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- 08/11/2022 17:58
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El Barcelona se llevó este martes un complicado choque tras remontar ante Osasuna con los tantos de Pedri y Raphinha (1-2) después de que la expulsión del polaco Robert Lewandowski a la media hora pusiera contra las cuerdas a unos azulgranas que se marchan al parón mundialista como líderes del campeonato en el día de la despedida de Gerard Piqué, que fue expulsado durante el descanso como suplente por increpar al árbitro.
La noche era propicia para que un Osasuna el pleno auge diese la sorpresa ante un Barcelona con numerosos jugadores que disputarán el Mundial de Catar y que tal vez ya tuvieran su cabeza en la cita más importante de este deporte a nivel global.
Los locales dejaron claras sus intenciones desde el comienzo. Moncayola disparó a puerta y su tiro fue desviado por un defensor azulgrana a córner. Rubén García se dispuso a sacar desde la esquina para que David García ganase la marca a Busquets. El central de Ibero hizo el 1-0 en el minuto 6. El Sadar enloqueció con esta grata sorpresa.
La posesión era culé y la paciencia rojilla. Lewandowski vio su primera amarilla en el minuto 11, aviso para un delantero que no llegó a entrar en el choque en ningún momento. Jesús Gil Manzano le enseñó la segunda amonestación en el 31 tras un codazo sobre David García. La estrella polaca vio la roja por primera vez en 10 años.
Las ayudas se sucedieron en todo momento en el equipo de Arrasate. Rubén García cerró bien la derecha junto a Nacho Vidal. Mientras tanto, Chimy Ávila intentó rascar algún balón como punta de lanza ante unos blaugranas a los que les costó llegar de forma clara.
El árbitro anuló un tanto de Ferrán Torres por claro fuera de juego. El Barcelona tenía dos problemas. 45 minutos por delante con un futbolista menos frente a un Osasuna enchufado con su gente.
Piqué se dirigió al colegiado nada más acabar el primer tiempo y, ante la negativa de este a iniciar una discusión, lo persiguió muy airado hasta el túnel de vestuarios. Tras la reanudación se conoció la expulsión del defensor en su último partido como profesional.
Contra todo pronóstico, el Barça empató en el 48 aprovechando una mala acción defensiva de su rival. Pedri no dudó en disparar por la esquina inferior izquierda con gran maestría.
Arrasate quitó a Torró y metió a Kike García, un cambio ofensivo para hacer ver a los suyos que podían ir a por el partido. la posesión cayó del lado osasunista sin llegar a utilizarla con malicia. El Barcelona disimuló bien la ausencia de una de sus piezas más importantes.
Chimy Ávila centró y su golpeo a punto estuvo de meterse en la portería de Ter Stegen de manera directa, pero el meta germano arregló la situación. Osasuna
seguía llegando y Xavi Hernández no daba su brazo a torcer con cambios ofensivos como Raphinha o Ansu Fati.
El brasileño Raphinha cabeceó un pase en largo de De Jong ante la salida de un Aitor Fernández que nada pudo hacer. Finalmente, el Barcelona salvó un partido que se le puso muy complicado con la expulsión del polaco.