Abogados rechazan creación de cárcel en Isla Coco

Los planes del Gobierno Nacional en querer establecer un nuevo centro de reclusión en otra isla del Pacífico es rechazada por el Colegio Nacional de Abogados (CNA).

En días pasados el presidente Juan Carlos Varela, destacó que entre los planes del Gobierno está una cárcel en la localidad de Punta Coco, en el extremo sur de la isla del Rey, la más grande del archipiélago de Las Perlas y que se pretende aislar a cabecillas de las pandillas más peligrosas del país.

Sherly Castañeda, miembro del Colegio Nacional de Abogados manifestó que la reforma de los Derechos Humanos en el 2001 establece claramente que la comunicación de abogados a cliente es ininterrumpida, igualmente lo establece el artículo 2008 del Código Judicial.

Agregó que a su representado el Gobierno de Cambio Democrático (CD) le han violentado todas sus garantías constitucionales y le violaron todos sus derechos al dilatarle su libertad y hoy día se manifiestan en que quieren trasladarlo a una isla penal de Coco, en lo cual el Gobierno actual no puede mantener esa isla.

La jurista considera que con la isla penal en Punta Coco habría un retroceso al sistema Penitenciario, porque no se establece el respeto a los Derechos Humanos.

Por su parte, Carlos Herrera Morán, secretario del CNA destacó que no se ha podido sacudir la hegemonía que tiene dentro de las cárceles la Policía Nacional (PN), de modo que Gabriel Pinzón no ha comprendido que es el director del Sistema Penitenciario y se comporta como un subalterno de la PN.

“Mientras sea la PN, la que dicte las instrucciones dentro de las cárceles el señor Gabriel Pinzón no va a poder hacer los cambios que necesita el Sistema Penitenciario, si alguien solicita el traslado de un reo de una cárcel para otra no le paran bola, sino lo autoriza el comisionado jefe de seguridad de las cárceles”, adujo Herrera Morán.

El abogado aseguró que en una celda deben haber 40 detenidos, pero hay 150 reos durmiendo uno sobre otro, la comida que se reparte en las cárceles no es una dieta balanceada, a pesar que se gastan 10 millones de dólares en comida; además hay problemas de agua potable.