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- 29/05/2012 02:00
MADRID. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no logró ayer atajar las incertidumbres sobre el plan de saneamiento de Bankia y el acoso contra la deuda española en un nuevo lunes negro en los mercados financieros.
Así, mientras la entidad financiera se ha pegado un nuevo batacazo en Bolsa y ha provocado fuertes ventas en el conjunto del sector español, el repunte de las dudas que surgen de la nacionalización de la entidad han pasado factura a los títulos del Tesoro, ya que los intereses que los inversores exigen por apostar su dinero en el papel del Estado ha subido con determinación hasta tocar un nuevo máximo histórico en 513 puntos básicos.
Para atajar la escalada, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, compareció pasadas las 13 horas en una rueda de prensa extraordinaria. En su intervención, el jefe del Ejecutivo volvió a pedir a Europa una respuesta que garantice la sostenibilidad de la deuda y un mensaje claro en defensa del euro, así como negó rotundamente que España vaya a necesitar un rescate de su banca. ‘No va a haber ningún rescate de la banca española’, aseguró. Sin embargo, sus palabras no han logrado calmar los nervios y, por la tarde, la prima de riesgo ha seguido subiendo y la Bolsa ha aumentado su caída hasta cerrar en su nivel más bajo de los últimos nueve años.
BANKIA SE DESPLOMÓ
Bankia cotizó ayer en Bolsa con un desplome del 26% en su primer movimiento tras estar suspendida desde el jueves y cerró la sesión con un recorte del 13.38%, con lo que las acciones del banco han caído a 1.36 euros.
Sobre las ayudas a Bankia, el presidente se ha mostrado confiado en que el Estado recuperará en un futuro los 19,000 millones que va a inyectar en la entidad y ha asegurado que no van a afectar al déficit.
‘Cuando la entidad esté saneada y, siendo como es la primera entidad financiera de España, se va a vender y se va a recuperar la inversión del Estado’, explicó Rajoy, que advirtió de que la alternativa a la inyección de fondos públicos era ‘la quiebra’, algo que no podían permitir.
En Bolsa, las acciones de Bankia han marcado un mínimo a primera hora en 1.10 euros, una caída del 29.9% con respecto al cierre del jueves, que fue el último precio que marcó antes de pasar todo el viernes con la cotización suspendida.
Luego, el retroceso se ha aminorado hasta niveles del 7% pasadas las 12 (1.46 euros) hasta que ha intervenido Rajoy, cuando se ha reavivado el castigo. Al cierre, los títulos del banco se han dejado un 13.38% mientras las caídas en el conjunto del selectivo Ibex 35 han cogido velocidad y han llevado a la Bolsa española a marcar un nuevo mínimo desde 2003, lo que a su vez arrastró a pérdidas al resto de Europa pese a cotizar toda la mañana en verde.
Con este nuevo batacazo, el castigo acumulado desde la salida de rato se amplía al 46.8%. Desde su estreno en julio de 2011, cuando empezó a cotizar en 3.75%, el desplome es del 64%.
Sin embargo, aun hay margen en opinión de los expertos para que sigua cayendo. Los analistas de los bancos de inversión internacionales que publicaron ayer sus valoraciones creen que el desplome puede ser mayor y manejan precios de 0.20 o 0.30 euros por acción, como es el caso de Nomura o JP Morgan, aunque las diferencias son importantes.
Deutsche Bank sitúa su valoración o precio objetivo en 0.50 euros por acción, Espírito Santo en 0.90 euros y Mediobanca en 1 euro.
La prima de riesgo, por su parte, ha llegado a rebasar los 513 puntos básicos, su máximo histórico, después de que EL PAÍS publicase este domingo que el Gobierno planea pagar el rescate de Bankia inyectando directamente títulos de deuda pública sin pasar por el mercado, de lo que se han hecho eco las agencias financieras y los principales medios internacionales. Generalizar esa estrategia para el rescate del sector financiero podría suponer 50,000 o 60,000 millones más de deuda pública.
Según fuentes del Gobierno citadas por Reuters, el Ejecutivo ya habría consultado al Banco Central Europeo sobre este día y el instituto emisor habría dado el visto bueno a la decisión. No obstante, el propio Rajoy negó que hayan realizado la consulta.