Chávez en cuenta regresiva

La convalecencia del presidente venezolano Hugo Chávez en un hospital de La Habana ha sido motivo de rumores durante los últimos meses. ...

La convalecencia del presidente venezolano Hugo Chávez en un hospital de La Habana ha sido motivo de rumores durante los últimos meses. El enorme misterio que rodea su enfermedad y su proceso de recuperación mantiene en ascuas, no sólo al pueblo venezolano —que reclama su regreso para que gobierne o renuncie— sino a todo el hemisferio, en gran parte porque muchos de los países aliados temen que se suspenda la asistencia venezolana, en caso de fallecer el enfermo mandatario. Recientemente, el gobierno venezolano mostró una fotografía donde aparece Chávez con sus hijas Rosa Virginia y María Gabriela, en amena conversación, mientras que, por otra parte, el ministro de Comunicación e Información venezolano dice que el presidente tiene una ‘cánula traqueal que le impide el habla’. El problema de Chávez radica fundamentalmente en una infección respiratoria, como consecuencia del cáncer que padece y por el cual ha sido intervenido en varias ocasiones. No se vislumbran buenas noticias en cuanto a su recuperación definitiva. Si fuese lo contrario, hace tiempo Chávez hubiese regresado a Caracas para seguir normalmente su fase postoperatoria. Pareciera ser una situación irreversible, contrarreloj. Mientras esto ocurre, Venezuela se mantiene gobernada por un triunvirato de facto, amparado por el Tribunal Supremo de Justicia, que ha sentado nueva jurisprudencia al aceptar la ausencia permanente del mandatario ‘hasta su recuperación’, pero haciendo caso omiso a lo que establece la constitución de ese país. Desde el 10 de enero, fecha en la cual Chávez debió haber tomado posesión, y no lo hizo, debió asumir por 30 días la presidencia Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional, a cuyo término se debían haber realizado nuevas elecciones. El chavismo no apuesta a nuevos comicios sin la presencia de su líder fundamental, porque simplemente desaparecería del mapa político. Muchos chavistas sostienen que no sería lo mismo seguir apoyando el modelo actual de gobierno sin la presencia de su creador, lo cual deja ver el carácter personalista de los 14 años de un régimen que se ha vendido exitosamente como una franquicia política. Tal y como están planteadas las cosas en Venezuela, la convalecencia de Chávez equivale a una cuenta regresiva hasta la muerte. Sin embargo, el régimen venezolano sigue jugando al rumor, al chisme, al no admitir que se constituya ninguna junta médica ni que se realice ningún reporte especializado, lo cual ha convertido en un tabú el misterioso padecimiento del mandatario. El tiempo del chavismo sin Chávez se agota, simplemente no existe, por ello es que han tratado de ganar tiempo con la ausencia del presidente, apostando al rumor y a la desinformación.

ANALISTA POLÍTICO

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