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- 21/01/2015 01:00
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La responsabilidad social ha cobrado una fuerza tal que se ha convertido en una vertiente casi crucial en el sistema de operaciones de una compañía.
La ética empresarial, por su parte, es prácticamente obligatoria para asegurar el funcionamiento correcto, pero sobre todo, confiable, de cualquier negocio.
Ahora, es importante resaltar que aún cuando entre ambos conceptos se preconcibe un vínculo fundamental, la presencia de la ética empresarial no garantiza que la compañía lleve a cabo acciones de, o dedique una porción de su ideología a, la responsabilidad social.
Para comprender mejor la interacción entre la ética empresarial y la responsabilidad social, es básico tener en claro de lo que estamos hablando, las implicaciones de cada quién.
El portal de negocios Pymempresario define responsabilidad social como la ‘forma de hacer negocios que toma en cuenta efectos sociales, ambientales y económicos, integrando en ella el respeto por los valores éticos que inciden en las personas’.
No ha de confundirse con la ética empresarial, delimitada por Forbes como el ‘conjunto de principios y normas bajo las cuales se rigen las actividades que desempeña una empresa’.
La responsabilidad social, de ser un valor ya existente en la compañía, está contemplada dentro de la ética empresarial; a su vez, la ética empresarial se encarga de regir el modelo de conducta de la responsabilidad social según los principios de la organización.
Ejemplificando cada uno de los anteriores, acciones de responsabilidad social serían la donación de útiles escolares a instituciones de gobierno, invertir en campañas que promuevan la reducción de emisiones de CO2, o sesiones de reforestación en zonas afectadas. Dejando de lado la forma y analizando el fondo a detalle, se puede concretar que la responsabilidad social es una actitud ‘madura, conciente y sensible a los problemas de nuestra sociedad pro-activa para adoptar hábitos, estrategias y procesos que nos ayuden a minimizar los impactos negativos que podemos generar al medio ambiente y a la sociedad’.
La ética empresarial, por otro lado, contempla los valores y principios de la compañía, como responsabilidad, respeto, etc.