mejor comodidad”, expone Campos.

Aparte de 'Diablika', Curu cuenta con 5 colecciones más, la primera fue 'Curu Art', inspirada en “las pinturas costumbristas en acrílico de mi autoría, en donde plasmo la mujer guna, emberá, el paisaje de San Blas, un abstracto de la máscara del diablico sucio y la cutarra”.

En cuanto a la segunda entrega, subraya que llevó el nombre de 'Rana Dorada, inspirada en el anfibio que habita El Valle de Antón. “En esa ocasión presentamos como detalle de orfebrería, confeccionada en bronce con baño de oro de 24 quilates.

La tercera colección fue denominada 'Jagua' y estuvo inspirada en las gráficas corporales de los emberá.

Su cuarta apuesta para el mercado, 'Bellota', fue creada para promover la herencia artesanal de Panamá. “Para materializar esta línea colaboramos con el artesano Presente Martínez, de la comunidad del Membrillo de Penonomé, para la creación de la cesta de bellota”.

En 2019 para el FWP, presentó 'Identidad Pty 507', una colección colectiva con el diseñador Moisés Sandoya, inspirada en la simbología de los adoquines de las casas del Casco Viejo de la ciudad.

Yamileth comparte que la marca se enfoca en el diseño de piezas de moda contemporánea que reflejan las costumbres y tradiciones de Panamá, sin perder su esencia cultural. “Dentro de nuestra línea ofrecemos: curu handbags, shoes, jewerly y clothing”.

En cuanto al proceso creativo, la idea de cada colección inicia con querer contar una historia inspirada en Panamá. “Esta narrativa la plasmamos en bocetos, luego en los diseños estampados, que son el punto central de nuestras piezas, por siguiente pasamos al diseño de patrones, la confección de piezas y por último, a la producción de videos y fotos con modelos para la promoción y publicidad en redes sociales”.

Con respecto a los materiales, sostiene que están armados con cuero, herrajes con baño de oro, manijas de semillas de tagua, la indumentaria con textiles de algodón, y con estampados inspirados en sus propias pinturas de estilo costumbrista.

Asimismo, Campos arguye que la mezcla de la cultura local a través de la moda forma parte de Curu. “Aquí fusionamos la estética moderna, contemporánea del profesional del diseño y el oficio ancestral de las comunidades indígenas y campesinas de nuestro país”.

Una realidad es que en Panamá cada año surgen más marcas bajo conceptos culturales. La creadora de Curu anota que para ella es importante que el mundo conozca la riqueza cultural del territorio nacional, por eso “creamos piezas que reflejan y promueven la herencia ancestral, las tradiciones de un pueblo, pero lo más importante es hacer que sea sostenible”.

La marca maneja dos líneas: 'Curu Panamá', donde los precios de los artículos oscilan entre $35 y $105; y 'Curu Luxury', donde los precios van de $180 a $355.

En ese contexto puntualiza que el mercado local es pequeño, por lo tanto, señala que debe crear estrategias para conectar con el público al cual se dirige.

En cuanto al respaldo hacia los diseñadores y artesanos en el territorio nacional apunta que pudiera ser mejor y “necesitamos más apoyo para acelerar el desarrollo de nuestra industria y poder mejorar la competitividad de nuestra oferta exportable”.

Un hecho es que la covid-19 ha provocado transformaciones en todos los sectores y la industria de la moda no se escapa de esta realidad. Campos prevé que después del confinamiento habrá un cambio en el comportamiento del consumidor. “Creo que después de todo esto, las personas pensarán más al momento de gastar dinero; van a evitar hacer compras presenciales e incluirán las redes sociales como fuente importante para la toma de decisiones a la hora de adquirir un producto”.

La diseñadora remarca que tiene entre sus planes la creación de una página para e-commerce. Luego irá en busca de internacionalizar su marca y tener éxito comercial en los mercados de Estados Unidos, Europa y Asia.

Yamileth Campos es una panameña proveniente del interior del país. “Soy madre de familia, artista, que vive y siente orgullo de sus raíces”. Se define a sí misma como una persona exigente, ordenada, soñadora, cariñosa, que disfruta compartir con su familia, y de la soledad frente al lienzo.

La creativa cursó estudios de diseño gráfico en la Universidad de Panamá y artes plásticas en la Universidad de Ganexa. “Me especialicé en moda en la Academia Fashion Pro en Panamá. También, adquirí un diplomado en fashion bussines en el Instituto Marangoni en Milán, Italia”.

En cuanto a sus inicios en el campo de la moda explica que todo surgió con el deseo de trabajar en algo que fusionara sus tres pasiones: el diseño, el arte y la moda. “De ahí nace Curu, una marca que crea piezas originales, reflejando nuestra cultura a través del arte”, detalla Campos, quien apunta que se vio motivada a emprender ese camino por la necesidad de realizarse dentro de su vocación, de ser su propia jefa y de crear una empresa exitosa.

En esa línea, expone que iniciar como emprendedora no es un sendero fácil de transitar porque se requiere de entusiasmo, disciplina y mucho sacrificio. “He visto crecer mi emprendimiento. Siempre trazando retos para lograr dirigir mi marca hacia nuevos horizontes”.

Con relación a los recursos que ofrece el istmo para arrancar un negocio, comenta que “nunca son suficientes, cuando las metas son exigentes en lo financiero”. Para Campos, lo más difícil cuando se empieza un negocio es “creer en uno mismo y luego convencer al mercado”.

Lo cierto es que hoy más mujeres se están abriendo paso en todos los campos. “Las mujeres están demostrando que son capaces de emprender, que tienen la fortaleza para manejar una vida familiar y llevar un negocio”.

Campos envió un mensaje a aquellos que desean crear una marca e iniciar su negocio: “Busquen crear un producto que los diferencie, que defina su ADN, y lo más importante es capacitarse antes de comenzar un proyecto”.

Por último, la creadora de Curu hizo una reflexión acerca de la esencia de la femineidad: “realmente consiste en la manera que tiene la mujer de expresar su espíritu”, por eso considera que para ser elegante no se requiere de gran poder adquisitivo, solo “se necesita buen gusto, y eso no se compra”.